Sans en High School DxD

Capítulo 35: Blasfemias

La situación en el Club del Ocultismo no podía empeorar... No fueron los demonios quienes se metieron en problema con las enviadas de la Iglesia, fueron los mismos ángeles que confrontaron a Xenovia he Irina. 

La presión mágica ejercida en el lugar era fácilmente notable por todos, pero solo eran los demonios quienes comenzaron a sudar frio.

Xenovia: No se quien demonios se creen que sean, no son de los Gremory y dudo que sean de los Sitri. Pero tienen las agallas de encararme a mí y mis creencias... Si no son parte del sequito de Rias Gremory, ¿Eso significa que no hay problemas si te demuestro la superioridad de la Iglesia verdad? 

Con una expresión molesta, Xenovia destruyó las enredaderas que sometían su brazo. 

Marut: Tch...

Irina: X-Xenovia, creo que será mejor irnos, no queremos hacer esperar a los ángeles...

Xenovia: ¿No te molesta que se mofen de nuestras creencias, Irina? 

Irina: Pues, si, pero... 

Rias miraba todo lo que sucedía con completa calma, no tenía la intención de intervenir, después de todo si es Sans quien se encarga ellos no tendrían problemas con la Iglesia, el hecho de que esas dos chicas hayan hecho llorar a su [Alfil] no ayudaba a cambiar su decisión.

Sans: No volveré a repetirlo colega, solo... Discúlpate. Ni tu ni yo queremos esto.    

Xenovia: Tu expresión dice lo contrario, aun que reconozco que la máscara sonriente que llevas es muy eficaz. 

Sans: ...

Irina fue con su compañera para tratar de convencerla, el peliblanco no parecía alguien normal para ella. 

Irina: Ya vámonos Xenovia, en serio. 

Xenovia: No me moveré hasta que estos sujetos se traguen sus palabras. 

Marut: ¿Estás seguro de esto Jefe?

El arcángel se limitó a mirar al rubio con una expresión relajada pero sin dejar de lado su sonrisa, se podía notar un particular enojo en él. 

Marut: Entendido... 

Sans apuntó su mano en dirección a Xenovia he Irina y chasqueó los dedos. 

Xenovia: ¡Te arrepentirás!

Justo cuando la peli azul se iba a abalanzar sobre Sans con espada en mano, la ex monja se detuvo en su camino, provocando que Xenovia se detuviera abruptamente. 

Con una sonrisa falsa, Asia toma con cariño la mano que Sans tenía extendida. 

Asia: E-Está bien, Onii-San... Es suficiente, nada de esto es necesario. 

Sans: Ya perdí a un hermano, Asia, me aseguraré de que ese incidente... NO se vuelva a repetir. 

A diferencia de siempre, el carácter apacible de Sans se había esfumado, el tono del arcángel era uno serio y determinado. 

Asia: Lo aprecio mucho, de verdad no sabes la felicidad que me provoca ver lo que significo para ti, Onii-San. Pero si las m-matas, te meterás en problemas con tu líder, ¿No? 

Sans: ...

Marut: Jefe, me pidieron que te sirviera en todo momento, por ende, te acompañaré en cualquier decisión que tomes... Pero la princesita tiene razón, no saldrás bien parado si lo haces. 

Asia: Ya estoy bien, no te preocupes, es suficiente para mí el ver a todos mis amigos preocupados~ 

Con una sonrisa amable, Asia termina por apaciguar al arcángel.