Famosas y Tu (one shots y imaginas)

Hope Mikaelson

— Vamos a visitar aún viejo amigo, tenemos mucho de qué hablar — dijo Damon, mientras se tomaba de un sorbo el trago.

— Podre molestar un poco a su hija — dije mientras lo miraba con una enorme sonrisa.

— No — dijo serio.

— Pero padre, me gusta fastidiarla. Por favor por favor por favor — dije enojándolo.

— ¡De acuerdo, pero deja de fastidiar, eres igual a tu madre! — dijo empezando a caminar.

Con una sonrisa malvada lo empiezo a seguir.

— El que llega último tendrá que decirle a mamá que le rompieron el jarrón — dije mirándolo por unos segundos para luego empezar a correr lo más rápido.

Podía escuchar las maldiciones de mi padre detrás de mi haciéndome reír, pero para fastidiarlo más aún acelero mis pasos llegando primero a la casa de los Mikaelson.

— Eso no es justo — dijo enojado.

— No seas un llorón, yo iré a ver a la hija de Klaus — dije empezando a caminar hasta el bosque.

— Buena suerte, lo vas a necesitar.

Ignorando su risa malévola me entró al bosque y podía escuchar a los pajaritos cantar. Activo todos mis sentidos y oigo una voz dulce a lo lejos cantar y sin duda sabía quien era ella. Empiezo a caminar mientras tarareaba una canción que siempre escuchaba mi madre ya que era muy pegadiza. Cuando la veo arriba de un árbol mientras dibujaba una gran sonrisa estaba en mi rostro y era bastante raro ya que la mitad de la personalidad de mi padre la heredé.

— Sabes que en unas horas se pondrá a llover — dije subiendo mi mirada hacia ella.

— No lo sabía gracias — dijo tan siquiera mirarme.

Rápido uso mi velocidad y estoy arriba del árbol junto a ella. Veo como dibuja y por curiosidad le agarro el cuaderno.

— Pásamelo ________, entrégamelo ahora — dijo Hope tratando de quitármelo, pero rápidamente me levanto del tronco y pongo mis pies en puntitas no pudiendo obtenerlo.

— Vamos Mikaelson, solo quiero ver cómo dibujas — dije empezando a hojear el libro.

La chica tenía mucho talento al contrario que yo, ya que hacía a las personas con palitos como si fuera una niña de dos años. Seguía hojeando mientras que Hope trataba de quitármelo, pero eran dibujos de paisajes, flores hasta dibujo a su madre, pero un dibujo me llamó la atención. Era yo, era yo en una especie de bosque con mi expresión totalmente seria pero lo que más me llamo la atención fueron unas frases que estaban debajo del dibujo.

"Eres la chica más insoportable que he conocido en mi vida, pero cada vez que sonríes me haces quererte más"

— Que cursi — dije levantando mi mirada.

Hope a la tal acción toma el cuaderno y salta del árbol.

— ¡Oye espera! — dije yendo detrás de ella.

— ¡Por qué siempre eres así como tu padre, lo arruinas cada vez más cuando abres la boca y ni que hablar sobre tu actitud! — dijo enojada Hope mientras no paraba de caminar.

— Lo siento, pero escúchame — dije agarrando su mano, haciéndola detener.

Hope se gira hasta a mí con una mirada para nada amigable, en cuanto iba a disculparme por ser una estúpida siento pasos detrás de mí y la expresión asustada de Hope. Tan siquiera alcanzo a girarme cuando siento un dolor punzante en mi hombro, cuando bajo mi vista veo una flecha de plata incrustada en hombro.

— ¡Joder tenemos que correr! — dijo Hope.

Empezamos a correr lo que más que pude, pero el dolor en mi hombro era casi imposible ya que todavía tenía la flecha en mi hombro. Pensábamos que ya lo habíamos perdidos, pero veo como agarran a Hope del pelo y la tiran contra un árbol.

— ¡Hope! — grito asustada.

Quise ayudarla, pero siento que me toman del pelo y me acorralan contra un árbol.

— Hope, Hope, Hope. ¿Acaso es tu novia, que tanto te preocupas por ella? — dijo un hombre que sabía perfectamente quién era, no lo conocía en persona, pero mis padres me hablaron de él.

Un cazador de vampiros, en realidad le gustaba cazar de todo como hombres lobos, vampiros, súcubos y sobre todo brujas.

— Eso debe doler ¿no? — dijo el cazador mientras tocaba mi herida haciéndome soltar un grito de dolor.

— ¿C-como está tu esposa? Lo siento, pero no he tenido tiempo para ver...... — las palabras se fueron al carajo cuando siento un golpe.

— ¡No hables de mi esposa maldita niña malcriada! — dijo llevando su mano a la flecha y de un tirón la saco.

— ¡Déjala estúpido! — grito Hope tratando de caminar hasta nosotros, pero el hombre que la tenía no la dejaba.

— M-mi padre te hará pedazos — dije soltando una risa.

— No si lo aniquiló primero.

Solamente escucho un golpe hueco y ver todo negro.