Anne with an E | siglo XXI

XIV

Después de almorzar juntos, Blythe me fue a dejar en su automóvil a mi casa.

Estábamos camino a Green Gables, escuchando música a todo volumen. Eran 5 de la tarde, y el sol comenzaba a tener ese color dorado tan lindo...

Abrí la ventana, dejando que la tibia brisa entrara en el auto. Blythe me sonrió y le subió un poco más a la música, yo cerré mis ojos, mientras oía como Gilbert entonaba a coro la canción "the way you make me feel" de Michael Jackson.

Abrí mis ojos y lo observé por unos minutos, mientras él cantaba alegremente, con sus ojos cerrados, solo sintiendo la música...
Sonreí involuntariamente... Ese chico, Gilbert Blythe, me estaba hechizando en cuerpo y alma, como Elizabeth Bennet a Mr. Darcy en orgullo y prejuicio...

"Hechizada en cuerpo y alma..." Así me sentía...

Gilbert abrió sus ojos y me miró, yo le sonreí y seguí cantando la canción a todo pulmón, hasta que llegamos a Green Gables...

Gilbert me sonrió ampliamente y apagó el motor. Nos quedamos mirando por unos segundos, él me sonrió de lado, de esa forma tan linda que tenía para sonreír... Yo le devolví la sonrisa, eso sí, con las mejillas sonrojadas y calientes.

Blythe se me acercó poco a poco, y suspiró cerca de mi boca, yo me mordí el labio nerviosa, cosa que Gilbert imitó... Agarró mi mentón con rapidez y me plantó en los labios un beso rápido y muy intenso, el cual me hizo estremecer. Sentí un escalofrío recorrerme la espalda de principio a fin, y como una corriente comenzaba a expandirse por mis manos y pecho...
Sin duda, Gilbert Blythe, me estaba hechizando...

Sonreí y me distancié de él, él besó mi mano con dulzura, y me sonrió.

- creo que, hasta el lunes... Zanahoria. - me sonrió y besó mi mejilla.
- hasta el lunes, Blythe. - le sonreí y besé su mejilla antes de descender del vehículo.

Acomodé mi mochila en mi hombro y busqué las llaves en mi bolsillo. Gilbert encendió el motor del automóvil y salió de Green Gables, vi como su automóvil se alejaba poco a poco, y sonreí. Había sido un día demasiado loco.

Entré a mi casa y dejé mis cosas en el sofá, revisé mi móvil, tenía una llamada de Diana.

Le devolví la llamada, nerviosa y ansiosa.
-¡Anne! -dijo feliz- dios, hasta que contestas, me tenías tan nerviosa.
- Diana, necesito que vengas a Green Gables, ahora...
- ¿Ahora? - preguntó extrañada.
- oh sí, ahora...- reí- lo que te voy a contar no es para hablarlo por teléfono.
- llego en 20, llevaré cabritas. Prepara la película.

Se cortó la comunicación y yo reí, Diana era genial.

Al cabo de 20 minutos, Diana ya estaba sentada en mi cama, mirándome ansiosa y yo buscando las palabras correctas para contarle todo lo sucedido aquel día.

- vamos Anne, no debe ser tan grave... ¿Qué pasó?- dijo un tanto desesperada, poniéndose de pie.
- Blythe... Nos besamos.

Diana se sentó de nuevo en la cama y se tapó la boca con una de sus manos, en un gesto delicado muy propio de Diana.
- ¿QUÉ? ¿SE BESARON? ¿CUANDO...?

reí fuerte y claro ante su reacción.
- fuimos donde el director... Nos suspendieron por 3 días, y bueno, de regreso al salón él me pidió si podíamos ir al baño, yo le dije que sí, se mojó el cabello y yo la cara y luego... Entró un profesor y fue todo demasiado rápido, me agarró de la cintura y me metió dentro de un cubículo y a a a a - me tapé la cara con una almohada.

- y se besaron...- dijo Di- pero ¿Una vez o...?- me miró intrigada, mientras subía y bajaba las cejas.
- fue más de un beso... Y diosss- dije roja como tomate- no los conté Di; pero fueron oh... Si pudiera morir haciendo algo, sería besándolo...- dije con dramatismo.- fue... Mágico.