A salvo, era manera en Kara siempre la hacía sentir cada vez que se encontraba entre los fuertes y definidos brazos de la kryptoniana.
El silencio había comenzado a reinar en la habitación minutos antes cuando el llanto de Lena cesó. Le tomo a Lena alrededor diez minutos de llanto para poder controlarse, fue la sola presencia y caricias de Kara las que aceleraron el proceso.
Ninguna decía una sola palabra, tampoco era como si Lena quisiera hablar del motivo de su dolor en ese momento, mucho menos contárselo a Kara cuando ni siquiera ella misma podía creérselo.
Por supuesto Lena sabía que tendría que hablar con Kara en algún momento, que tendría que decirle que por no cuidarse uno de sus hijos murió durante el embarazo. Pero la culpa y el dolor no le permitían contárselo en ese momento. Lena solo espera que Kara la odie aún más cuando le cuente sobre ello.
Por otro lado, Kara no se atrevía tampoco a preguntar cuál era el motivo por el cual Lena había discutido con Alex y porque estuvo llorando. Claramente tenia curiosidad y preocupación al respecto, pero conociendo a Lena, sabía que ella le contaría de ello cuando estuviera lista.
Además, no era como si fuera incomodo el silencio entre ambas. Durante años de amistad y unos cuantos meses de relación, tanto Lena como Kara disfrutaban de mantenerse en silencio solo disfrutando de la compañía de la otra. La confianza y seguridad que se daban una a otra les permitía tener esos momentos de intimidad que son realmente únicos.
Kara solo se dejaba guiar por los sonidos que el cuerpo de Lena emitía al respirar y los latidos de su corazón. Para ella eran tan relajantes como el viento golpear su cuerpo cuando se elevaba al cielo.
Lena por su parte lo que más amaba de esos momentos era el calor que el cuerpo de Kara desprendía. Muchas veces solía bromear con ello y llamarla su sol personal, lo cual era el perfecto sobrenombre para Kara. Y sin duda también disfrutaba del delicioso aroma a lavanda de la kryptoniana.
Tomando aire, Lena sintió el aroma de Kara golpear su nariz y no pudo evitar soltar un suspiro. Kara al darse cuenta de la acción de la ojiverde, una pequeña sonrisa de satisfacción se formó en su rostro y apretó a Lena hacia su pecho.
-Gracias, ángel- susurró Lena cerrando sus ojos.
Kara al escuchar el sobrenombre sintió como su corazón se encogía y se llenaba de nostalgia. Cuantas veces Lena la llamo de esa manera mientras se besaban o simplemente se acurrucaban durante un maratón de películas de Disney.
En ese momento exacto, la kryptoniana no pudo evitar sentirse culpable por no contarle a Lena aun sobre Ontari y Astra. Con un nudo en la garganta decidió simplemente dejar de preocuparse por ello y disfrutar de Lena mientras aun podía hacerlo.
-Siempre- dijo Kara dejando un beso en el cabello azabache de Lena.
Ambas sintiéndose miserables por esconderles secretos tan importantes a la otra, se mantuvieron abrazadas en silencio disfrutando de los que podrían ser sus últimos momentos juntas de esa manera, pues estaban completamente seguras de lo que se vendría más adelante las destruiría tarde o temprano.
Fueron pocos los minutos después de eso cuando su tranquilidad despareció, pues una pequeña cabellera azabache entro con velocidad por la puerta de la habitación casi lanzándose sobre la camilla para abrazar a Lena.
-¡Mami!- decía entre lágrimas el pequeño niño mientras se subía sobre Kara para llegar a Lena.
Lena instantáneamente al verlo abrió sus brazos hacia su hijo y lo abrazó con fuerza, también permitiéndose volver a llorar. Kara al verlos dejo salir un par de lágrimas; pasando uno de sus brazos por la espalda de Lena y deteniendo su mano en la cintura de la ojiverde; mientras su otro brazo sostenía a Kalel evitando que se presionara demasiado contra Lena.
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Product Of The Union (SuperCorp)
FanfictionSinopsis. Cuando creemos que todo será perfecto, que nada arruinara lo maravilloso que es nuestra vida en ese momento, nuevos secretos llegan, trayendo con ellos dolor y perdida. ¿Qué tan dispuestos estamos para sacrificar nuestra felicidad por las...