Capítulo 60.0 [Extra]

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[Palacio Kim]

-Jungkook... detente... ya para por favor... eso es para el cachorrito.

-Es mi desayuno, ayudé a crear este cachorro así que la mitad de la leche es mía. Además IU misma dijo que debías descargar porque no era normal que al cuarto mes ya estés produciendo.

-Aun así... ahh...- Su Alfa sencillamente lo ignoró y regresó a succionar de su pezón izquierdo, restando importancia tanto a sus súplicas como al hecho de que se encontraban tendidos sobre el jardín de flores del palacio. La idea de ir allí en primer lugar fue porque Jungkook quería retratarlo en un cuadro pero en cuanto finalizó esa labor se acercó hasta él y comenzó a besarlo hasta recostarlo sobre el césped. Siendo honesto consigo mismo, no opuso resistencia alguna en cuanto comenzó a desnudarlo e incluso colaboró con el azabache pero ciertamente no esperaba que comenzara jugar con su pecho, puede que no le importara ser descubierto en pleno acto sexual por sus oficiales pero lo que su esposo estaba haciendo ahora era por demás vergonzoso. Aún peor que eso era escucharse a sí mismo gemir descontroladamente por esas acciones, percibir la humedad en su miembro así como también en su entrada.

-Ven aquí bonito- Pasó a sentarse en el suelo y tirar de la muñeca de su Omega para que se acomodara sobre él. Con las manos bajó hasta la parte posterior de la cadera en donde dio una palmada que hizo estremecer a Taehyung y que consecuentemente frotó el cuerpo contra el suyo, como si rogara que lo tomara de inmediato.

-No, mhn... no con tus dedos- Se quejó al sentir esa intromisión pues en ese momento solo quería que el Alfa se adentrara profundamente en él.

-Dime entonces con qué quieres que entre.

-Con esto... pon esto en mí- Respondió rápidamente al mover su brazo hacia atrás y acariciar con la palma de la mano la erección del azabache quien de inmediato lo obedeció, le separó los glúteos y luego se deslizó en su interior. A pesar de que Jungkook intentó ser cuidadoso al comienzo, él mismo colocó ambas manos en los hombros de su Alfa para impulsarse hacia arriba y abajo.

-Estás... haciendo un maravilloso trabajo amor, mereces... una recompensa- Ni bien dijo aquello regresó jugar con el pecho de Taehyung pero esta vez del lado derecho, lamiendo y mordiendo en primera instancia hasta concentrarse en succionar de este.

-Kookie... ahh... deja eso ya... voy a correrme- Tal parece que su esposo tomó aquello como una provocación pues ahora no solo atendía su pecho sino también su intimidad sin embargo en cuanto estaba listo para terminar, Jungkook detuvo su accionar durante varios segundos para impedírselo. Esa especie de juego perverso se repitió muchas veces, la excitación y la tentación fueron tales que algunas lágrimas deslizaron de sus mejillas, fue solo cuestión de tiempo antes de que suplicara a su Alfa que lo anudara y lo llenara de su esencia.



-Quisiera poder retratarte de este modo Taehyung- Ya era la cuarta vez que anudaba en su Omega quien ahora estaba tendido debajo suyo, con las piernas abiertas en ambos lados de su cadera, con los ojos cerrados y un sonrojo en las mejillas. Por si eso no fuera sumamente tentador también estaba el hecho de que a Taehyung se lo veía exhausto, con las respiración agitada e intentando controlar los espasmos de su cuerpo.

-Eso... sería... vergonzoso...

-No, sería encantador. Te ves hermoso...- Una escena que ante sus ojos era perfecta, una en que la belleza de su Omega era destacada por la luz rojiza de la puesta de sol que contrastaba con el color de piel canela que poseía. Embelesado por esa imagen, enmarcó la silueta de Taehyung deslizando ambas manos por los lados de su cuerpo, deteniéndose poco después sobre el abdomen apenas abultado en donde se encontraba su cachorro.
-Y serás mucho más encantador cuando este cachorrito crezca un poco más.

MoonchildDonde viven las historias. Descúbrelo ahora