Cuando te conviertes en una yandere

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No recordaba bien cómo había llegado aquel lugar, supongo que el traumo me hizo olvidar ciertos detalles pero si se con qué objetivo.
Había recibido una solicitud de amistad en mi red social, era de Eren Jaeger. Me emocioné mucho pues lo había visto muchas veces en la universidad, era un chico alto de ojos verdes que iba siempre acompañado de su hermanastra y su mejor amigo, Eren sin duda era muy deseado en la universidad, mi amor platónico y el de muchas otras chicas.
Hablamos varias veces por las redes y me ilusionaba tontamente más, hablábamos todos los días y de todo, del universo, de las estrellas, de la vida y el amor, hablamos de todo.¿Cómo no iba yo a caer tontamente enamorada de aquel encantador joven? Si además de guapo era profundo y me hacía cuestionar todo a mi alrededor, lo amaba.

Cuando finalmente nos íbamos a ver en persona y digo esto pues en todas nuestras pláticas virtuales jamás nos llegamos a contactar físicamente puesto que estábamos en vacaciones pero aún así decidimos coincidir. Era un lugar apartado y no recuerdo cómo había llegado, tenía miedo porque hasta la más tonta sospecharía que algo no estaba bien pero no me importaba, quería confiar en que Eren Jaeger me estaría esperando en aquel lugar, conversaríamos y quizás intentaría tener sexo pero yo lo rechazaría y él como todo un caballero me comprendería y me llevaría a casa, el inicio de un romance al cual no podía verle fin, pero no era un romance, era una pesadilla.

Entré aquella casa apartada y solitaria y lo vi. Era un hombre de baja estatura, regordete y de ojos azules profundos, creo que los había visto antes pero no recuerdo en qué mirada y me llené de miedo, debo ser la más imbécil  del mundo, sabía perfectamente de que algo como esto podía pasar, pero la situación había avanzado a tal punto que no quise retroceder, solo me adentré sin importar las consecuencias, cuando mis ojos vieron el terror solo intenté salir pero aquel señor no me lo permitió.
-¡Déjeme ir!
-¿Por qué quieres irte ahora (...)? ¿No te da gusto conocerme al fin?
-¡Usted no es él!

Por supuesto que no era Eren Jaeger, ese señor era Rod Reiss, el padre de Historia Reiss.
Me había tenido una trampa y yo como la imbécil más grande del mundo quise caer con la esperanza de que no fuese así.
Rod Reiss empezó hablar, como todo loco jactándose de lo que acaba de hacer con orgullo, me contó que se había hecho pasar por Eren, el cual era novio de su hija Historia, al parecer no era la primera vez y para él tampoco la última, obviamente Eren desconocía la situación y la ignoraba por completo, nadie sospecharía de que Rod Reiss era un cerdo capaz de hacer estas atrocidades.

Intenté correr dándole la espalda y me agarró fuerte del pelo y me pegó a la pared, podía sentir su asqueroso miembro duro contra mí y me susurró algo al oído, me daba náuseas, me intenté apartar y terminó golpeándome con fuerza y tirándome al piso y se subió encima de mi, sentía su aliento asqueroso chocar contra mi y me llenaba de asco, mis manos estaban sujetas con fuerza por las suyas pero aún así acerqué mi boca a su cuello y lo mordí con tanta fuerza que terminé por arrancarle cierto pedazo el cual escupí con mi boca llena de sangre. Gritó con fuerza y se enojó y nuevamente me pegó.
Escuchaba sus insultos salir de su boca con furia y en un último intento me puse de pie y entonces ocurrió.
Como una película que quiere favorecer a la víctima encontré aquel cuchillo y con la ira del momento entonces lo clavé en él.
Una estocada no fue suficiente, estaba tan molesta y entonces lo hice de nuevo, luego 3, 4 y perdí la cuenta, lo apuñalé hasta que dejó de respirar.
Cuando estaba lo suficientemente cansada entonces me detuve, me tiré aún lado y me di cuenta de lo que había hecho.
Me llené de miedo y empecé a temblar pero aún así reaccioné de inmediato, me acerqué al grifo de aquella habitación, lavé el cuchillo y me encargué de no dejar rastros de mis huellas allí, incluso el pedazo que le había arrancado con mis dientes me lo llevé para deshacerme junto con su celular.

Llegué a casa llorando y temblando, había hecho algo terrible pero no se que es lo más terrible de todo, que haya asesinado a Rod Reiss o que la historia de amor de Eren haya sido falsa. Lloré por ambas cosas.

Escenarios Eren Jaeger x lectora Donde viven las historias. Descúbrelo ahora