Dylan
El domingo en la tarde, Mack me pide... no, no me pide, me obliga a acompañarla a su departamento para ver a su ex. No me deja opciones, así que la acompaño porque fui yo el que la comprometió a ir.
Ella no ha dejado de pagar la renta porque obviamente necesita un lugar decente al que ir cuando nuestro contrato termine. En esta ciudad es difícil encontrar un lugar decente y a buen precio.
Todavía no son las 7 de la tarde que es a la hora en la que quedó con Dante, pero cuando llegamos al departamento de Mack, él está recargado en la pared frente a la puerta.
Mack ni siquiera lo mira cuando llega a su puerta y mete la llave en la cerradura para abrirla.
Yo saludo a Dante con un asentimiento de cabeza y él hace lo mismo.
Mack entra primero, su ex me mira para ver si voy a entrar yo, pero extiendo mi mano para que él entre. Luego entro yo y cierro la puerta detrás de mí.
El departamento es pequeño, la cocina, la sala, y la recámara están unidas, es decir no hay paredes que separen las áreas. Solo hay una puerta que obviamente debe ser el baño.
-Gracias por venir. -Dice Dante con las manos en sus bolsillos del pantalón. Se ve inseguro y nervioso. Y agregaré incómodo también, por mi presencia.
-Mmm... yo estaré afuera... -digo, pero al instante Mack me mira como si estuviera advirtiéndome.
-Tu quédate aquí. -me dice.
-Bueno... iré al baño...
-Aquí. -repite firme.
Asiento sin insistir de nuevo en dejarlos solos.
Hay una ventana que tiene vista hacia la calle, me acerco y miro hacia afuera para no tener que estar mirando directamente hacia ellos, pero la conversación que tendrán voy a escucharla toda. Esto será incómodo.
-Parece que... no has estado aquí en un buen tiempo. -dice él.
-Lo que sea que tengas que decirme, dilo ya. Dylan y yo tenemos muchas cosas que hacer. -dice Mack.
Dante suspira y al parecer se volteó a verme. Yo sigo viendo por la ventana como un tonto.
-Salí hace dos semanas. Me acortaron la sentencia por buena conducta...
-10 meses, 7 meses. ¿Cuál es la diferencia? Perdiste los ahorros de mi vida en ¿qué? ¿Un hora? -dice Mack amargamente.
-De verdad estoy muy arrepentido, Kenz. Yo... fui un idiota. No debí haberlo tocado... estaba apostando con mi dinero y estaba yéndome muy bien, ya había ganado el triple... tenía buena suerte... y... creí que seguiría así y... ¡carajo!
-¡Eso es lo que te hacen creer en esos estúpidos juegos! ¡Te dejan ganar al principio y luego te quitan todo! ¡Te pedí muchas veces que dejaras de apostar!
-Lo sé. Por favor, perdóname.
Volteo un poco para verlos. Mack solo está diciendo que "no" con su cabeza y mira hacia todos lados menos a él.
-No voy a descansar hasta juntar todo ese dinero de nuevo. Voy a pagarte, por favor, créeme. -Dante da un paso hacia Mack.
Ella retrocede dos. -No quiero que me pagues nada. Y te lo estoy diciendo enserio. No aceptaré ni un solo centavo viniendo de ti. -lo mira al fin.
-Necesito pagarte o no podré estar tranquilo.
Mack suspira irritada. -Puedes estarlo, ¿ok? -está tratando de estar calmada y quiere hacerle entender que no debe pagarle. Quizás ese es el primer paso para perdonarlo. -Ya no me importa ese dinero. No lo necesito. Tengo mucho trabajo ahora y... estoy bien. Tu solo preocúpate por ti y... deja de apostar.
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Dame un año (TERMINADA)
RomanceMackenzie perdió todo cuando su exnovio apostó sus ahorros en un juego de póker. Dylan está a un año de ser el director del hospital más importante de Nueva York y el heredero oficial de su abuelo fallecido. Si ambos deciden hacer un contrato un tan...