Relatos de un don Nadie

Tempos

Nose lo que va ser esto que estoy haciendo, quiero explicar un poco la convergencia que siento a la hora de la escritura, ese desliz del espacio tiempo a la hora de procesar algunas ideas, sería un paseo por las ideas, porque la mente se queda chica cuando hablamos de temas que tematizamos para hacer esto, un poco de ansiedad mezclada con letras al azar, palabras rimbombantes, elocuencia solamente superficial para cubrir un contenido que siempre suena absurdo. La verdad, la mentira, nada importa o todo lo hace, la nada se siente como un plástico adentro tuyo, buscando algo que lo sacie pero nada termina con la nada, porque algo no puede ser nada, porque todo en sí no es nada o es solamente algo, No encuentro sentido en las palabras, creo que yo tengo que darles uno, pero sin sentido ¿está bien dirigir o estructurar un sentido? ¿Cómo puedo tener una certeza, si no se lo que es? Un tambor peruano contextualiza esta marcha, a lo lejos un pitido zumba sin presentar final, tedio, tranquilidad, ruido, esto es lo que escucho últimamente, puro ruido en el aire, no entiendo lo que pasa realmente, nose si alguna vez lo hice, no sé lo que quiero saber o al menos dudo de saberlo, la duda construye una pregunta, la pregunta busca una respuesta la respuesta busca que la encuentren pero la búsqueda nunca buscó ser buscada, ¿Será que alguien la busco alguna vez?  Otra vez lo mismo, ¿Cuánto tiempo mas? Diciendo las mismas cosas, pensando lo mismo, viviendo lo mismo y ni siquiera entiendo la mismidad de la que hablan ¿Será lo mismo, Hablar de uno mismo y del sentido de lo mismo? Ya no se lo que digo, o si lo se pero no quiero decirlo, ya no quiero pensarlo, pensarlo cuesta decirlo, decirlo cuesta pensarlo, otro pájaro en el techo de la estación, otra flor creciendo en el cementerio de Chacarita, el cielo amanece mientras tiñe al aire de un color celeste, las palomas no nacieron para volar solo tuvieron el afán de hacerlo.