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"Llega un momento en el que el creyente deja de creer porque, aunque todos lo nieguen, quien ahora no cree; creyó alguna vez"
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Persignación.
Diecinueve días, 456 horas y 27.360 minutos con seis inyecciones de ARZEN. (cinco días corridos bajo efectos de las drogas que calman la ansiedad hacia las inyecciones)
Magali.
Abro los ojos despacio mientras mi cerebro trata de acostumbrarse al ruido excesivo que me rodea, el Agente Black está con el móvil contra la oreja mientras mantiene la mano libre acariciándome la espalda, se oye rabioso y me muevo en la cama de mala gana cuando noto que está discutiendo con Dominick nuevamente.
—No tengo tiempo, ¿Es que no lo entiendes? —Aguarda respuesta e inhala despacio— El trato era ese, que tú te hacías cargo de todo mientras yo resolvía lo de Rusia, que seas un inútil ya no es mi problema, yo cumplí con mi parte.
Me deshago de las ganas de dormir buscando salir de la cama, el avión está entrando a territorio Inglés y John me ve con pesar cuando nota que me ha despertado, le resto importancia con la mano.
—Dominick, yo necesito ver a Jeremy ¿Vale? Mañana podemos arreglar todos los malditos problemas que tengas pero ahora mismo necesito que me des un jodido día de descanso, no te estoy pidiendo mucho.
Suspira rabioso cuando oye una respuesta y luego de ellos me extiende el IPhone.
—Lidia tú con él, yo necesito un trago —Tomo el móvil y él se va a la mesa que tiene una botella de whisky, se sirve un vaso y me pegó el aparato a la oreja.
—Señorita Rosenzweig, solo necesito que terminen con unas reuniones y los dejamos descansar en paz, le aseguro que es importante —Empieza y la verdad lo estoy ignorando ya que tengo la atención en mi celular llamando a Jeremy que no responde— El FBI corre riesgo de perder centrales y que se repita lo de Polonia.
Tomo aire cansada y le digo a John esto último que hace que blanquee los nudillos alrededor del vaso quitándome el aparato de nuevo, lo escucho discutir por minutos y me digno a levantarme, dormí apenas 40 minutos, pero se sintieron mejor que las nefastas horas de sueño que tenía en Rusia ya que allí no descansaba.
—Aterrizaremos en una hora e iremos directo a la sala de reunión de la central en Londres, necesito que Axel, Marcos y Keyla me rindan informes y vayan mandando camionetas a por Jeremy —Habla el agente— Jun llegará antes que yo, preparará los informes que reunimos y Magali va conmigo.
La central de reuniones está a pasos de la torre del Reloj en el centro de Londres, tiene fachada de oficina corporativa con una gran pantalla publicitaria a un lado y le dicen a mi novio que allí nos esperan, no quiero ir pero tampoco le refuto porque ya está bastante estresado y no tengo ganas de discutir tampoco la verdad. El tiempo estimado pasa y el avión aterriza en la pista privada de la central del FBI pero eso no evita que la prensa militar nos avasalle apenas cruzamos las puertas buscando los vehículos que tuvieron que estacionarse a metros debido a los periodistas.
Señores, ¿por qué tardaron tanto en su regreso? ¿la desaparición se debe a alguna pelea entre ustedes con el actor que no ha dado la cara tampoco?
Ignoro a todo el mundo, centrándome en marcar el número de Jeremy que sigue sin responder mientras John tira de mi mano abriéndonos paso entre la multitud, no sé por qué carajos hay tanta gente en este lugar pero logramos subir al auto, nos toma quince minutos un viaje que debería durar cinco y apenas salimos del vehículo nos avasallan nuevamente los periodistas. Respiro cuando no nos dejan pasar y Gerard junto con Henry tienen que pelearse con medio mundo.
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CONEXIONES
SpiritualMagali Rosenzweig. Una exitosa empresaria mundialmente reconocida que lo tiene todo: dinero, belleza e inteligencia, pero con un pasado infernal que hace años se propuso dejar atrás. Con una nueva vida en Inglaterra y un éxito intachable en su carre...