XI

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Anne:

El viaje duró aproximadamente como 40 minutos, las chicas en los asientos de atrás de la camioneta, cantaban canciones de One direction con el único propósito de molestar a Moody, quien para ese entonces estaba pensando fríamente si tirarse de la camioneta era una mala idea.

Diana reía con Ruby mientras Jane, Josie, Tillie y Prissy cantaban a todo pulmón la misma canción de siempre: steal my girl.

- YA NO AGUANTO MÁS... - dijo con dramatismo Moody, cosa que causó gracia entre las chicas- ¿alguien me puede prestar audífonos?

Nadie contestó, y Moody se pegó un cabezazo contra el asiento de Blythe, quien estaba manejando. Yo iba sentada de copiloto.

Quería escuchar música, la verdad era que estaba un tanto aburrida allí dentro, los viajes en auto no eran lo mío.

Me puse un audífono, pero cuando estaba por ponerme el otro, miré a Gilbert, Lucía muy aburrido. Sonreí de lado y le pregunté con amabilidad:

- ¿quieres?- le pregunté mostrándole el audifono.

Me sonrió y asintió, me acerqué y con suavidad, le puse el audifono en su oído izquierdo.

- qué feo Anne, qué feo...- dijo Moody negando con su cabeza, luego de ver toda la escena.

Reí fuerte y claro mientras negaba con mi cabeza. Mi música era variada, había de todo, desde música viejita que escuchaba la gobernanta todo el día, hasta música urbana que oía Tara todo el día en su mp3 antiguo.

Puse aleatorio y me sorprendió que gilbert se supiera una canción de twenty one pilots. Sonreí y lo miré, él me sonrió de vuelta y miró por unos instantes mis ojos.

- no sabía que te gustaban...- dijo riendo.
- ni yo que a ti también- reí - me gustan desde hace 3 años, más o menos...
- ¿te gusta Arctic monkeys? - me preguntó luego de una pausa.
- Obvio que si, los adoro- dije con emoción- vaya Blythe, tu gusto musical no me ha decepcionado...- dije con falsa formalidad.
Gilbert solo rió y miró el camino, yo sonreí y volví a estar en silencio. Aquel chico me estaba comenzando a agradar...

Gilbert:

Estaba conduciendo mientras compartía audifonos con Anne, llevabamos un buen rato compartiendo música, hasta que salió una canción que me dejó como en una ensoñación... Era perfecta.

Miré a Anne por algunos segundos, el brillo de la radio le daba en su pálido rostro, ella tenía sus ojos cerrados... Se veía muy linda.

Sonreí involuntariamente, y miré el camino, estábamos por llegar al centro, y fue cuando Anne abrió sus ojos y dijo:

- el estanque de aguas resplandecientes...- suspiró- adoro este lugar...

Sonreí y miré el lugar, aun estaba anocheciendo, las estrellas aparecían recién en el firmamento, y la luna llena brillaba en todo su esplendor.

- ¿Cómo se llama la canción?- sonreí.
- Crema de estrellas... De los soditas...- dijo con los ojos cerrados, disfrutando de la música.
- ¿soditas? - reí.
- soda stereo... - me miró a los ojos.

Asentí y sonreí.
- la agregaré a mi playlist. - miré a Anne por unos segundos y luego volví a mirar el camino.

Llegamos al centro comercial a la hora de cenar, revisé mi celular para cerciorarme de que no había ningún problema en casa. No tenía ni una llamada perdida, nada. Sonreí conforme y lo guardé en mi bolsillo.

Fuimos a comer todos juntos a un local de pizza, compramos 4 pizzas gigantes entre todos y las chicas fueron por una bebida grande. Nos sentamos en una mesa gigante y comenzamos a comer.

Anne with an E | siglo XXIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora