Trataba de no cerrar los ojos ya que quería aprovechar el mayor tiempo posible con él
Elena, cariño, puedes dormir -me dijo Peter acariciando mi pelo mientras yo tenía mi cabeza en su hombro-
Estoy bien así, Pet -murmure-
Estoy aquí contigo. Descansa, yo te aviso cuando lleguemos a casa -me dijo Peter. Tampoco iba a pensármelo mucho-
Vale, gracias. Te quiero -susurre cerrando los ojos-
Y yo a ti -dijo, besó mi frente y al par de minutos me dormí. Pasadas unas horas abrí los ojos y sonreí al darme cuenta de que Peter estaba con su portátil acostado a mi lado y yo estaba acostada con una manta por encima. Me acerqué a él y besé su mejilla-
Gracias por dejarme dormir -le susurre. Probablemente sería la madrugada-
No es nada, cariño -dijo aún tecleando el ordenador-
¿Qué escribes? -le dije acurrucandome hacia él-
Intento hacer el trabajo de matemáticas pero no entiendo nada -me dijo abrazandome hacia él-
Ya te lo hago yo. Descansa un poco -le dije-
Te amo -dijo con diversión y haciendo un pucherito. Besé sus labios y empecé a hacer su trabajo mientras él dormía con su cabeza en mi pecho-