Antes de morir (KOOKMIN)

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Toda la noche fue risas, bailes torpes, bromas, lágrimas de alegría, comida y bebidas... Jimin disfrutaba todo, hasta de los malos chistes de Jin quien había sido la pareja de Namjoon.

Jin miraba las fotos de la mañana y cuando vio a Jimin embelesado con la mirada de su pelinegro lo grabo.

-Son perfectos–Comentó Jin y miro a Namjoon.

-Si, a su manera pero perfectos–Namjoon sonrió como un hermano orgulloso.

Despues del baile Jimin sintió un mareo asi que se sentó con Jungkook, tomó agua y lo abrazo con tristeza.

-¿Estas cansado Minnie?–Preguntó Jungkook acariciando su cabello, el menor negó.

Jungkook le levantó el rostro y frunció el ceño.

-¿Por que lloras bebé?–Pregunto Jungkook y seco sus mejillas.

Jimin sonrió y cerró los ojos acunando su rostro en las manos de su amado.

-¿Que tienes Minnie?–Preguntó preocupado.

-Estoy muy feliz Jungkookie–Dijó Jimin sorviendo su nariz. -Estoy feliz por ti, por los chicos, por que mis padres volvieron a intentarlo, por que estoy contigo, por que logre que me quisieras, por que irás a la universidad y serás el mejor en lo que haces, estoy feliz por todo este tiempo contigo...

-¿Por eso lloras amor mío?–Jungkook sonrió enternecido.

-Si, la felicidad no me cabe en el pecho–Jimin río y seco su lágrimas. -Te amo Jeon Jungkook.

-Te quiero Park Jimin.

Jimin sabía que sus palabras eran mucho más grandes que las del pelinegro pero no le importaba, al menos ocupaba un lugar en su corazon y eso era lo que interesaba.

Después de mirarse unos segundos unieron sus labios en un lento y cariñoso beso, cerraron los ojos y acariciaron las mejillas del contrario olvidando que había personas a su alrededor viéndolos.. sus labios se movían despacio y suave, es que encajaban a la perfección, sus sabores juntos eran perfectos, el calor de ambos también era perfecto... ellos eran perfectos... juntos, sólo juntos era la mejor combinación.

Se separon por aire y unieron sus frentes.

-¿Enano que me hiciste?–Susurró Jungkook.

-A propósito nada, todo fue inconsciente–Jimin sonrió y le dio un corto beso.

-Por favor ustedes me dan diabetes–Bufó Jackson. -Tomaré agua.

-Deja la envidia–Jungkook sonrió y abrazó a Jimin subiendolo a sus piernas. -No tengo la culpa de Jaebum no sea dulce contigo...

-¿No soy dulce?–Preguntó Jae sentándose en las piernas de Jackson.

-Si lo eres Jae–Jackson fulminó con la mirada al pelinegro. -Solo que lo demuestras diferente.

-Si Jae es dulce yo soy una bolita de azúcar–Dijo Baek riendo y se sentó en las piernas de Min Ho.

-No es por ofenderte pero Baek tiene razón, es más dulce él con sus golpes y sus bromas que tu con esa cara de ogro–Habló Nam acariciando el muslo de Jin. -Jinnie si es dulce, debes aprender de él y de Jimin.. te derriten el corazón.

Jin le dio un beso y sonrió.

-Pero soy dulce, un amor completo, que ustedes no se lo han ganado es diferente–Jae se cruzó de brazos y miro hacia otro lado ofendido.

-Si no lo ganamos nosotros que te conocemos de toda la vida no se quien lo pueda hacer–Soltó Min Ho y tomó toda su bebida.

Jae golpeó la cabeza de Min Ho y sonrió divertido al ver que escupió sobre su pantalon.

-Idiota arruinaste el pantalón que Jimin me regaló, pagas la lavandería–Min lo miro con el ceño fruncido.

