Pedido por Abigail-2000
Espero que te guste uwu <3
--------------Hasta La Muerte
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- Tengo sueño- Susurró una chica mirando la pila de libros que tenía al lado... - Debería dormir? O debería seguir estudiando?- Se preguntaba así misma bostezando.
- Hermana... Sigues despierta a estas horas?- Preguntó su hermano mayor.
- No puedo darme el lujo de dormir... Tengo que estudiar mucho más!- Exclamó la joven dándose pequeños golpes en sus mejillas, dejándolas rojas.
- Deberías descansar, no dormir es dañino para tu salud...- Insistió su hermano.
- Hashirama... No tengo sueño.- Dijo haciendo un puchero.
- Ya regreso.- Dijo Hashirama para después retirarse de aquella biblioteca.
Al salir, el castaño fue a la habitación de su hermano, tocó tres veces y él salió.
- Que sucede? Ya es tarde.- Dijo Tobirama en ropas de dormir.
- No quiere ir a dormir.- Dijo Hashirama suspirando y cerrando sus ojos.
El de ojos rubí dió un largo suspiro y salió de su habitación en busca de su hermana.
Al entrar a la biblioteca, la encontró recargada en un libro abierto mientras dormía profundamente.
- Será idiota.- Dijo Tobirama mientras iba en dirección a ella.
La cargó en brazos y la llevó a su habitación con su hermano mayor detrás.
La recostó delicadamente en su cama y la arropó.
- Más te vale despertarte temprano porque quiero presentarte a alguien.- Dijo Tobirama mientras salía de su habitación.
- No te escuchará... Se nota que está muy dormida.- Dijo el Senju mayor.
- Pues entonces tendré que despertarla yo.- Dijo con una sonrisa maliciosa.
A la mañana siguiente, dos jóvenes despertaron temprano y entraron a la habitación de la menor.
Ella estaba profundamente dormida.
Tobirama la tomo delicadamente por los hombros y dijo con voz baja.
- Despierta __- Dijo el de ojos rubí.
Al no recibir respuesta, sonrió con mucha malicia.
Entonces fue cuando la comenzó a agitar para que despertara, dió el resultado que quería. Pues la chica despertó alarmada viendo a todas direcciones.
- Terremoto- Dijo ella un poco adormilada.
Pero al darse cuenta de que era su hermano el que la agitaba, su ceño se frunció y lanzó a su hermano.