Capítulo 135 - Tristeza

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Nashira:

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Nashira:

Sepultamos a mi papá con la mayor rapidez del mundo, Diana me habló para darnos el pésame, mi hija estaba con ella y la oía llorar.

Aún teníamos que pasar tres días más sin ella porque había que hacernos la prueba.

¿Te vas conmigo o con Nashi? — preguntó Donati

Me voy con Nashi

Bueno, me hablas cuando quieras irte a casa con Karen y conmigo — lo abrazo

Si— sonrió de lado

Subimos al auto, Thomas manejo directo a la casa, entre y Bobby corrió a brincar a mi lado

Hola mi bebé, te extrañé — me senté en el suelo y comencé a llorar

Hola, Bobby — lo saludo Altair

Bobby se fue con él y Thomas se sentó a mi lado, me abrazo, creo que aún estaba en shock por la muerte de mi papá. Solo volví en mi cuando Thomas me abrazo, es mi lugar seguro.

Iré a dormir un poco, me siento agotada — le dije a ambos

¿Puedo dormir contigo, Nash? — preguntó Ali

Puedes dormir donde quieras — habló Thomas — yo ocuparé la habitación de huéspedes

Gracias, amor — le di un suave beso en los labios

Tom:

+18

Agosto 2020

La muerte de Elliot fue tan repentina, tal parece que solo esperaba a ver a Nashi y a sus nietas para poder descansar, todos ignorábamos que estuviera enfermo del corazón.

No pudimos hacerle un funeral digno por el covid, de inmediato lo sepultamos junto a Johana.

Nashi estaba muy deprimida por la muerte de su papá, temía que le hiciera daño al bebé, su pancita de cuatro meses comenzaba a notarse, Ali se quedó con nosotros este mes y dormía junto a Nashi.

Siempre han sido cercanos y se necesitaban.

A veces Anne se metía entre ellos para dormir o quizá para alejar a Altair de Nashi, ella les daba ánimo a los dos. Donati dijo que Altair viviría con él en lo que arreglan todo el asunto de los bienes de Elliot

Ya está el desayuno — Nashi me despertó con un beso

Que rico — la jale para que se acostara a mi lado — ¿Que preparaste?

Omelet — dejaba pequeños besos por toda mi cara

Delicioso — hundí mi nariz en su cabello — ¿Pero no nos podemos quedar acostados un rato? Hace tanto que no dormimos juntos

La constelación de mi almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora