Le acompañe y mientras resultaba lágrimas silenciosas y seguía fumando. Ambos estábamos apoyados con la espalda en la pared uno frente al otro. Sirius llorar no está mal. No lo puedes dejar hasta luego explotar. Estoy contigo. James, Remus, Peter y yo estamos contigo... no pasa nada si lo quieres contar, pero estaremos a tu lado a pesar de que ya no lleve una sonrisa y este un par de meses mal. Sé que quieres hacerles sonreír, sé que quieres hacer como si no pasase nada pero no puedes, Sirius...
Lo siento no quiero llorar por ellos -dejó que sus lágrimas cayeran. Me levanté mientras él lloraba en mi pecho-
Sh...tranquilo -le murmure. Acaricié su pelo y dejé que gritase y lloras. Pasadas unas horas noté que se durmió y apoyé mi cabeza en la pared. Una media hora después, cuando ya me estaba durmiendo, noté como una manta tapaba a Sirius. Abrí los ojos y sonreí mínimamente al ver a Remus-
Ya me quedo yo con él -me susurró. James me cargó en brazos hacia la cama y luego me arropó. Se acostó en la cama de debajo y estiré mi brazo hacia abajo mientras veía a Remus acariciar el pelo de Sirius. Sonreí al sentir un pequeño mordisco en mi mano-
Tendremos que desayunar ciervo asado -le murmure y escuché su risa ahogada. Besó mi mano y pude visualizar como ambos estábamos mirando hacia arriba-
Estará bien. Es Sirius -murmuró. Asenti aunque sabia que no podía verle y luego nos dormimos -