CONEXIONES

Capítulo 21.

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“Todo el amor que llevamos dentro quedó sangrando en aquel momento. Tal vez ya no nos queden intentos habrá que ver lo que quiere el viento.

Guardaré trazos de tu figura, la sensación de tenerte a oscuras. Tu libertad, tu fé en la locura cerrarán huecos de está fisura”

El Salto Mortal — Kchiporros.

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Luces, cámaras y acción.

17 de mayo del 2020.

00:30 a.m.

Múnich, Alemania.

John.

Siempre he pensado que el mundo está atestado de seres de porquería, a quienes comúnmente, se les llama personas; soy fiel creyente de que nuestra extinción seria lo mejor para el planeta.

Pero también me doy cuenta de que la raza humana es tan hija de puta que si no podemos seguir creando la destrucción de este planeta buscaríamos otro, por lo que simplemente me conformo viviendo entre las miles de escorias que siguen respirando y es que no puedo decir que eliminaré todo lo malo de este planeta porque tendría que eliminarme a mí mismo y no puedo hacerlo ya que lastimosamente el infierno aún no se encuentra listo para recibirme y el mundo no me ha terminado de conocer.

La mafia me tiene hastiado con todas sus amenazas de porquería y es que si no es la escala de poder, es fuera de ella, me tienen cansado que se la pasen creyendo que se pueden meter con lo mío.

Antes de lo de Adler no tenia tantos problemas con  escala porque para llegar a ser agente me enfrente a cosas peores, ya que, antes del actual líder de la mafia estaba otro que no servía para nada por lo que lo ignoramos durante años.

Nos enfocamos en Afganistán, Siria, Irán como también en casos de tráfico de blancas en el sur, Europa, Asia y más como también me vi metido en algo de todo lo que pasa en África, dirigí todas las misiones, me enfrenté y sobreviví a terroristas, a psicópatas y a guerras. Pasé hambre, sed, perdí compañeros, casi me perdí a mí mismo muchas veces en el proceso sin mencionar que más de una vez estuve cara a cara con la muerte.

Fui soldado, sargento, teniente, capitán, comandante y ahora soy agente. Llevo trabajando en mi carrera desde los siete años en cuando me di cuenta que no quería ser solo otro ser humano más que pisó la tierra por lo que me decidí a luchar por lo que quería, tengo entrenamiento físico desde esa edad, soy estratega de nacimiento portando armas desde que tengo uso de memoria y todo lo logré solo.

Soy un agente y se supone que debería de ser de esos buenos justicieros que cumplen todo para salvar al mundo pero lastimosamente no me apetece hacerlo porque me da igual que se mueran todos mientras no toquen lo que a mí me importa.

Crecí sabiendo que tengo un problema, desde mi segundo año de vida me di cuenta de todo lo que soy capaz y es que si no conseguía todo lo que tengo al meterme a la milicia, yo podría estar teniendo el puesto que tiene Adler ahora mismo.

«Por eso debo matarlo» Suficiente tiene el planeta con tener que lidiar conmigo, con mi novia y con el actor como para tener que soportar a otro más, estando escondido gracias a su supuesta muerte era mucho mejor, al igual que Austin. Adalia, en estos momentos, sigue sin importarme, ella podría serme útil en algún momento pero no ahora.