— Señora su cupón está vencido, no puede ocuparlo después de la fecha — dije mirándola.
Llevaba unos veinte minutos en caja ya que la señora tenía un cupón de descuento y la fecha se había vencido hace tres meses, pero la señora insistía en llevarme la contraria. Estaba claramente enojada y más encima era rusa, sus insultos no los entendía para nada y más de una grosería me habrá dicho.
— ¿A ver, que pasa aquí? — preguntó el gerente.
Yo suspiro y me giro.
— El cupón está vencido, le he dicho más de una vez que no podemos recibirlo — contesté mirándolo.
Leo suspira y asiente — Es el último cliente por esta noche, solo recibe el cupón — dijo golpeando mi hombro amigable.
Yo asiento a sus palabras, pasó todos los productos que llevaba mientras veía que la señora me miraba enojada. La mujer me tira prácticamente el cupón y solo suspiro, suspiro hasta 100 para no pararme y pegarle un putazo. Me da los bitelles y se va de vuelo, sin agregar que me dijo un comentario en ruso.
— Yo también la quiero señora — susurré poniéndome de pie.
Tomo mis cosas ya harto de esto, voy a la parte trasera del supermercado y recogo mis cosas. Tan siquiera me dieron ganas de cambiarme de ropa y de conversar con mis compañeros. Eran las 11:30 y Miley debe estar ya dormida plácidamente. Manejo por las calles desiertas y la mayoría de los semáforos estaban en verdes, al llegar saco las llaves y abro la puerta sin hacer mucho ruido.
Al estar dentro veo la mesa adornada, había un vino y velas encima de la mesa. Me giro y veo a Miley traer la comida a la hermosa mesa.
— ¿Y esto? — pregunté mirándola.
La chica me da una sonrisa y saca las cosas que tenía en mis manos dejándolas en el sillón. Camina hacia mi y toma mis manos.
— Es por la cena de ayer, lo quise recompensar. Por el mal rato que pasaste, así que hice tu comida favorita. Fideos con salsa y albóndigas — comentó sonriendo.
Yo suspirando retiro mis manos suavemente, beso su frente y escucho su risa por parte de ella.
— Eres increíble — susurré separandome de ella.
— ¿Comimos? — preguntó con una sonrisa a lo que yo asiento.
Me siento en la mesa y Miley va a buscar dos copas para el vino. Al llegar con las copas Miley se sienta y yo comienzo a servir el vino.
— ¿Y cómo te fue hoy en el trabajo?
— Horrible — contesté al pasarle una copa a Miley — La gente estaba de mal humor, tuve que aguantar los cambio de humor de cada cliente que pasaba por mi caja, sin omitir que una señora estuvo discutiendo conmigo. Nunca olvidaré su rostro —
A mis palabras Miley suelta una risa al llevar su copa a sus labios.
— Pero debo decir que la señora me acordó a ti cuando no querías entregarle la última licuadora que estaba en oferta en navidad — dije comiendo de mis fideos, a mis palabras Miley se atraganta.
— Pensé que lo había olvidado — habló en reproche al limpiarse su boca.
— No mi amor, nunca olvidaré tu rostro por esa licuadora. Estuviste discutiendo con la chica unos diez minutos pero aún así no le entregaste tu licuadora — comenté sonriendo.
— Es que era hermosa y más encima estaba a 40 dólares — habló sacando un puchero.
— Ahora ya se que te regalaré esta navidad, dos licuadoras en ofertas — dije comiendo, recibiendo un gesto infantil por su parte.
Seguimos comiendo mientras hablábamos, Miley se ahogó en dos ocasiones con el vino por mis experiencias pasadas. Contábamos unos cuantos chistes y experiencias, hasta que no quedó nada en el plato.
— Dios.... esto estuvo increíble pero ahora quiero mi postre — dije bebiendo del vino que me quedaba.
— Pero comiste postre ayer cariño, ¿no te acuerdas? — respondió Miley dándome una sonrisa pervertida.
— Hay una frase cariño figurita repetida no completa el álbum pero plato rico se come dos veces.
Por mis palabras Miley coloca sus ojos en blanco ya que siempre tengo la palabra al final. Siempre la dejo frustrada ya que al pelear o al hablar Miley siempre se le van las palabras al decirme las cosas, pero vuelve nuevamente cuando la discusión ya había terminado hace dos horas, dándome ganas de reír. Mientras que Miley buscaba el postre yo voy hacia la radio, veo de reojo que Miley deja el postre en la mesa y justo escucho la canción que me encanta.
It's Beeen A Long, Long Time
Tomo la mano de Miley y la acerco a mi. Viendo una sonrisa de oreja a oreja en su rostro, comenzamos a bailar al ritmo de la música. Nos mirábamos sin quitar nuestros ojos del uno al otro.
— Amo esta canción y quiero que sea nuestra canción cuando nos casemos — dije mirándola con una sonrisa.
— ¿Quieres que forme parte de tu vida? — preguntó casi sorprendida.
— Claro que quiero, quiero que esa canción sea solamente para nosotros. Quiero bailar esa canción contigo cuando seamos viejos, quiero que nuestros hijos bailen la misma canción cuando ellos encuentren el amor de su vida — contesté viendo que los ojos de ella se volvían cristalinos.
Veo que muerde su labio inferior viendo una sonrisa por su parte.
— Eso suena perfecto para mi — dijo acercándose más a mi, bajo mi mirada juntamos nuestros labios.
Definitivamente ella será mi Peggy Carter por la eternidad.
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Famosas y Tu (one shots y imaginas)
FanficOne shots o imaginas de diferentes famosas. Puedes ser lo que tu quieras ser: dijo Barbie.