— ¡Anda a la tercera planta y encontrarás explosivos, haz volar este maldito lugar! — dije mientras golpeaba a un hombre y lo dejaba inconsciente en el suelo.
— Pero....
—Yelena hazme caso. Nos vemos afuera — dije mirándola.
Ella bufa y empieza a correr al lado contrario. El ruso debe estar en el techo de emergencia ya que era para ocasiones así, los usa para escapar. Así que sin más corro hacia las escaleras mientras peleaba con algunos hombres que se me cruzaban en el camino, dejándolos inconscientes o algunos hasta muertos.
Cuando llego al techo veo que sube al helicóptero pero antes que pudieran despegar empiezo a disparar hacia los propulsores viendo que el helicóptero empieza a salir humo.
— ¡No puedes escapar más! — dije mientras empezaba a disparar a los tres hombres dejándolos de inmediato en el suelo.
Boto mi arma ya que se le habían acabado las balas y camino hacia él.
— ¡Quitaste tres años de mi vida! ¿para que? ¿Para ser solo tu marioneta? — dije hincándome a su altura — No recuerdo nada de mi pasado, no recuerdo a quien una vez ame ¡nada, solo por tu culpa! —
— ¡Todo lo que te dijo esa niña tonta es totalmente mentira! ¡tú familia somos nosotros, no ella! — dijo mientras se arrastraba por el suelo quedando lejos de mi.
Estaba apunto de contestar pero siento como me entierran un cuchillo en mi abdomen haciéndome gritar de dolor. Me giro y el hombre estaba con intenciones de hacerlo de nuevo pero rápidamente agarro su mano evitando que me toque de nuevo. Siento que su cabeza golpea la mía viendo por unos momentos nublado pero rápidamente sacudo mi cabeza y me tiro encima de él, empiezo a golpear su rostro una y otra vez golpeando su cabeza con la acera hasta que quedó inconsciente o hasta muerto.
— Es hora — dije tomando el arma del hombre del suelo para luego girarme hacia el Ruso, que no a parado de suplicar a que lo perdonara — Espero que no te reciban en el cielo — dije apuntando que tan siquiera dude en dispararle.
Siento que el edificio se sacude violentamente dándome a entender que Yelena me hizo caso. Con dificultad llevo mi mano hacia mi abdomen y veo que enseguida mis manos se llenan de sangre. Por unos momentos me quedé en blanco hasta que siento un par de manos en mi cintura, me asusto pero cuando veo a la rubia me calmó.
— Vámonos, este edificio se va a hacer pedazos — dijo Yelena a medida que me ayudaba a caminar.
No tenía ni idea donde me llevaba pero giramos de dirección cuando veo un helicóptero a unos metros. Menos que mal que no dispare a ese helicóptero ya que era nuestro única salida.
— ¡Sabes lo que estás haciendo! — dije afirmándome lo barrotes mientras el helicóptero se sacudía violentamente.
— ¡Claro que si! — dijo sin mirarme.
Por si acaso me pongo en cinturón de seguridad por cualquier accidente. Después de unos minutos de tenacidad por fin volamos tranquilos, Yelena deja el piloto automático y camina hasta mi. Sus ojos me miraron con preocupación cuando vio mi herida y toda la sangre que salía.
— Tranquila, soy una especie del soldado del invierno pero 2.0 — dije haciéndola reír, pudiendo ver como su rostro se tranquiliza.
— No te preocupes, volverás a casa — dijo Yelena mientras sacaba un kit de emergencia y me curaba mi herida.
Me la quedo viendo todo el tiempo posible, hasta que sube su mirada y rápidamente la aparto.
— Quiero ver donde está Natasha — dije — Quiero despedirme —
— De acuerdo — dijo tomando rumbo al volante.
Fueron unos minutos hasta que llegamos al cementerio. Yelena me ayuda a bajar ya que igual dolía y como no había tomado ningún medicamento dolía como al 1000%. Estuvimos caminando hasta que llegamos a su lápida.
— Murió en una de sus misiones — dijo ordenando un par de peluches y flores.
— Yo... lo siento en serio. No pude estar cuando más me necesitabas y no me pude despedir de Natasha. Mis recuerdos sobre ella son muy borrosas pero siento que fue alguien importante en mi vida — dije viendo la lápida que estaba graba su nombre y la fecha que murió.
Veo que Yelena se pone de pie y toma mis manos con una sonrisa.
— No te sientas culpable, ella te quería demasiado hasta decía que fuiste su primer cuñada que amo — dijo con una sonrisa.
Agarro sus manos con una sonrisa e inconscientemente me acerco a ella lentamente, hasta que juntamos nuestros labios. Podía sentir una pequeña chispa en el beso, conociendo ya sus labios por unos segundos pero después es todo borroso. Después unos segundos nos separamos ya que Yelena pasó a rozar su mano en mi herida.
— Lo siento — dijo con una sonrisa culpable.
— No importa, vamos a casa. Tenemos mucha cosas que tengo que recordar — dije subiendo mi brazo hasta sus hombros.
ESTÁS LEYENDO
Famosas y Tu (one shots y imaginas)
FanfictionOne shots o imaginas de diferentes famosas. Puedes ser lo que tu quieras ser: dijo Barbie.