8/10 📨Amor entre cartas📨

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Era el día. 15 de diciembre. Eran las tres de la mañana y Poché se encontraba redactando una carta contra reloj. Se le había ocurrido algo para la castaña y no podía dejar pasar la oportunidad de escribirlo. Estaba sentada frente a su escrito con la pequeña lámpara encendida en la esquina, Valentina estaba durmiendo en su cama y no quería despertarla.  ¿Por qué Valentina estaba en su habitación? Fácil, gracias a una película de terror la menor de las Garzón tenía pesadillas.

El sonido de la noche llenaba aquel silencio, junto con el leve ruido que hacía el bolígrafo tras marcar el papel con cada trazó que la chica de ojos verdes realizaba.

—Apaga la luz, déjame dormir. —se quejó Vale cubriéndose por completo con la manta.

—Es mi cuarto, puedo hacer lo que quiera. —se burló María José pensando que palabras usar para conectar las oraciones.

—Sí, pero ¿por qué a las tres de la mañana? —cuestiono con voz perezosa aun bajo la gruesa tela que la cubría de que la luz no diera directamente en sus ojos.

—Porque hoy es su cumpleaños y todo tiene que salir perfecto. —contesto dándole los toques finales a la carta, esperaba por lo menos dejar claro lo que sentía con aquella palabrasm.

—¿Es hoy? —inquirió con una energía renovada quitando la manta de sobre su cuerpo para luego incorporarse hasta quedar sentada. Poche se río internamente.

—Sí, es hoy, por eso mis nervios.

Con delicadeza metió la hoja en la libreta mas cercana y dejo el bolígrafo a un lado, era la primera vez que le entregaría una carta con su letra y no con la de una computadora.

—¿Compraste todo?

Con un leve asentimiento Poché se dio la vuelta en su silla y miro a su hermana, con un leve destello de esperanza y miedo en sus ojos.

—Todo saldrá bien —le aseguro Valentina con una leve sonrisa en su rostro —. Por todo lo que me cuentas es posible que te diga que sí.

—¿Y si me dice que no? —Valentina suspiro pesadamente bajando la mirada y con voz temblorosa contestó.

—Hay mas peces en el agua. —Poché la miro por unos largos segundo detalladamente y en silencio, eran como sí estuviera tratando de convencerse a si misma en vez de convencerla a ella.

—¿Estas bien? —Valentina nego con la cabeza sin poder evitar las lágrimas que empezaban a correr por sus mejillas. Poché rápidamente se levantó de la silla y se acerco a la cama, se sento junto a Vale y la atrajo a su cuerpo en un fuerte abrazo. Valentina rompió en llanto con más intensidad.

Duraron un par de minutos abrazadas. Poche acariciaba el cabello de su hermana con sutileza mientras apoyaba su cabeza sobre la de ella. Valentina rodeaba la cintura de su hermana con el rostro oculto en su cuello tratando de controlar su llanto. Tenian suerte de que su padre no estuviera en la casa, se ahorraba unas cuantas preguntas.

—¿Quieres contarme? —cuestionó Poché suavemente luego de que su hermana parara de llorar.

—Le dije a Mila que me gustaba. —contestó con voz quebrada.

—¿Te dijo que no le gustabas? —Valentina nego. Poché la miro sin entender — ¿Entonces?

—Me beso, me dijo que me amaba...pero dijo que la perdonara, que no podía corresponderme —sin poder evitarlo más lágrimas comenzaron a caer. Poché apretó mas el abrazo —. Dijo que la olvidara porque ella nunca podría darme lo que merezco y que merecía a alguien que me hiciera verdaderamente feliz.

—¿No te dio mas explicaciones?

—No. Ahora solamente me ignora y hasta ayer anoche me entre de hoy se va del país.

One Shots || Cache || 2do Libro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora