El Estafador

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Lo siento pero necesito saber la verdad detrás de todo esto, me siento algo confundida y preocupada, quiero saber lo que está pasando con Sara y conmigo, así mismo tengo que ir con la abuela y enfrentarla. 

Att: Elizabeth 

Vuelvo a leer la nota que me ha dejado, creo que es lo mejor, no deseo ser su salvador, ella es una mujer fuerte que sabe como hacer las cosas, creo que ella merece saber lo que ha estado pasando todos estos años, yo podría habérselo dicho, pero sería inútil, ella debe saberlo todo. 

Me duele la herida, no fue algo de gravedad, pero si una razón suficiente como para llevar a prisión a ese bastardo, sumado a lo que le hizo a Elizabeth, creo que por primera vez en mi vida estoy haciendo lo correcto, espero ser mejor persona. 

- !!!Hey¡¡¡ - saluda Kim - parece que el amor todo lo puede - se burla 

- El amor a la justicia, si, todo lo puede - respondo 

Kim ríe, es una buena chica, creo que mi amigo hizo bien en conservarla. 

- Creí que ella no te importaba - dice ya seria

- Yo también, pero no lo sé, creo que debo enmendar lo que hice de alguna manera, auto castigarme no sirve de nada 

- Lo sé, la última vez terminaste muy mal, no deberías azotarte, ni dejar que te azoten 

- Ya no pasará, me siento mejor desde que Erick está en prisión, su familia no podrá sacarlo tan fácilmente 

- ¿ Qué hiciste ? 

- El juez que lleva el caso de Erick me debe su puesto, mejor dicho nos debe y sabe que si no ayuda podemos quitarlo de ahí, tenemos a la ley de nuestro lado - digo con simpleza 

- Creí que era por que ustedes son ciudadanos ejemplares 

- Para el sarcasmo, que nos guste el dinero no significa que no trabajemos, solo que a veces un extra no cae mal 

Ella vuelve a reír y sale de mi habitación, creo que es momento de volver a la vida real y seguir trabajando, pero mi celular suena, al ver el nombre en la pantalla mi gesto se vuelve frío, no quiero saber de ella, creí que todo había quedado claro. 

- Kristal - digo al responder - parece que tendré que cambiar mi numero

- No, no es eso, solo que necesito de tu ayuda 

- No, no te quiero ayudar 

- Por favor, lo necesito ¿ Por Emily ? 

- No, ni por ella, resuelve tu sola tus problemas 

- Diego, por favor, solo esta vez y no volveré a molestarte, lo juro 

- Está bien, nos vemos dentro de una semana 

- Pero... 

- Tengo la agenda llena, si quieres mi ayuda será cuando yo diga 

- Está bien Diego, gracias 

Desde que mi mundo está hecho un lío me he centrado en un caso de desfalco, pero mi mente no está bien, creo que no estará bien hasta que no la vea a ella bien. 

Elizabeth 

Me llevó cerca de 10 minutos entrar a la casa, sé que la abuela vendrá y aquí estaré esperándola, quiero respuestas. El teléfono de la casa suena tal y como lo había deducido, dejo que suene una vez, dos veces hasta que deja de sonar y responde la contestadora. 

- Elizabeth, sé que estás en casa, creo que tenemos que hablar tu esposo está en la cárcel, parece que agredió a tu amante, deja de hacer berrinches y regresa 

Me quedo sentada, sé que ella vendrá no puede evitar ser controladora, pero eso ya no funciona conmigo. Muevo mi copa de vino y le doy un trago, vaomos a ver en que termina esta situación, me pongo a recorrer la casa, mis años de infancia no fueron tan malos aquí. Y como lo esperaba, la abuela llega, su auto se ha estacionado, me quedo en la sala de estar, la estoy esperando y esta vez no me importará si ella muere de un infarto. 

- Elizabeth, vamos a casa 

- No, no quiero ir abuela 

- Tu esposo está en problemas

- No me importa en realidad - respondo - así como a ti no te importa mi vida 

- Me importas, por eso hago lo mejo que puedo para ti 

- No, no hace lo mejor para mi, hace lo mejor para usted, no se acerque más con sus hombres, hablaré solo con usted y en el despacho de papá 

- Bien, solas tu y yo 

Voy hacia el despacho de papá, me siento en su silla y espero a que la abuela entre , viene sola, tal y como se lo he pedido. 

- Cierre la puerta con seguro, no quiero que nadie venga a interrumpirnos - digo 

- Bien - hace lo que le pido y se apresura a cerrar y a estar frente a mi 

- Dígame una cosa ¿ considera que soy un objeto ? 

- No

- Entonces entiende que soy una persona 

- Así es Elizabeth 

- Bien...¿ Entonces por qué? 

- ¿ Por qué?  

- Si, por qué se ha afanado en joderme la vida, en hacer lo que quiere conmigo y mi vida, sé que me odia, no soy una Olvera, pero si soy un ser humano, un ser humano que quiere respuestas y las quiero ahora 

- Bien, no puedo  hacer nada más que acceder, después de todo ya lo sabes 

- Sí, sé que Sara no está en un hospital y no está en coma, quiero saber en dónde está 

- Ella está en casa, está bien, ella salió del coma ese mismo año 

- Y usted me ha hecho creer lo contrario 

- Solo así podemos mantenerla a salvo, solo así ellos pueden ser felices 

- ¿ Ellos? ¿ A quiénes se refiere abuela? 

- Nada, ella, ella estará bien si tu no sabes su ubicación 

- Bien, no saldrá de aquí hasta que me lo diga y justamente ya casi es hora de su medicamento, si no me dice no lo tomará 

- Estás loca 

- Si, trastornada y dolida, he sido sometida de la peor manera, me han violado, me han golpeado, me han quemado el cuerpo y mire, tengo rotos los dedos, además perdí un bebé que ni siquiera sabía que existía ¿ Le doy otro detalle?

- No - niega con la cabeza 

Le doy otro sorbo a mi copa. 

- Tic Toc, abuela ya casi es hora de su medicamento 

- Está bien, te diré, ella está en Dubái

- Vale  y ¿Quiénes son ellos? - Se queda callada, no dice más - vamos abuelita dígame, la medicina está aquí - se la muestro 

- Ellos son... - le falta la respiración - por favor 

- Es lo mismo que decía cada vez que Erick me golpeaba, cada vez que me ahogaba, sé como lo está pasando abuela, pero está en sus manos tomar o no sus pastillas 

- Ellos son tus padres y tu hermano están vivos