Daniel Valencia, presidente de ECOMODA

Capítulo 59

Sábado. A pedido de las de cuartel, había quedado en pasar el día del sábado organizando cosas en la casa de Sofía para ayudarla con cosas que pudiera vender y hacer un mercadillo.-¿Quieres decir que ya estás cerca, jovencita?-¿Cómo puedes decir eso, papi? Resulta que mis compañeros de clase de la universidad me necesitan. ¿Recuerdas que me encontré con uno de ellos estos días? Sucede que tuvimos que reunirnos en casa de uno de ellos para ayudarla.-¡Está bien! -Ajusta el periódico para leer. -¡Pero no se demore, jovencita!Armando, quien trabajaba con Nicolás en la computadora, había escuchado lo que Betty le había dicho a su padre, pero no creía que fuera cierto, pensaba que era mentira que les había dicho que se quedaran juntos.-Ay, Betty. Pero con todo este peso? Si quieres, me lo llevo.-Eh, está bien. ¡Adiós, papá, adiós, mamá!-¡Disfrútala! (Doña Júlia también pensó que Betty se inventaba algo para estar con Armando).En el coche.-Ves, ¿por qué trajiste estas cosas? ¿Qué tipo de ''perversiones'' piensas hacer, ah? ¿Qué pasa por esta cabecita brillante? – dijo Armando, mirando el bolso que llevaba Betty, con cinturones, corbatas, trajes, faldas y un montón de cosas más, mientras lo metía en el baúl.-¿Como? No entiendo lo que quieres decir. -Betty se sonroja -Estas son cosas que ya no usaré para que Sofía y Sandra puedan vender y ganar algo de dinero. ¿No me escuchaste decir que voy a pasar el día en la casa de las niñas?-Ay no, Betty, no me digas que me vas a dejar así, en vez de quedarnos aquí juntos. Era sólo para tu padre, ¿no?-No -beso- Es verdad, voy a conocer a las chicas. Sofía y Sandra están pasando por un momento difícil, así que todos pensamos en hacer un bazar para ayudarlas a recaudar algo de dinero y Sofía todavía tiene a sus hijos.-Y si te doy dinero, dejamos estas cosas y les das excusa a las chicas de que no vas a poder ir, dices nada y nos pasamos toda la tarde juntas, ah, porque te tienes que quedar con tu prometido. -la besa, apretándola contra sí mismo.-No te vuelvas loco, es solo un dia. Debes conocerlos y sabes que no aceptarían algo así.________-Ay, Betty.-Prometí ayudarlos, son los únicos amigos que tengo. O sea, yo tengo a Nicolás, pero es diferente,-¡Claro que son mujeres como tú! Aunque, los conozco y son chismosos.-¡No digas eso! Ellos no saben que nos conocemos, solo Aura Maria y ella necesita ver que tan bien hablan de ti.-¿Ah sí? ¿Es lo que?-Que a pesar de estar nervioso, ogro, es una buena persona, ¡que te extraño!-Ah sí, a pesar de ser chismosos, los quiero mucho, ¿sabes? Conozco a Sofía desde hace más de diez años e INesita es la empleada más antigua, ¡la conozco desde siempre! ¿Le conseguiste trabajo a Sofia?-Sí.-Qué buen corazón. -Pon tu mano en tu pecho.-¡No vengas, conozco tus trucos!- ¿Sabes, eh? Dije que lo iba a tomar y lo haré, pero seamos claros, llámame.Sabes, parece extraño que se hiciera amiga desde el cuartel, a pesar de que no trabajaba para la empresa.-¡Sería raro que se hiciera amigo de las modelos ojojo y no de la fea cuartel!-¡No hables así, sabes que no es feo!-Yo tampoco soy modelo.-Y quien quiere modelo, ah?- Dilo ahora.-Reconozco que ya tuve este enamoramiento de las modelos, pero -beso- ahora muerde tus labios- Ahí, Armando.-Vamos a mi apartamento, ¿de acuerdo?-Te prometo que te llamaré.-¿Vas a pasar toda la noche allí?-No, mi papi me mata si no llego a casa. Pero te llamaré.-Quiero buscarte.-Oh, qué caballero.-Sabes que es peligroso que una dama viaje sola en un taxi.-No hay peligro, los asusto con mi apariencia.-Él sabe. - La toma del cuello para darle un beso - Si sigues hablando así, voy a tener que quitarte el tuyo y demostrarte que no eres nada fea.-No, reservé con las chicas. soy hermosa ojojo! hermoso para ti¿Qué importa, ah?quiero ser para tiEs lo que necesito bésalaBetty incluso pensó en quedarse con él, su piel lo pedía, su cuerpo lo deseaba, pero su sentido del deber hablaba más fuerte, se había comprometido con las chicas.Aparte de eso, tenía curiosidad, porque nunca lo había visto y hoy lo leerían.Lo que no sabía es que las chicas planeaban un día y una noche típicos de chicas, con películas, palomitas, helados, masajes y embellecimiento._____-¡Hola chicas!-¡Hola Betty! Finalmente llegó.-Whoa, ¿quién te dejó aquí? Vi el sonido de un coche.-Eh, es mi padre.-¿Tu padre tiene un auto así?-Debe ser rico.-Eh, no tanto ojojo!-Y pensé que era de tu novio.- ¿Novio, yo?-Betty, dime.-No es realmente un novio, pero...-Ay, chicas, no ven que Betty estaba avergonzada. Ya te dije que no seas tan indiscreto.