El auto de Estados Unidos se detuvo justo enfrente de la casa de Syria, detrás de la camioneta de España que estaba estacionada frente al jardín.
- Mis hermanos ya llegaron - comento Chile mientras bajaba del auto.
- ¡Ya llegaron Perú, Chile y el gringo! - dijo Paraguay desde la puerta de la casa haciendo que Colombia y Venezuela salieran con una sonrisa en el rostro.
- ¡Pasen, Chamos! - dijo Venezuela abriendo los brazos viendo como Perú, USA y Chile bajaban del auto.
USA se recargo en el automovil, desearía tener un poco de privacidad para despedirse de su novio, pero en vista de que no sería así, solo espero a que él pelirojo dejara de saludar a sus hermanas y se volviera hacia él. Colombia engancho su brazo con Chile y Perú y comenzó a caminar hacia dentro de la casa, los tres se detuvieron cuando Perú noto que su novio no le seguía, volvió la vista hacia él y sus hermanos igual lo hicieron.
- ¿No piensas pasar? - pregunto Venezuela quien no se había movido del lugar.
- ¿Ah? Well... Yo creí que... Era cena entre familia y... - el rubio comenzó a ponerse nervioso, rascándose la cabeza y mirando hacia su novio quien se había soltado del agarre de su hermana y caminaba hacia él.
- Aja ¿Y? Si usted es parte de la familia, parcero - le dijo Colombia sin moverse de su lugar, con Chile al brazo.
USA se quedó en silencio, sintiendo ese calido calorsillo extenderse por su pecho, como cuando fue recibido en su hogar por sus hermanos.
- Vamos, amor - sonrió Perú, tomando del brazo al rubio y lo encamino tranquilamente hacia dentro de la casa, seguidos por Venezuela que miraba al otro lado de la calle, buscando el auto de su hermana, ya casi era la hora que acordó Syria con Rusia.
Todos entraron a la casa, dejando a Paraguay afuera, pues aún no terminaba su cigarrillo y servía para avisar si llegaba el sovietico.
- Bienvenidos - saludo Syria, en la entrada de la casa, con el rostro serio y cordial. Podía no llevarse bien con el norteamericano pero era un caballero y no sería grosero con la familia de su novia.
Perú y Chile sonrieron, USA solo asintio, tampoco iniciaría un conflicto con el anfitrión de la casa. Venezuela se acercó a su novio y se gancho de su brazo cuando esté se lo ofreció y ambos comenzaron a caminar hacia la cocina para terminar con los últimos detalles.
- Vayan a la sala - dijo Venezuela antes de entrar a la cocina de lleno - ahí están los demás.
Chile, Perú y USA obedecieron, caminaron hacia donde se escuchaba el barullo, siguiendo a Colombia que seguía del brazo del pelinegro, caminando con elegancia y soltura.
En la sala, Ecuador charlaba tranquilamente con Uruguay quien miraba casi a cada 5 segundos a su hermana trilliza, Argentina, pues está estaba sentada en uno de los sillones, con el rostro pálido y perdido, se había mareado hace unos minutos y aún no se le pasaba. Corea del Sur, quien estaba en la sala, le daba un vaso de cristal lleno de agua que recogió hace un momento de la cocina.
- Buenas tardes - sonrió SurCorea cuando vio a los nuevos integrantes de la cena. Chile y Perú asintieron a modo de saludo y USA se acomodo los lentes de sol con una mano, después de saludar al coreano posicionando dos dedos en su frente y apartandolos en su dirección.
- ¿Aun te sientes mal? - pregunto Colombia a Argentina cuando se separó de Chile y se acercó a ella más de cerca, de modo que solo Argentina la escuchará.
- Che, te juro que estoy aguantando las ganas de volver el estómago - susurro afligida, mirando el rostro de su hermana. Colombia asintio y miro de reojo a Uruguay quien había dejado de prestar atención a Ecuador y sus ojos estaban fijos en su hermana trilliza.
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Vivir una mentira. RusMex +18
RandomDespués de irse a vivir a casa de su novio de toda la vida, México se siente más sola que nunca. Lloraba hasta dormirse a causa de su soledad, hasta que el amigo de su novio cayó a casa de visita. ADEVETENCIAS: La historia es principalmente RusMex...