Capítulo 56.5 [Extra]

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A pesar de que esa noche era sumamente especial para sus padres, estaba agradecido con ellos de que se tomaran un breve momento para aconsejarle respecto a Jihyun. Ahora que estaba más seguro de lo que le sucedía, tuvo el coraje suficiente de acercarse a su lado una vez más. Park Jimin apenas si lo vio, comprendió que necesitaba un poco de privacidad así que tan solo le sonrió y se apartó en busca de su esposo.

-No quiero hablar contigo- Vante lo veía llorar y aun así no comprendía que quería estar lejos de él. Peor aun fue lo que hizo su madre que en lugar de respaldarlo sencillamente se hizo a un lado dejándolo solo con el Alfa.

-Pero yo si, no nos hace bien a ninguno de los tres esta situación y en verdad quiero remediarla...- Luego de dar unos pasos más hacia adelante colocó ambas manos en las mejillas del más pequeño para hacer que lo observara.
-¿Me perdonas?

-Este es precisamente el problema Vante. Me lastimas siendo así de amable, siquiera... deberías disculparte y aun así lo haces por mí. Sería más sencillo que te enfadaras conmigo o que me recriminaras por algo.

-No puedo hacer algo que no siento. Para alguien como yo que pensaba no tener a nadie... todo esto es un regalo muy hermoso. Por eso es que no puedo molestarme contigo y haría cualquier cosa por verte feliz- Sonrió al Omega a quien después de acariciarle las mejillas, le robó un pequeño beso de los labios.
-Disfrutemos de esta noche ¿Si?- Tal parece que esa última acción logró animar a Jihyun que por primera vez en ese día le mostró una sonrisa.



-Vante... lo lamento mucho, en verdad estoy actuando muy extraño, creo que nuestro cachorro me está afectando- No pudo evitar disculparse mientras bailaba abrazado y apegado al Alfa una melodía por demás tranquila que se predisponía a brindar un pequeño momento romántico para las parejas.

-Ya no hablemos de eso- Por un momento pensó en decirle que no debía disculparse, que era normal tener dudas pero quizá eso hubiera arruinado todo otra vez así que prefirió concentrarse en el más pequeño, en lo agradable que se sentía tenerlo cerca y abrazando su pecho.

-Bien, entonces hablemos de lo apuesto que te ves de blanco, como todo un príncipe.

-Respecto a eso... también debo agradecerte, que me acompañes en mis labores diarias y en mis funciones porque estaría perdido de otro modo.

-Lo dudo, las personas del pueblo rápidamente te tomaron cariño y eso no tiene que ver conmigo. Aunque a decir verdad me molesta un poco cuando algún o alguna Omega se te acerca.

-Pero yo solo tengo ojos para una persona- Dichas palabras fueron selladas por el primero de varios besos que se obsequiaron en esa noche a la que aun le restaba mucho por delante, en la que deseaba finalmente establecer una marca en su pareja.



Estaba a punto de amanecer y ellos aun continuaban en la celebración. El Omega se estaba divirtiendo tanto que no se atrevió a pedirle volver antes al palacio pero ciertamente se encontraba un poco impaciente de llevarlo a la habitación.

Cuando le dijo a Jihyun que quería regresar, este estuvo de acuerdo pues mencionó ya sentirse cansado también, que normalmente duraría un poco más pero que su cachorro consumía parte de su energía.

El Omega se quedó dormido sobre su hombro a los pocos minutos de haber subido al carruaje. Evidentemente no podría hacer lo que tenía planeado, desde luego no iba a despertarlo para tener intimidad con él. Una vez que estuvieron en su hogar simplemente lo cargó en sus brazos y lo recostó en la cama, le quitó parte de la ropa para que durmiera más cómodo y luego hizo lo mismo consigo antes de tenderse a su lado.

MoonchildDonde viven las historias. Descúbrelo ahora