Ni Yoongi sabía que pasaba con él. Era una sensación en constante cambio, a veces lo extrañaba, otras veces lo odiaba, después lo necesitaba, para finalmente volverlo a odiar.
Era una montaña rusa de emociones que no tenían principio ni fin, como un círculo vicioso y Min lo sabía. Un día lo amaba con desespero y locura, y al día siguiente no quería ni verlo en pintura.
Era una contradicción tras otra. ¿Pero acaso alguien lo podía culpar? No realmente, había perdido a quien más amaba en un abrir y cerrar de ojos, de un día para otro. Y ahora aunque estuviera rodeado de personas todo el tiempo, se sentía completamente solo.
Su lobo lloraba constantemente en silencio, haciéndolo sentir aún más solo y olvidado; extrañaba a su alfa y se martirizaba pensando que realmente su destinado nunca había sido suyo realmente. Aún cuando Yoongi se sentía completamente de Jung Kook. Es decir, Jeon no le pertenecía, pero Min le pertenecía en cuerpo y alma.
No solo por la marca en su cuello, o por el vínculo que claramente se sentía entre ambos. Sin mencionar el aroma entremezclado de ambos. Era una sensación de pertenencia de la cual Min no podía escapar, aunque lo intentara.
Entonces, comenzó a pensar:
¿Por qué el destino lo había escogido a él como su alfa destinado si no iba a amarle?
¿Por qué el destino los había hecho conocerse si no iban a estar juntos?
¿Por qué tenía que amarlo de esa manera si no iba a ser correspondido?
Entonces, una vez más, comenzó a pensar en mil respuestas que resolvieran sus preguntas, hasta llegar a la más fuerte y clara conclusión:
Karma...
Es decir, él era el responsable de haber acabado con las vidas de muchísimas personas, había marcado para siempre las vidas de muchas otras y además, indirectamente había destruido muchísimas más por culpa de sus acciones y decisiones.
¿En serio había pensado que el destino le había regalado un alfa destinado para ser feliz? Si en algún momento de su vida lo pensó, ahora...
¡No!
Su encuentro con Jeon no había sido para su felicidad, ni mucho menos para un final feliz y ahora lo entendía.
Su encuentro con su destinado era para hacerlo pagar por todo el daño que había hecho a otras personas. Y es que ¿en qué momento se le había ocurrido seriamente que un alfa como Jeon Jung Kook pudiera amarlo? Es decir, él era un oficial militar condecorado y además, Coronel, proveniente de una familia con una larga generación de alfas que habían servido a su país. Era completamente todo lo contrario a él y a su delictiva familia.
En serio, ¿en qué demonios había estado pensando?
Entonces, de nuevo pensó en el destino.
Sonrió con tristeza y comprensión.
Suspiró...
Bueno, en definitiva, todos obtenían lo que se merecían. De eso se encargaba el Karma.
Y ahora Min estaba completamente seguro de eso.
Prisión de omegas.
Pabellones.
Poco después de la visita de Jimin.
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Prisión de Omegas (Kookgi) +18
FanfictionEl infierno para algunos, el paraíso para otros. La prisión de omegas era lo que podría denominarse el reino de Min Yoongi, un omega preso como todos los demás, pero al mismo tiempo, completamente diferente a ellos. Min poseía un gen dominante y po...