Anne with an E | siglo XXI

LXXVI

Gilbert:

Luego de la maravillosa cena de navidad que tuvimos en Green Gables, Bash y yo bebimos un par de cervezas para celebrar nuestra primera navidad juntos.

Los nervios me carcomían por dentro, las ansias de recibir un mensaje de Anne respondiendo a mi pregunta, crecían al pasar de los segundos, y mi estómago cada vez estaba más y más apretado...

- Tienes cara de que vas a vomitar... - dijo Bash medio riendo, para luego darle un buen trago a su cerveza. - ¿Te sientes bien?

Lo miré con gesto angustiado y negué con la cabeza.
- ¿No? ¿Qué pasó? ¿Pasó algo con Anne? - preguntó preocupado.
- No, no es nada malo... O eso espero... - dije a modo de suspiro mientras dejaba mi cerveza sobre la mesita que estaba a un costado del sofá. - Estoy ansioso...
- ¿Por qué? Hm- preguntó Bash confundido - ¿Quedaste de salir con Anne... O...? - dejó la pregunta abierta.
- No, no es eso... Es que... - miré al cielo y suspiré - hoy le pedí a Anne que sea mi novia...

Bash, que le estaba dando un buen trago a su cerveza, por poco lo escupe todo.
- ¡¿Qué?! - dijo feliz - ¡Pero si eso es buenísimo! - me sonrió y dejó de lado su cerveza - ¿Te contestó? ¿O te dijo que lo debía "pensar"? - negué efusivamente y Bash alzó una ceja, intrigado.
- No sé lo pedí... De forma directa - Bash se volteó hacia mí, aún más confundido.
- ¿A qué te refieres con "no de forma directa"? - Esquivé su mirada y pasé una de mis manos por mi cabello.
- Se lo pedí... Pero no se lo dije... - suspiré y Bash se apoyó en sus rodillas con sus codos.
- ¡Oh vamos Blythe! ¿Qué hiciste? - dijo medio riendo.
- ¿Recuerdas el diccionario miniatura que le compré el jueves pasado? - Bash asintió efusivamente- Bien, pues... Le dejé un mensaje para descifrar dentro...- Bash me miró confundido.
- ¿Qué mensaje? - alcé los ojos y me puse de pie, busqué en la librería de la sala de estar un diccionario y lo llevé al sofá para enseñarle como le dejé el mensaje.
- Mira... Encerré las letras del inicio de cada sección, y les puse el número correspondiente debajo, para que ella, dependiendo del orden numérico, pueda hacer la frase "¿Quieres ser mi novia?"...- Bash me miró asombrado.
- Vaya Blythe... - rió con suavidad - es una... Interesante forma de declararse... - tomó el diccionario.
- Debía ser de una forma inusual... - sonreí - ella es así... No podía ser normal o común... No va con ella, no va con nosotros - sonreí y miré al cielo.

Nos quedamos en silencio algunos segundos.
- Y tú tienes miedo, porque no sabes si ella será capaz de descifrar tu mensaje...- yo asentí no tan convencido.
- No sé si no sea capaz... Es muy inteligente, incluso, a veces siento que es muchisisísimo más inteligente que yo... - sonreí embobado - solo, tengo miedo... ¿Y si simplemente lo pasa por alto? ¿Y si se aleja? ¿Y sino quiere ser mi... Novia? - le pregunté asustado.

Bash volteó los ojos y puso una de sus manos sobre mi hombro.
- ¡Oh vamos Blythe! ¡Es Anne! Se nota de kilómetros que los dos se quieren... - me sonrió tranquilizadoramente - si no te dice nada, es porque... No lo descifró... - asentí mientras intentaba convencerme a mí mismo de que, lo que decía Bash, era verdad.
-¿Y qué hago sino lo descifra? - le pregunté asustado.
- Pues, sino te dice nada en los próximos dos días... Yo creo que deberías preguntarle, pero de forma más discreta...algo así como... Mmmm ¿Leíste la nota que te dejé? - asentí lentamente- o quizás ¿Abriste mi regalo?, Esa sería más discreta, porque quizás ni siquiera revisó el interior... - yo asentí y suspiré - aunque no lo creo... Es Anne... Ya sabes...- sonreí al recordarla y miré a Bash - Pero relájate Blythe, todo saldrá bien.

Asentí y Bash se puso de pie.
- ¿Ya te vas a dormir? - le pregunté en un susurro.
- Sí, eso creo - sonrió - mañana debo ir a comprar algunas cosas para el corral... - asentí con lentitud - ¿Me prestas tu automóvil mañana?
- por supuesto... Mañana no haré nada - le sonreí - es todo tuyo.
- Gracias amigo... - estiró su espalda- Descansa ¿Sí? - asentí y le sonreí.
- tú igual Bash... Buenas noches.
- Buenas noches - dijo medio riendo para luego entrar al cuarto que antes era de mi padre.