Estaba con Victoria y lo chicos mientras bebíamos unos refrescos hasta que llega la simpática de Jade con su típica cara de culo.
— ¿Porque estas tan seria Jade? — le preguntó Cat mientras bebía de su refresco.
— Que te importa Cat, métete en tus asuntos no en los míos de acuerdo — le dijo la pelinegra con su típico tono duro.
— No es necesario que le hables así Jade, solo te está haciendo una pregunta nada más — dije sin despejar mi vista en la chica, veo como todos empiezan a irse quedando yo, Cat y Jade en la mesa.
— ¿Y tú que haces aquí? te conocemos hace una semana y ya te sientas con nosotros, sales con nosotros como si fuéramos tus amigos — dijo Jade mientras se ponía de pie y me apuntaba con su dedo — No deberías estar con nosotros porque apenas te conocemos — dijo lo último para luego irse.
Con Cat nos quedamos en silencio mientras la veíamos como la perdíamos de vista hasta que habla.
— No debí abrir la boca, siempre cuanto digo algo la gente se enoja y pelean. Soy una completa idiota — dijo Cat triste.
— No digas eso — dije girándome hasta ella para luego tomar sus manos — No debes quedarte callada porque alguien te lo dice Cat, tu puedes opinar todo lo quieras. Y sobre Jade, sabes cómo es ella le falta un novio para que deje ese carácter enojón que tiene —
— Eres genial ________— dijo Cat mientras me abrazaba.
— Vámonos Lava girls, tenemos dos clases más — dije mientras la ayudaba a ponerse de pie y caminábamos a nuestra clase.
La clase transcurrió normal, estuve más hablando con Cat que poner atención a la clase. Camino con pereza a mi otra clase y era biología. En cuanto entro a la clase veo a Jade al final del asiento con sus cejas fruncidas. Me siento y no había notado que había una rana muerta en cada mesa del aula. Estaba a punto de tocarlo, pero justo llego la profesora.
— Ya chicos, esta clase será en parejas así que vayan buscando — dijo la profesora mientras se sentaba en su silla.
Todos empezaron a pararse y buscar a sus respectivas parejas quedando solamente yo y Jade, y como la chica no va querer ponerse de pie agarro mi mochila y camino hacia ella. Esta mi ignora por completo, pero haciéndolo también agarro el bisturí y comiendo a destripar a la pobre rana. Veía de reojo a Jade como ponía una expresión de asco y me reía en silencio.
— Por qué siempre tienes esa mirada seria de quiero golpear a todo el mundo en la cara — comenté sin quitar mi vista en la rana.
— Por qué sigues respirando — dijo ella haciéndome reír.
— Algún día llegara alguien que romperá tu corazón de hielo West, y me gustaría hacerlo yo — dije girándome hacia ella.
Ella no dijo absolutamente nada, solo tenía sus ojos afuera por lo que le abre dicho o porque la rana tenía la mitad de sus tripas afuera.
— Y-yo eres un idiota como todos en la esta sala — dijo quitándome el bisturí y la pequeña caja que estaba la rana.
— Podre ser un idiota o seguramente quedare como un idiota después que diga esto, pero me gustaría que fuéramos a ver una película, o ir a comer un helado. Lo más te gusté — dije viéndola.
— Odio las películas — dijo mirándome — Pero si me invitas un helado de menta, podré pensarlo — dijo girándose hacia la caja y la pequeña esquina de su labio se levantó, pero rápidamente puso su rostro serio.
— Un helado de menta será — dije con una sonrisa.
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