Lunes, tres días antes del celo de Jeon.
Prisión de omegas, salón común.
Hora: 7:10 a.m
Estaban en medio del desayuno, cuando de pronto, Yoongi notó la desaparición de su alfa.
—¿Dónde mierdas está? —susurró Yoongi, mirando a los dos oficiales alfas que lo vigilaban desde lo lejos.
Choi y Park estaban de pie a un lado del salón, a una distancia prudente del omega. No obstante, Yoongi lo sabía, ellos podían oírlo perfectamente.
Ambos alfas negaron con su cabeza y al instante, Min se puso en pie.
—¿A dónde vas? —preguntó Taehyung al verlo caminar hacia la puerta sin siquiera comer nada de su desayuno.
—Ya vuelvo —gruñó Yoongi con una voz ronca y peligrosamente seria.
Una vez más, ambos alfas se voltearon a mirar y como si compartieran pensamientos, caminaron a la salida detrás de Min, quién con zancadas largas cruzó el pabellón uno como un demonio furioso hasta su propia celda.
No obstante, al llegar allí, su alfa no estaba. ¿Dónde se había metido Jeon? Yoongi se lo preguntaba una y otra vez, mientras miraba a su alrededor desde afuera de su celda. Observó los pabellones de arriba y las entradas a los baños. Nada, el alfa no se veía.
De pronto estaba comenzando a sentirse realmente muy molesto. Entonces, miró a los alfas que lo observaban a lo lejos y caminó hacia ellos rápidamente como si fuera un demonio rabioso.
Los alfas se mantuvieron estoicos, no obstante, Park contuvo su deseo de dar un paso en retroceso al ver al joven omega caminar hacia él.
"Demonios, cálmate" se dijo el alfa internamente, al notar su repentino nerviosismo al ver los ojos en color plata del omega cargados de exaltación. Y es que todos lo sabían, incluyendo a los alfas presentes, cuando los ojos de Min cambiaban de color, su lobo tomaba el control de él y eso no era una buena señal. Es más, era casi trágico.
—¡¿Dónde demonios está mi alfa?! —les gritó a ambos alfas.
—No lo sabemos, Min, pero cálmese, él dijo que estaba encargándose de un asunto en dirección, supongo que está hablando con el Director Kim —dijo Choi, quien al parecer tenía más templanza que el mismo Yoongi en ese momento.
Entonces, de repente los portones se escucharon. Yoongi se volteó a ver y allí lo vio. Era su alfa entrando por los portones que comunicaban los pabellones con el ala administrativa.
Dejó a los alfas oficiales hablando solos y como el demonio rabioso que ya sin duda alguna era, caminó hacia su alfa, quien con solo una mirada rápida supo enseguida lo que se le avecinaba.
—Maldición —murmuró, volteando su rostro hacia sus oficiales, quienes desde arriba le hacían señas. No obstante el alfa no las necesitaba como medio de alerta, pues él ya lo sabía. Solo tenía que ver a su omega para saberlo.
Así, con calma, Jeon se detuvo justo en la entrada de los portones, metió las manos en los bolsillos de sus pantalones y esperó el huracán.
—¡¿Se puede saber dónde demonios estabas?! —exclamó Yoongi cuando por fin llegó a él.
El alfa no dijo nada al inicio; él simplemente se quedó allí, en silencio observando a su colérico omega, quien parecía echar humo por las orejas, mientras sus ojos plateados se fundían como si fueran plata líquida.
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Prisión de Omegas (Kookgi) +18
FanfictionEl infierno para algunos, el paraíso para otros. La prisión de omegas era lo que podría denominarse el reino de Min Yoongi, un omega preso como todos los demás, pero al mismo tiempo, completamente diferente a ellos. Min poseía un gen dominante y po...