Capítulo 56 No tenias ningún derecho

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No era necesario decir algo, simplemente observando su rostro podías darte cuenta de lo que ella estaba sintiendo. Tampoco es como si hubiera una manera de explicarlo; la realidad es que solo las personas que han vivido algo como eso podrían darse una idea.

Bajo en sofocante silencio de la habitación, dentro del débil cuerpo de la mujer en la camilla, el sonido del corazón rompiéndose en miles de pedazos era tan doloroso.

Perder a alguien a quien amas es lo más doloroso que podemos sentir; ya sea que simplemente esa persona se haya alejado o hubiera muerto. Muchos dicen que la segunda es incluso más difícil, pero lo cierto es que es la misma intensidad de dolor.

Lena perdió a su madre cuando era tan solo una niña, ni siquiera recuerda mucho de ella, solo sus intensos ojos verdes casi como el de los árboles en primavera. Sin recordarla con exactitud, Lena podía asegurar que su madre la amaba, tanto como ella ama Kalel.

Durante mucho tiempo para Lena el pensar en su madre fue su ejemplo de sentir amor real, pero con sinceridad, Lena realmente no sabía cómo se sentía de verdad. Fue hasta entonces cuando su pequeño angelito vino a su vida que Lena por primera vez podía decir como era que su madre la amaba, pues de la misma manera ella ama a Kalel.

Pero en ese justo momento todo el amor hacia su hijo se estaba convirtiendo en dolor. ¿Cómo el amor hacia tu hijo se puede convertir en algo tan insoportable? Tal vez porque ahora recuerda ese sentimiento que durante los últimos años pareció estar escondido en alguna parte de su cabeza y de su corazón; tal vez también podía ser porque la sola imagen de Kalel era la copia de su otro pequeño, su precioso angelito que perdió.

No solo era el saber que perdió a su bebé lo que le dolía, sino tambien el hecho de que por alguna extraña razón ella parecía haberlo olvidado.

Su mente se encontraba realmente confundida, había tantas imágenes y recuerdos que ni siquiera están completamente segura cual era real y cual no. ¿Qué fue lo que sucedió? ¿Por qué demonios su mente no se puede acomodar en orden?

Y la respuesta a ello estaba frente a ella, pues la mujer que se había mantenido en silencio hasta ese momento no se atrevía a darle una explicación, aun viendo como Lena se debatía internamente.

¿Qué si sentía culpa o remordimiento? No lo sabe, desde el momento en que comenzó a tomar decisiones sobre la vida de Lena y Kalel comenzó a convérsese ella misma que lo que hacía era por el bien de ambos.

Incluso hasta ese momento en que sabía que tal vez el decirle a Lena la verdad seria doloroso, no aceptaría a si misma que es posible que las decisiones que haya tomado fueran las equivocadas.

Lena comenzando a recapitular su vida tratando de darle sentido a sus recuerdos, ya no solo había dolor en ella, sino tambien enojo, rabia, frustración. Y los resoplidos y gruñidos que salían de su boca solo mostraban la batalla interna que llevaba.

-Perdiste al bebé a mitad de tu segundo mes de embarazo- Alex comenzó a contar – Fuiste a ver a tu padre a Luthor Corp, creías que él tenía algo que ver con la desaparición de Kara y por eso lo enfrentaste – Lena escuchaba con atención mientras las imágenes de los hechos se reproducían sin detenerse en su cabeza – Por el estrés causado por la desaparición de Kara y el hecho de que prácticamente tu padre te había forzado a dejarla y comprometerte con James; el feto lo resintió y la pequeña discusión con tu padre terminó por ocasionar que lo perdieras.

-¿Por qué...? – Lena la miro confundida -¿Por qué no lo recordaba? – su voz se entrecortaba, mostrando el creciente sentimiento de llanto en ella.

-¿Recuerdas ese día que despertaste en el hospital bastante desorientada? El día que te hiciste las cicatrices de tus brazos – Lena por instinto observó las enormes líneas de piel regenerada en sus antebrazos – Te mentí con respecto a cómo te las hiciste.

Product Of The Union (SuperCorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora