55. Acorazados

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22:00 | Jueves 17 de Octubre de 2030

Decido hacer caso a las chicas y me quedo en casa de Alicia. Lo cierto es que aunque preferiría estar sola, sé que tampoco quiero dejarla. Sé que mi hermana menor es muy fuerte y aunque se esmera por venderme una imagen de fortaleza es muy probable que algo se haya resquebrajado en ella.

Nos acomodamos en su cama luego de habernos dado una buena ducha. Ninguna ha dicho gran cosa durante el viaje de regreso a Jacksonville, creo que hemos decidido postergar hablar del tema para no agravar el dolor del momento. Sé que ella lo evita por que en pocas horas deberé presentarme en el entierro de Emily. No sé cómo veré a su familia a la cara. Y por otro lado sé que ella no quiere hablar de su violación, va a tratar de negarlo igual que muchas otras víctimas.

A pesar de que hemos dormido casi todo el día, seguimos agotadas, pero ninguna quiere cerrar los ojos hasta que nos confirmen que nuestro padre está en custodia de Mundo Amazonas. Aunque insistí en ir personalmente, Hannah me convenció de no hacerlo. Finalmente llega la confirmación de Valeria. Exhalo una gran bocanada de aire, pues sé que jamás podrá volver a lastimar a nadie.

Me giro en la cama y observo un punto en la pared, debo dormir, pues el día de mañana puede que deba tomar decisiones importantes.

*****

07:20 | Viernes 18 de Octubre de 2030

Andrea y Natasha pasan por mí muy temprano. Mi rubilinda sin pudor alguno me roba un beso frente a su hermana. Me abochorno un poco, no sé sí porque es su hermana o porque me cuesta terminar de asimilar que lo haremos en público. Como sea, en este caso no importa, pues Andrea solo sonríe mientras maneja. Aunque luego de un momento a otro nos empieza a hablar.

- Chicas... - farfulla – creo que ya tienen claro que las apoyamos.

- ¿Pero? – consulta mi rubilinda.

- No quiero que se confíen, pues no todos van a ser "amistosos" con ustedes – nos aconseja.

- Sabemos que no todo va a ser lindo – sostiene Nati.

- No hermana, me refiero a que no siempre van a toparse con gente con la que van a poder razonar, que tiene adherido en su ADN un odio innato contra lo que no entienden – explica.

- Vaya... - masculla Nati.

- Estaremos bien, nos cuidaremos – apunto con esperanza – tenemos amigos que no nos van a dejar solas.

- Bien, entonces recuerden que no están solas, que pueden apoyarse en las personas que conocen – apunta – no dejen que limiten su forma de ser.

- Gracias Andrea – contestamos al mismo tiempo Nati y yo.

Bajamos del vehículo juntas y vamos con nuestros brazos entrelazados. Las miradas y murmullos empiezan a acecharnos. Decidimos no darles importancia, ya que pensar de más podría jugarnos una mala pasada.

Los murmullos parecen cesar cuando de pronto somos escoltadas por algunos de nuestros amigos: Lucas, Paula, Emma, Dana y Jesse. Nati respira aliviada y yo sonrío, pues creo que de alguna forma mi influencia ha calado en sus conciencias. Un par de chicos último año empiezan a hostigarnos. Los chicos intentan callarlos, pero no lo consiguen. Pero afortunadamente salen dos muros para protegernos: Dean y Jake. Les aclaran que si se meten con nosotras se meten con el equipo completo de fútbol americano. Lo dicen suficientemente alto como para que el resto del público se entere. Emma da una sonrisa tímida a su hermano en agradecimiento. Dean se acerca hacia nosotras y nos dice cantando: "Sí tienen problemas, ya saben a quién llamar"

Víctima IndefensaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora