108. QUE TANTA GRACIA TIENES DE DIOS EN TI?

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«querras decir la líder»

La corregí mentalmente.

-de acuerdo - respondí -en dónde está? -pregunte.

«ahora que lo pienso, yo no la vi en el culto»

-esta allá -me señaló en dirección de la alabanza

Yo no la vi, pero aún así fui hacia allá, la busque con la mirada, pero no la encontré, fui a los baños, a los salones, a los pasillos, al parqueadero, etc y no estaba.

Volví a entrar al templo con un poco de impaciencia al no encontrarla.

«finalmente habíamos empezado a llevarnos la bien y eso me alegraba mucho»

En la puerta lateral mire a los pastores.

«se ven tan lindos, parece que fueran novios»

Me acerqué a ellos

-Dios los bendiga -dije estrechando sus manos.

-amén hn Emily -responden.

-cuanto tiempo -dice el pastor, como si no me hubiera visto en un año.

Yo asiento con una sonrisa.

-buscas algo? -pregunta la pastora al ver mi mirada recorrer el templo.

-busco a la líder de jóvenes -respondí.

-al líder querrás decir -dijeron a la misma vez.

-como así? -dije confundida.

-ya el líder les contará lo que pasó -responde el pastor dejándome con la duda -el esta en el lugar de la alabanza -señala el lugar.

Me despido respetuosamente de ellos, me dirijo rápidamente a la alabanza, pero cuando visualizo a Jak mis pasos pierden velocidad, trato de mirar hacia otro lado no quiero que piense que lo estoy acosando o algo así.

Me detuve frente al altar buscando al nuevo líder.

«por cierto, quien será? »

-la estaba esperando desde hace rato -dice el hn Jak terminando de cubrir la batería.

-a mi? -digo señalándome.

-si, a usted -dice con esa firmesa de voz que lo caracteriza, pero de manera despreocupada.

Pude ver una mini sonrisa en sus labios y eso hizo que mi corazón saltará.

«suficiente »

Me reprendo mentalmente.

«he dicho que lo voy a olvidar, y eso es lo que voy a hacer»

-la hn Valeria no le dió mi mensaje? -pregunta.

«un momento, la hn dijo que el líder, osea que »

-hn Jak -lo miró -es usted el líder de los jóvenes?

Una sonrisa de boca cerrada aparece en sus labios y asiente.

Ahora sí que me confundí más.

-pero luego usted no es el líder de la alabanza? -pregunto.

-si -contesta -pero a Dios le ha placido que sea de los jóvenes también -centra su mirada en mi, yo la esquivo -algún problema?

Aquí entre nos, una de mis señales para casarme es que aquel chico tenga esos dos cargos, no el claro, si no mi futuro idóneo.

-no, ninguno -respondo mirando el suelo.

-por cierto -dice parándose frente a mi, y eso hace que me ponga un poco nerviosa, supongo que tendré que acostumbrarme ya que esto ocurre muy seguido -trajiste la lista?.

MI AMOR PLATONICODonde viven las historias. Descúbrelo ahora