Yo sólo empecé a tomar mientras aun lo miraba, pensando si me iba a prestar atención o no.
¿Yo estoy tomando alcohol? Wow... ¿Eso cuando pasó?
—¿No vas a ir a bailar?— Me preguntó Kevin.
Yo lo miré y negué mientras me tomaba un trago. —¿Y tu por que no vas a bailar?—
—Oh no. Yo no bailo— Me negó el hasta que abrió los ojos como platos al mirarme detenidamente. —¿Estas tomando?—
—Claro— Le aseguré, mirándolo. —¿Que tiene?—
—Nada. Es que pensé que tú no tomabas. Pero no tomes de más porque no te lo recomiendo para nada— Advirtió Kevin.
—No lo haré— Negué, dejando el vaso de alcohol sobre la mesa.
—¡Kevin!— Gritó Fangs desde el otro lado del salón principal, solo.
Kevin miró a Fangs y le hizo señas de que ya iba hacia el y me miró a mi. —Betty... ¿Prefieres que me quede contigo?—
—Oh... está bien. Ve con el— Le aseguré con una sonrisa.
Kevin me sonrió y prácticamente se fue corriendo hacia Fangs. Yo observé el ambiente y los que no estaban bailando estaban tomando o charlando en una esquina.
Yo estaba sola, observando como los demás disfrutaban de la fiesta mientras comía panecillos y yo sólo lo miraba a él con atención.
Hablando y riendo con sus amigos. Él se estaba divirtiendo y su sonrisa era lo más preciado para mí en esa noche.
Estas muy perdida Betty. ¿Lo sabías?
—Betty— Me habló Verónica, acercándose a mi y tomando mi mano. —Vamos—
—¿A donde?— Le pregunté, confundida mientras ella casi me arrastraba a través del salón.
—Ya veras— Me aseguró, acercándose a Toni y Cheryl mientras yo la seguía.
En ese momento vi como Reggie se acercaba a la computadora y cambiaba la música. La cambió por una canción muy conocida que todos los chicos aman bailar hoy en día.
Principalmente perrear. Si... perrear.
—¡Vamos chicas!— Gritó Reggie, empezando a bailar con la música que él mismo había elegido.
—¡Esa es nuestra señal!— Avisó Verónica, dirigiéndose a la pista de baile.
Vi como Cheryl y Toni la siguieron y las tres empezaron a perrear en esa pista de baile y yo sólo reí mientras los demás chicos las apoyaban.
Me dio risa ver como Archie miraba a mi amiga Verónica. Por favor... ella volverá loco a ese chico.
—¡Únete Betty!— Me invitó Verónica, acercándose a mi.
Yo negué y ella rodó los ojos y volvió a la pista de baile para seguir en perreo con Cheryl y Toni y otras chicas que se habían unido.
Pero... ¿Que es lo que estoy viendo? Los chicos también se unieron y parecen strippers bailando junto a las chicas.
Mis amigas se unieron a ellos y ahí la fiesta se encendió. Chicos y chicas bajo los efectos del alcohol perreando como si no importara nada. Verónica se unió a Archie bailando sensualmente y Cheryl y Toni hacían algo parecido.
¿Y Kevin? Ni idea. Tampoco veo a Fangs. Seguro salieron de este zoológico.
Pero lo que me sacó de onda fue cuando vi que Jughead se unió a la pista de baile con movimientos extremadamente sexys. ¿Ese chico me quiere matar?
Entre él y Reggie estaban en eso, pero parecía que se trataba de una competencia entre ellos.
Obviamente mi Juggie ganaría.
¿Ya le pusiste un apodo? Oh Betty querida...
¿Y si perrear es la manera de llamar su atención? Puede funcionar.
Tomé aire y lo pensé un momento. ¿De verdad eso es lo que quiero?
Lo volví a mirar y esos movimientos me hicieron sentir algo similar a la electricidad en mi cuerpo. Ahí supe que de verdad quería que él al menos me mirara.
Me fui hacia la pista de baile lentamente y cerré los ojos. Me concentré en captar el ritmo de la canción tan pegadiza que sonaba en el momento y ahí empecé.
Empecé a mover mis caderas al ritmo de la música y a aplicar un poco del perreo que casi todos estaban bailando.
Cuando abrí los ojos noté como mis amigas dejaron de bailar y me miraron con los ojos abiertos como platos.
Si... ellas no se esperaban que yo hiciera ese tipo de cosas y aun menos con mi cabeza bajo los efectos de un poco de alcohol.
Pero el que me interesaba no me miraba y solo se puso a conversar con Reggie. ¿Para que había sido mi esfuerzo?
No me rendí. Me acerqué un poco más al centro de la pista de baile y ahí mis movimientos fueron más sexys que los que realicé anteriormente.
Utilice mis caderas y mi trasero al ritmo de la música y lo disfruté mucho hasta que pasó lo que yo quería que pasara.
Jughead me miró, y no cualquier mirada. Él me miró como si estuviera hipnotizado y con los ojos abiertos. Esos preciosos ojos azules...
Noté que había captado la atención de casi todos los chicos presentes en la fiesta y se acercaron a mi en la pista de baile. Yo seguí bailando mientras Jughead no me quitaba los ojos de encima.
Lo lograste Cooper.
Pero lo que me puso el corazón a mil fue cuando él empezó a acercarse a mi mientras bailaba como lo estaba haciendo anteriormente.
Esos movimientos tan perfectos y sexys como él... acercándose a mi.
Ayuda... me dará un infarto.
Él se acercó a mi, pero yo fui más ingeniosa e hice algo que realmente quería hacer, pero fue algo acelerado.
Me le acerque y de alguna manera él también se me acercó y empecé a bailar alrededor de él, moviendo mi trasero y mis caderas al ritmo de la música.
Él seguía cada uno de mis movimientos y me miraba de arriba a abajo. Yo evitaba mirarlo a él.
Pero cuando lo miré noté que él también lo hacía de una manera que no había notado antes. Era como si de verdad lo hubiese hipnotizado.
Empezamos a bailar cada uno en su espacio y con cierta distancia, pero sin perder ese contacto visual.
¿Nueva meta? Bailar con Jughead Jones.
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