- Cambiando de tema, chicas, veamos la ropa.Sandra estaba aprensiva, ni siquiera la lectura la había alentado, prefería, en lugar de un amor, que hubiera aparecido un trabajo, mientras que Sofía, se avizoraba que soplaban nuevos vientos, iniciaría una nueva etapa, con muchos desafíos.-¿Quién conoce un nuevo amor?-Oh no, no me interesa.-Imagínate si no se ha olvidado del idiota de Efraín.-Porque desde que la ofrecida está desfilando, la ha estado persiguiendo como un perro y ella nunca ha estado ahí para responderle.-Bien hecho.- Ay, Sofía. Bueno, no aceptes. Conseguir otro. Está lleno de triplepapitos maduros por ahí.-Como quien, eh, Aura Maria?-Ah, no sé. No tiene al hermano de don Roberto, parece soltero otra vez.-¿Y quién dijo que me preocupo por ese viejo? ¿Mayor que yo?-Ah, pero es muy guapo. Ya sabemos de dónde la sacó don Armando.-¿Y crees que uno de los Mendoza le daría la pelota a alguien del cuartel?En ese momento, Aura María miró a Betty, quien jadeó.-Oh, ¿qué pasa Betty?-Voy a tomar agua.- ¡Pues tómalo, porque el siguiente eres tú!Betty no quería participar, pero ante la insistencia de las niñas terminó aceptando, así que, como dijo Mariana, dividió las cartas en tres montones, tomando la primera carta de cada montón.La primera carta, que representaba el pasado, se colocaba a la izquierda, la segunda, que representaba el presente, en el medio, y así sucesivamente. Betty nunca lo había visto de cerca, así que tenía más que curiosidad.Las cartas indicaban que tendría éxito profesional, pero que primero pasaría por aflicciones y dificultades financieras, para lo cual se necesitaba sabiduría.-Tu vida profesional está entrelazada con tu vida amorosa. – dijo mariana.-¡Mmm! Entonces, ¡tienes un prometido! - dijo berta-¿El es bonito?-¿Es alto?-¿Único?-Oh, chicas, no es del todo un novio.-Ay, chicas, déjenlo, Betty.-Es que no lo conoces.- Bueno, tienes que presentarnos.Betty trató de ocultarlo, Aura María le sonrió: ¿Podrá finalmente engancharlo?-No debería ser importante.-Oh, sí es importante. Quítatelo de nuevo. ¿Ver? ¡La confirmación! Aparte de eso, pasarás por una transformación que cambiará tu vida.-Podría hacer un cambio de look completo.-Oh no, estoy bien como estoy.Las chicas se miraron. No sería una mala idea.Todavía me intrigaba lo que decían las cartas cuando llegó Aura María con algunas cosas.-¿Que es eso?-¡Fresco, meada! Estas son cosas que eran mías que le doné a Sofia y Sandra para hacer el bazar, ah pero luego tengo otras, ahora las vamos a usar.-¿Como asi?-Ay, Betty, disfrutemos que vamos a pasar la noche de chicas y no solo leamos cartas, hablemos y veamos películas, sino también hagamos un cambio total, querida.-¿Qué?Habían insistido tanto que no había manera de decir que no.-Eso mismo."No vas invicto hoy", dijo Sandra.-¿Puedes teñir también la raíz de mi cabello? Quiero presentarme decentemente. - dijo Sofía.-Lo hago por ti.-¿Y desde cuando te tiñes el pelo?-Yo pinto a mi tía.-¡Oh, chicas, si no tuviera que cuidar a Betty, lo haría!-Déjalo entonces.-No, de todos modos. – dijo Aura María.Entonces, mientras los niños de Jimmy y Sofia jugaban con los de Bertha, las niñas trataron de convencer a Betty.-Ay, Betty, relájate, imagina, tú llegando toda hermosa y sorprendiendo al triplepapito.-Ay, no sé, Aura María.-¿Se van o no?-¡Shh! Aura María, aquí nadie sabe, pero sí nos vamos. - dijo ella, avergonzada.-¿Quieres matar a este hombre de una vez por todas? Oh, genial, no me mires así, le digo con ganas, dale la razón. Sorpréndelo, cambia, transforma. Córtate, aféitate, ponte un atuendo provocativo.-Ay, Aura María, no sé.Usar argumentos para convencerla.Ay, tu prometido va a estar así, babeando, se van a hacer ricos pegándose. -Dijo Sandracon el apoyo del cuartel, Betty termina aceptando.-Oh, necesito hacer una llamada. ¿Me prestas tu teléfono, Sofía?-¿Para quién?-¿A tu prometido?-Ay cuenta.-Se volverá loco cuando te vea.-Sí, estamos haciendo algunas cosas y luego me iré. Si, les avisaré (Va a haber una sorpresita, espero que les guste.)-¿Hola?-¿Betty?-Sí.-Pensé que no me llamarías.-Oh, lo siento, es que las chicas, hemos estado haciendo tantas cosas.-¿Qué haces con estos del cuartel?-Ay, Don Armando. - Dijo retorciendo la punta de su cabello. -Cosas de chicas.-Estaba pensando, ¿va a durar toda la noche allí? Podría atraparte, para que podamos estar juntos.-Me quedo hasta las 11, ya sabes como es mi padre, no me deja pasar la noche.-Lo sé, pero luego puedo recogerte y llevarte a casa.-No es necesario, le pido a Nicolás que me recoja o tomo un taxi.-De algún modo. Voy a conseguirlo. No me gusta estar en un taxi y Nicolás iba a ese cóctel hoy.-Oh, lo olvidé.- Entonces te buscaré.Colgó sonriendo, ese hombre le encantaba.-Vamos,  Betty!

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