-Eso no importa ¿verdad Jimin?–Preguntó Jae y lo miró. -¿Se quedó dormido?–Preguntó con una ceja levantada.

Los presentes lo miraron y vieron a un Jimin con los ojos cerrados en el hombro del pelinegro mientras hacía un pequeño puchero, con su mano restrego su nariz y acomodó bien su rostro más cerca del cuello del mayor.

-Parece un gato–Dijo Jae.

-No, parece un pollito–Dijo Nam.

-Un unicornio–Dijo Jackson y soltó una risita contagiosa.

-No, mejor un niño.. un bebé para ser mas específico–Dijo Baek.

-Jimin es todo eso junto–Dijó Jin con un suspiro. -Asi que no lo vean con todo separado, es un niño muy dulce.

-Yo te aseguro que no es un niño–Dijó Jungkook haciendo reír a los demás.

-¡Idiota calenturiento!–Dijo Min Ho riendo como los demás.

-Lo llevaré al auto para que lo lleven a casa, él no está acostumbrado a desvelarse–Jungkook tomó el celular del menor y lo guardo. -Ya vuelvo.

El pelinegro salió del lugar con Jimin en brazos siendo visto por todos, hasta Tae lo miraba con nostalgia y envidia.

Salió y buscó al selor Lee con la mirada, lo encontró y sonrió al escuchar un dulce ronquido de Jimin. Caminó hasta donde él señor Lee y este lo miro serio.

-¿Que le pasó?–Preguntó el señor Lee preocupado.

-Se quedó dormido, debe estar cansado–Jungkook lo tranquilizó.

Abrieron la puerta y entre los dos acomodaron a Jimin en el asiento trasero, Jungkook le dio un beso en la mejilla y Jimin suspiró.

-Gracias señor Lee, en serio gracias acompañarlo hoy–Dijo Jungkook cerrando la puerta con cuidado.

-No agradezca joven Jungkook, lo hice con mucho cariño... él nunca había estado más felíz, debo agradecerle yo a usted.

-Yo feliz de hacerlo feliz.. y si él me deja lo haré para toda nuestras vidas–Jungkook mirándolo por la ventana.

-Eso espero, por que lo llevó cuidando desde los tres meses de nacido y sólo quiero que él sea felíz–El señor Lee abrió la puerta del copiloto y lo quedo mirando. -Felicidades, espero y entre a una buena universidad.

-Yo igual–Jungkook sonrió y sacó el celular del bolsillo. -Esto es de él–Se lo entregó y entró agitando la mano.

Jungkook buscó a los chicos y seguían en la mesa sentados hablando.

-¿Ya se fue?–Pregunto Min Ho.

-Si, el señor Lee se lo llevó–Jungkook sonrió y se cruzó de piernas tomando lo del basó. -¿Que mierda es esto?–Preguntó con el ceño fruncido.

-Despues de media noche es alcohol, nada de bebidas sanas–Le dijo Nam.

-¿Jungkook podemos hablar?–Interrumpió Taehyung.

-No...

-Solo es un...

-No me interesa Taehyung, no quiero hablar contigo, ve y habla con Hoseok que ese siempre está dispuesto–Jungkook levantó la mirada y le sonrió con falsedad.

-¡Por fin volvió el hijo de puta de Jungkook!–Gritó Jackson y empezó a reír.

-¿Como me llamaste?–Jungkook enarco una ceja.

-Hijo de puta, por que eso eras antes de que el unicornio te volviera sencible–Le dijó Jackson.

-Si amigo, este tiene razón–Min Ho señaló al anterior. -Con Jimin pareces un niño, y sin él el mismo hijo de puta de siempre donde no le importa una mierda las estupideces que piensan o hacen los demás.

-Todos tenemos dos caras–Dijo Jin acariciando el cabello de Nam, los presentes lo voltearon a mirar. -Soy uno haciendo negocios y otro con mi Nam, no colocó ninguna barrera con él y soy lo que soy.. ¿eso es el amor no?.