37.Él#1.
Así que estaba sucediendo, de la misma manera en la que universo se expande, haciendo las variables incontrolables.
Sucedía, de la misma las rocas del Valle de la Muerte se mueven y que el volcán Popocatépetl muestra actividad.
Era inevitable como poder detener una célula sanguínea que termina su recorrido, o que alrededor de siete nuevos corazones comenzaran a latir al mismo tiempo cinco más lo dejaban de hacer.
Y de la misma manera en la que todo eso sucedía, dejándonos solamente compartir la cuarta dimensión, no podía hacer nada para cambiar ese hecho.
Como tampoco podía hacer nada para cambiar ese miedo, esa amenaza corriendo desde mi sistema límbico, mi propio enemigo emocional residiendo en el mismo lugar que yo habitaba.
Cuando tenemos cuidar algo desde la distancia, tendemos tener la perspectiva de persona desbaratada, convertida en pequeños gajos de momentos y acciones que la convierten en la personas que tú crees que es. De la misma manera en la que tergiversamos por completo la realidad de una película con una buena música de fondo, o la perspectiva de un libro o una clase por las críticas. Podemos crear lo que queremos en nuestra mente tanto como algo perfecto como imperfecto, sin repercusión alguna si nosotros nos negamos a verlo de esa manera. Puedes usar tus problemas y usarlas como las piezas de tu cuadrado perdido, acomodándolo a tu gusto para hacer todo perfecto.
Y eso era lo satírico de esta situación: cuando eres ignorante a todo, la realidad te parece edificante e infravalorada, fácil de criticar. El futuro es abstracto, pero con alguna meta que seguir, fuese tan mediocre y patética, como factible y esperanzadora para el resto del mundo.
Por lo menos tienes algo, y el mundo está abierto para ti, de todas las maneras posibles.
Sin embargo, luego viene ese objetivo que no tiene estudios ni instrucciones, no hay alguien que te diga qué hacer, cómo sentirte o una explicación científica, ni siquiera una teoría que uno mismo puede cuadricular y moldear a sus deseos.
Las cosas se convierten en blanco y negro con ese secreto, inclusive aunque sea ese que tanto tiempo habías estado buscando a tientas, y apagas la luz, porque sabes que es lo mejor que puedes hacer, porque sabes que no lo puedes detener.
Así que eso hice: apagué la luz e intenté dormir, imaginando y recordando cómo era que sus rostros se habían extinguido en la oscuridad.
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1. Agente TF01, origen.
БоевикHay grietas llenas de dolor y de misterios; ahí es donde nacen las dos agencias cuya rivalidad es tan grande que su objetivo es olvidado. Tamara sabe perfectamente cómo controlar su doble vida como una agente y una adolescente: tiene amigos, pa...