Capítulo 14 - Los Angeles

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Tom:

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Tom:

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Está mujer me está volviendo loco, hace solo unas horas estaba a punto de irme sin mirar atrás.

¿Con que cara veré a mi mejor amigo?

Me cogí a su hermana y aún peor... ella era virgen.

Pero cuando la tenía, así como ahora todo se me olvidaba, ella estaba sobre mi, besándome.

Yo solo podía corresponder ese beso que me encendía en un instante.

Sentir su calor sobre mí, el roce de sus pechos, sus piernas, me hacía ponerme duro.

Princesa, muero por entrar en ti otra vez— le dije en medio de un beso

Hazlo entonces, papi— eso me encendía mucho más

Me estire hasta la mesita de noche y tome un condón, iba a abrirlo, pero Nashi me interrumpió.

Me quitó el condón, abrió el paquete y lo coloco en su boca

Dios mío

¿Acaso quería volverme loco?

Con proeza coloco el condón en mi miembro y sin dudarlo un segundo me introdujo en ella. Se seguía sintiendo tan estrecha.

Estás tan apretada que por poco y me duele— tenía mis manos en sus nalgas

Nashira comenzó a gemir cada vez más fuerte, entonces decidí moverme junto con ella para aumentar el placer.

Papi...

¿Si, princesa?

Voy a correrme!— dijo casi en un grito por la excitación.

Hazlo mi amor, córrete en mi... lléname de tus jugos deliciosos— se inclinó sobre mi

La sostuve de la cabeza y la cadera para que no se moviera.

Aumente la velocidad de mis embestidas y al fin llegó a su delicioso orgasmo. Sentí que algo caliente rodeaba mi miembro.

Fue delicioso.

Se quedó sobre mí un segundo, estaba muy agitada.

Con agilidad me puse sobre de ella, tome una de sus piernas y la puse en mi hombro... la penetre tan profundo que con la primera embestida creí que se corría.

Con un carajo! — se quejó

¿No te gusta?

—Me encanta, por favor no pares! — seguía gimiendo delicioso

Tenía los ojos cerrados y podía sentir como su vagina palpitaba.

Quite su pierna de mi hombro y la gire con brusquedad.

La constelación de mi almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora