•Crush• 'Bughead'

•70• "Final"

Creo que nunca fui tan feliz en toda mi vida. Mientras estas creciendo y descubriéndote a ti mismo, quien eres y qué quieres en la vida, te preguntas si eres feliz.

Mi vida no fue tan fácil. Crecí con padres que nunca se entendieron hasta que se separaron, mi mamá nunca estaba y cuando fui a la universidad por primera vez, ya me gustaba un chico y sufrí como nunca lo había hecho por un amor no correspondido.

Pero lo que yo no tuve en cuenta es que la vida puede sorprenderte y dar un giro de  360 grados. Nada es imposible por más difícil que parezca.

Y al parecer si tendré mi final feliz.

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Después de dos meses de planes y más preparaciones, llegó el día en el que Jughead y yo nos convertiremos en esposos y juraremos amor eterno.

Y eso me emocionaba tanto que aumentaban mis nervios. Estuve con las chicas, preparándome para salir al encuentro con mi casi esposo.

Decidimos celebrar nuestra boda en el salón principal de la universidad, en donde se sufrió mucho, pero al mismo tiempo, ahí empezó todo.

Cheryl, Verónica y Toni me ayudaron a arreglarme para la boda hasta que llegó el momento. El momento que toda niña sueña al ver esas películas de princesas con finales felices.

Llegó el momento en el que entré al salón principal de la universidad en la que estudié con mi largo vestido blanco y pelo recogido, con una diadema de flores sobre mi cabeza, con mis amigas como damas de honor detrás de mi y con la mirada de todo el público.

Mi mamá, los Jones, mis ex compañeros de la universidad, mi hermoso perro e incluso Chuck y Cora. Cora ya tenía un hermoso vientre de cinco meses de embarazo y ni ella ni Chuck cabían de la felicidad.

Y lo vi a él. Él estaba esperándome en el altar, al lado del oficiante de nuestra boda junto a sus buenos amigos Archie, Reggie, Fangs y Kevin estaba cuidando de mi hijo y de la hija de Archie y Verónica junto a los demás invitados.

Él me miró y me miró como si fuera lo más bello y especial que sus ojos estuvieran viendo. Y precisamente esa forma de mirarme me enamoró de él.

Yo quería llorar. De verdad que si. Caminé hasta llegar a él y lo miré y él me miró. Nos mirábamos como si un universo estuviera en nuestros ojos. No me di cuenta de cuando el oficiante de la boda empezó a hablar.

—Estamos aquí reunidos para celebrar la unión entre Elizabeth Cooper y Forsythe Jones en sagrado matrimonio, recordando que el matrimonio es una unión sagrada digna de respetar y admirar. Ahora... los novios manifestarán su consentimiento ante esta unión, haciendo sus promesas de amor— Habló el oficiante de la boda, mirándonos con una sonrisa.

Jughead quiso ser el primero en hablar y aclaró su garganta. —En este momento, yo, Forsythe Pendelton Jones III, te tomo a ti, Elizabeth Cooper, como mi legítima esposa. Prometo serte fiel todos los días, prometo amarte, cuidarte, respetarte y estar contigo en las buenas y en las malas... porque te amo y te amaré por siempre— Tomó mi mano.

Entrelacé mi mano con la de él y lo miré directo a los ojos para decir mis votos. Los nervios estaban acabando conmigo. —En este momento, yo, Elizabeth Cooper, te tomo a ti, Forsythe Pendelton Jones III, como mi legítimo esposo. Prometo serte fiel todos los días, amarte, cuidarte, respetarte y estar contigo en las buenas y en las malas. Te amo Juggie—

Juro que quería llorar, pero resulta que mi mamá, los Jones y Kevin ya estaban llorando de la emoción. No quise ser una más, pero no podía evitarlo.