Aquél rugido, aunque ponernos los pelos de punta, no le hicimos mucho caso. Pasando por los grandes árboles, vimos como unas extrañas criaturas, más grandes de un zombie, más rápidos que el Gigante Frenético, y al parecer más mortífero que todos en conjunto. Esas criaturas avanzaban directamente hacia las barreras de Babilonia. Pensé que no harían nada, que no podrían pasar, pero destrozaron casi sin esfuerzo la barrera. Atacaron a todos los que estaban abajo.
Mortis, temiendo el peligro de su sobrina, salió del auto para intentar buscarla. Pero Amber, en el asiento del copiloto, lo detuvo.
Amber: Mortis, sé que es tu sobrina pero debemos irnos. Esas mierdas son la razón por la que estuve varías semanas sola en ese cabaña— le dijo con preocupación y desesperación real—
Mortis: Mi sobrina vale la pena el sacrificio.
Se zafó de su agarre y corrió directamente a la nueva Babilonia.
Amber se posó en el asiento del piloto y condujo hacia él. No sé exactamente por qué, pero varias criaturas pasaron a su lado y no le hicieron nada. Pero sí iban por Babilonia, que ahora mismo estaba lanzando cohetes artificiales.
Rápidamente la fémina salió del automóvil y lo derribó. Habíamos llegado a la entrada de la barrera. Yo y Amber intentamos detenerlo, y para eso la peli-naranja tuvo que noquearlo con varios golpes. Lo pusimos en el asiento de atrás, y ella condujo hasta la carretera.
Beatriz: ¿¡Que son esas cosas!?— pregunté desesperada al ver como ellos atravesaban la barrera y trepaban el edificio—
Amber: ¿¡Cómo quieres que yo sepa!?— una de esas criaturas se nos atravesó en el camino. Amber maniobró para esquivarlo, aunque nos seguía— ¡Son literalmente inmunes a las balas y al fuego!
Entonces, aquella criatura que nos seguía salto sobre el capó, y destrozó el vidrio. La extraña cuchilla de él casi me impacta en la cabeza. Amber no tuvo tanta suerte. La cuchilla le impactó en el estómago. No era una herida profunda, ni mucho menos mortal, pero si muy grave.
Pudo ver mejor a la criatura.
Colette: Crawler— dijo fascinada—
Amber, a causa del golpe, lastimosamente chocó el auto contra un árbol. La criatura no murió por el impacto. Rápidamente agarré la antorcha de Amber, e intenté incinerarlo. No le hacía nada.
La radio tenía interferencia.
Quedé inconciente a causa de un golpe directo de la criatura. Lo último que vi fue que Colette le arrojó un libro/corazón a la criatura. Lo único que consiguió fue "abrirle" la corteza de la cabeza
Fecha de publicación aproximada 11 de Junio de 2021