El Hombre Detrás de la Radio

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"Supe desde el principio que mi acto no iba a quedar impune. Únicamente por eso debía agradecer a las Voces Rotas y a Bea por haberse desecho de mis enemigos políticos.

Aún así, hubieron consecuencias.

— ¡¿Mataste a tres de nosotros?!

Había adoptado la antigua base de operaciones de los Corredores Nocturnos como la mía. Detrás del escritorio, con la vista en la puerta vi a cinco de mis Soldados de Exigencia entrar a la estancia. Scarab, Gary, Jennifer, Kristal y Jack. A mi lado, yo solo tenía a Darympile y al Sacristán.

— ¡Mataste a Lucian hija de perra! ¡No te servimos para que hagas eso!

Rebelión abierta, con la recepcionista Jennifer a la cabeza. Alzados en armas, me apuntaban a mi y a los dos que se mantenían a mi lado.

— Tu reinado del terror acaba aquí.

Y en ese momento, Scarab le disparó a Jack, Gary a Kristal, y yo asesiné a una desconcertada Jennifer de un disparo en la cabeza.

— Darympile, limpia este desastre.

Temeroso por seguir el mismo destino, obediente se acercó a los cadáveres y los empezó a arrastrar hacia el pequeño calabozo.

En ese momento le disparé, y le pedí al Sacristán que limpie el desastre.

— Cuando me voltee también me vas a disparar, ¿No?

La seriedad y determinación con la que hablaba era la razón por la que lo contraté.

— No, a usted no. El espadachín se dejó vencer por una niña de veintipocos. Se lo merece.

No dijo nada. Si sintió algo no lo demostró. Sencillamente se limitó a cumplir mi orden. Como un buen Soldado de Exigencia"











"Bonita historia. ¡Esplendida! Me hubiera gustado poder contarla"

Billy-Ray Sanguine. Un superviviente. Un sicario.

El Locutor por excelencia.

"Hey Bea, ignorar a la gente es malo. Debes prestar atención cuando alguien dice algo querida"

"Por favor..."

Pero no se callaba. Le gustaba hablar, expresar sus ideas. El trabajo de Locutor le iba de perlas.

"Sabes, yo tuve sueños. Aspiraciones. Tú y Amber me las quitaron. ¿Crees que pueda volver a tenerlas?"

"Por favor... Déjame sola"

"¿Por qué? Mi compañía es tan atroz? ¿Tan malo soy? Vamos Bea, sé que me quieres cerca para alegrar tus días"

"No Sanguine, tú estás muerto"



























¿Y entonces? ¿Qué?

Amber no podía seguir.

Janet estaba en estado de shock.

Y yo ya no podía pensar.

No quería hacerlo.

Las antiguas Flores Escarlata tomaron el mando de la situación tras ver qué no podíamos seguir.

Técnicamente nos estaban secuestrando.

Aunque visto lo visto, las únicas personas que parecías tener la suficiente resistencia mental para afrontar lo sucedido hace unas horas eran Colette y Orquídea.

La Plaga De La LocuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora