Vivir una mentira. RusMex +18

Capitulo 32

En el aeropuerto del país latino todos los visitantes se encontraban en el enorme estacionamiento, esperando a USA y España quienes habían ido a rentar un par de autos para usar los días que estuvieran en el país y trasladar a todos quienes les acompañaban.

- ¿Y si entraremos en solo dos autos, che? - pregunto Argentina después de un rato, algunos estaban sentados en las bancas exteriores y otros, como Rusia, Canadá, los sextillizos, que jugaban en una rueda con sus manos a un juego llamado "juego de la oca" que su hermana México les había enseñado, e Inca estaban de pie.

- Los que no quepan se van en taxi - solucionó Maya de manera tranquila mientras alimentaba a Guyana con una mamila, Perú jugando con las manitas de Bolivia hacia como si este estuviera bailando mientras que Cuba estaba con su padre.

Poco después, dos camionetas de tamaño considerable llegaron frente a ellos, USA y España habían bajado de ambas para comenzar a subir las maletas a las partes traseras y Maya e Inca organizaban a todos para subirlos a las camionetas.

- Los niños se van con nosotros, Ecuador, Uruguay, Paraguay, Vene y Chile también suban, llevarán en sus hermanos en las piernas - ordenó Maya mientras Inca subía a los niños de uno por uno a la camioneta de España, después de que los jóvenes subieran primero - USA, cariño ¿Cuántos caben en la tuya?

- Además del conductor y el copiloto entran otros 6 y llevaré a mis hemanos conmigo - el rubio se acercó después de cerrar el maletero y miro a los que quedaban. Hizo una seña con la cabeza a Canadá y está abrió la puerta para que Groenlandia y los gemelos subieran, Perú ya estaba en el asiento del copiloto, con Bolivia en brazos, Canadá subió y se sentó al lado de su hermana.

- Coco, Arge - les llamo Maya y las chicas subieron - no vamos a dejar a Rusia solo en taxi - exclamo la mujer al ver qué el albino era el último que quedaba.

- Que suba aquí - dijo Canadá, había hecho que su hermana se sentará en sus piernas, la adolescente, apenada y sonrojada, se cubría el rostro con su cabello.

Rusia subió al lado de los gemelos cuando Colombia se sentó al lado de Argentina y todos cerraron la puerta para comenzar a avanzar hacia el rancho de México.

Poco tiempo después, ambas camionetas entraban por el portal de hierro forjado que decía "Mictlan" Rusia, Groenlandia y los gemelos Australia y Nueva Zelanda, miraban por las ventanas, atonitos y emocionados los colores de los árboles y las frutas colgando de sus ramas, las flores de los huertos y la enorme casa colonial en el centro del lugar.

Brasil, ya lista, esperaba en el pórtico de la casa, con una sonrisa en el rostro.

Las camionetas se estacionaron y todos comenzaron a bajar de estás. Argentina y sus trillizos, al ver a su prima, corrieron a abrazarla con fuerza, haciendola reir.

- Que gusto verte, sobrina - saludo España de pasada a la brasileña cargando maletas que dejo en el pórtico para volver al auto por más.

- ¡VAYAN Y DEJEN SUS MALETAS A SUS HABITACIONES, TODOS SABEN CUALES SON, APRESURENSE A BAÑARSE SI ES QUE LO HARAN Y SALGAN RAPIDO, TENEMOS MAXIMO HORA Y MEDIA PARA IRNOS, RAPIDO, RAPIDO! - ordenaba Maya y todos sus hijos tomaron sus respectivas maletas para correr escaleras arriba e instalarse en las habitaciones que México les habia otorgado cuando la acompañaban.

- Hola de nuevo, Azteca - susurro España al entrar, mirando con nostalgia el jardín interior con las plantas rebosantes de vida y los cenzontles cantando alegres por la visita.

- Nos da la bienvenida, España - sonrio Maya al ver las aves cantar, el español la abrazo por la espalda y asintio.

Aquella casa tenia toda la escencia de la difunda madre de su primogénita.