MI AMOR PLATONICO

77. LAS PERSONAS QUE MENOS PIENSAS, TE PUEDEN JUGAR UNA MALA PASADA

Abro mis ojos pesadamente y me encuentro en la habitación que Nina me ha asignado.

Me siento en la cama, lentamente y es cuando me doy cuenta que Nina esta sentada a mi lado, me mira con cara de preocupación.

-como has dormido? -pregunta suavemente.

-bien -le respondo sobandome los ojos, ya que todavía no término de despertarme. -pero no recuerdo a que horas me vine a acostar.

-es porque ayer tuviste un ataque de nervios y tuve que darte una pasta para que te tranquilizaras y durmieras -dice pasando su mano por mi cabello.

«ataque de nervios»

Intento recordar, pero lo único que recuerdo es que estoy entrando en la moto, a la mansión de Nina, nada mas.

-no lo recuerdo -le digo mirándola con el ceño fruncido.

-no importa chiquita, te traje el desayuno -dice pasandome una bandeja que contiene un jugo de naranja, unas almendras y un sándwich -espero que lo disfrutes y luego de ello, duerme un poco mas, te ves muy cansada.

Yo asiento con la cabeza, ella me dedica una sonrisa y se va.

Tiene razón, me siento cansada y no me acuerdo de nada.

Luego de desayunar, efectivamente vuelvo a quedarme dormida.

Narra Jak:

Estoy en la limusina, mirando a través del cristal, me encuentro en el entierro del detective, apenas acaban de terminar las esequias, y sacan el ataúd seguido de sus familiares en especial de la esposa que se aferra al cajón.

-noooo, no, no se lo lleven, el esta vivo -grita ella, en medio del llanto -yo se que esta vivo.

Unas personas la sostienen y tratan de tranquilizarla, para que deje avanzar a las personas que llevan el ataúd, eso me destroza el corazón, ver a esa mujer que sufre, sin hallar consuelo alguno. Se lo que se siente, porque yo sentí ello cuando paso lo de mis padres, las imágenes de los recuerdos de ese día, están vivos en mi cabeza.

Desvío mi vista de la mujer, para ver a Fares.

-no se preocupe joven Xian, el detective tenía un buen seguro, la viuda no tendrá que preocuparse por nada, además añadí otra buena suma de dinero en su cuenta -dice tranquilamente.

-no todo es dinero Fares -digo soltando un suspiro -el dinero no hará que el detective resucite.