Quiero conocerte.

Sistema de puntaje.

—Por eso, me gustaría encomendar la tarea de este nuevo sistema a los alumnos Shinsou Hitoshi y Mei Hatsune, que tienen las notas más altas de este curso y la aprobación de los profesores para usar los talleres fuera del horario de clases.

No era poco habitual que el director Nedzu visitara el salón de la clase C de segundo año. En realidad, de todas las clases que había en Yuei, la clase C recibía cierta atención especial por parte del director desde hacía un año atrás debido a sus jóvenes prometedores y sus...accidentes.

Todos los estudiantes reprimieron un gemido de horror cuando escucharon que Nedzu pensaba dejar una tarea de tal magnitud a Hatsune. La muchacha de cabello salmón con ojos amarillos que el año pasado había causado una explosión en el taller que provocó que su profesor de ingeniería robótica volara por los aires.

El pobre y bajo hombre se puso pálido al lado del director pero no hizo nada por negar sus palabras. Después de todo, tanto la muchacha como Shinsou eran quienes mejores calificaciones tenían entre todos los estudiantes y contaban de verdad —y en un caso, a regañadientes— con la aprobación de los profesores. Los consideraban altamente inteligentes y capaces, aún si en la práctica había varios fallos.

—Por supuesto, este pequeño proyecto los dejará exentos de las demás actividades del festival deportivo y cultural —agrego Nedzu para atraer más la atención de los jóvenes —Con que se concentren en hacer el sistema realidad y que funcione de forma adecuada, será más que suficiente para validar su participación, ¿que dicen?

—Hatsune, Shinsou —nombró su profesor —No estarán solos en esto. Sí serán la cabeza del proyecto pero también algunos de sus compañeros los ayudarán o al menos, los que estén dispuestos a no participar de forma activa del festival.

Lo que sería la mayoría del curso. Los alumnos de la clase C se especializaban en computación, informática e ingeniería. Difícilmente, alguno de ellos practicaba deportes o disfrutaba de las actividades del festival que no les aportaban créditos en sus estudios. Aparte que estaban más que contentos de participar de un proyecto que era un reto de su tipo y que fue encomendado por el director.

— ¡Yo lo haré! Creare babys capaces de instalarse en la ropa de los estudiantes para seguir su esquema de actividades y puntaje —acepto Mei sin pensarlo dos veces — ¡No debe ser tan difícil!

Nedzu y el profesor asintieron conformes. Luego, las miradas de la clase se concentraron en el joven de cabello purpura y ojos violetas que estaba meditando su respuesta.

En otras circunstancias, Hitoshi no habría dudado en aceptar pero este sería el primer festival que podría llegar a disfrutar con la compañía única de Denki como su pareja y si era sincero, no quería perderse eso. Pero también le gustaba la idea de crear un sistema tan grande y complicado desde cero.

Era difícil elegir.

¿Su novio se molestaría con él por eso? El rubio siempre había respetado el hecho de que le gustaba tener su tiempo y espacio para sí mismo, ¿eso era diferente ahora que eran pareja? ¿debía tomar en cuenta su opinión antes de aceptar? Pero seguía siendo una gran oportunidad de probar sus habilidades y además, sería bueno poder usar el taller incluso después de clases. Aún si debía evitar que su co-lider destruyera todo en medio de una explosión no controlada.

El de cabello purpura se mordió los labios pero termino asintiendo y todo el salón celebro que estaba dentro del proyecto.