Mackenzie
Dylan, aun tomándome de las manos me jala suavemente hacia él. Yo trato de que mi falsa sonrisa se mantenga en mis labios y espero que no se me note que estoy comenzando a sudar.
Suelta una de mis manos para ponerla en mi espalda y acercarme más y con la otra sigue sosteniendo mi otra mano.
Yo uso mi mano libre que es la derecha para ponerla en su mejilla y tener, aunque sea un poquito de privacidad en este beso. Logro tapar un poco de nuestros rostros para cuando él me besa.
De fondo escucho a las personas aplaudiendo y gritando "vivan los novios".
El beso no dura más de dos segundos y no es nada extraordinario. Solo fueron labios contra labios y punto. Y creo que así serán los besos que llegue a darme durante este día con su familia presente, porque, ¿qué clase de personas "religiosas" seríamos si nos ponemos a darnos besos muy explícitos enfrente de la familia en donde obviamente habrá niños presentes?
Los católicos no hacen eso, ¿o sí?
Al salir de la iglesia, muchas personas que no conozco quieren tomarse fotos con nosotros. No miento, mis labios y mejillas ya me duelen de tanto sonreír para la cámara.
La tía de Dylan, la innombrable, bueno no, no es innombrable pero la tía que tanto pelea con Lisa se acerca con su hijo a felicitarnos.
Se ve clarísima su hipocresía. Primero me abraza a mí y luego a Dylan. Luego su hijo me mira fijamente a los ojos y siento que trata de intimidarme por la forma en que lo hace. Admito que lo logra.
Es como una mirada fría, pero también como si le hubieran contado un chiste, y también es como una mirada de maldad. Rayos, da miedo. Intimida aún más porque, siendo sincera, es muy, muy guapo.
—Prima. ¿Puedo llamarte así ahora, ¿no? —pasa su mano por el largo de mi brazo acariciándolo.
—O puedes decirme Mackenzie —sonrío y muevo mi brazo para que deje de tocarme.
—Que linda —pone sus manos en mi espalda y me abraza apretándome hacia él —felicidades, prima. No pensé que fueras tan hermosa —esto último lo susurra en mi oído para que lo escuche solamente yo y lo dice en un tono como... seductor, lo cual me causa nauseas.
Me hago hacia atrás para que él deje de abrazarme, pero trato de no verme tan ruda al hacerlo.
No puedo seguir sonriendo como lo estaba haciendo hasta hace un minuto. Él está viéndome con una sonrisa burlona porque notó esta reacción como de ponerme a la defensiva.
Al parecer Dylan también lo nota porque se aleja de su tía para tomarme de la mano y ponerse un paso delante de mí.
Su tía me ve de pies a cabeza —nos vemos en la recepción de la fiesta —y se da la vuelta para irse.
—Linda parejita —Lance nos señala con su dedo índice y medio a Dylan y a mí —Un poco apresurada la boda, ¿no, primo? Ni siquiera sabíamos que tenías novia. ¿Voy a ser tío? ¿Está embarazada? —cuestiona, al igual que lo hizo su madre en la despedida que me organizaron Julia y mi ahora suegra.
—¿Cómo? ¿Debería informarte cuándo y con quién salgo? —responde Dylan.
Lance ríe —La verdad, con lo que ha pasado los últimos años, entiendo porque la has dejado fuera de las reuniones familiares. Ya sabemos en donde terminan tus... invitadas. Tan lindas todas ellas...
Siento como Dylan aprieta mi mano. Aunque no me lastima puedo sentir que está enojándose.
No sé a qué se refiere Lance, pero no creo que sea algo bueno.
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Dame un año (TERMINADA)
RomanceMackenzie perdió todo cuando su exnovio apostó sus ahorros en un juego de póker. Dylan está a un año de ser el director del hospital más importante de Nueva York y el heredero oficial de su abuelo fallecido. Si ambos deciden hacer un contrato un tan...