Capítulo 45- De rumba con las muchachas

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No lo podía creer, Aura María la estaba invitando a dar un paseo con las chicas del cuartel.-¡Oh, vamos, meada!-Ahi no se.- Sería muy difícil convencer a mi padre.-Oh, no. ¿Pero, cuántos años tienes? ¿O realmente tienes planes de salir con el doctor y te estoy arruinando los planes?-Quien me diera. No hemos salido desde ese día...-¡Ay, que pena! ¡Pero no seas así! ¡Amarás! Salgamos con las chicas. ¡Las chicas son realmente geniales! ¡Nos divertimos mucho! Bailamos, bebemos, jugamos y cuando podemos, ¡hasta pescamos!-¿Usted pesca? Entonces en el río?- ¡Ya ya! ¡Pescamos a los hombres, mija!-¡Ay, esto no!-¡Pero esto no es obligatorio, ya que después de pasar muy rico con don Armando es difícil bajar el estándar!-Aura Maria, había otra cosa que te quería preguntar, ¿tus amigas son de Ecomoda?-Sí.-Quería que no mencionaras que me viste con don Armando.-¿Está seguro? ¡Porque todos se morirían de envidia! Imagínese si don Armando no sale con mujeres que no son modelos.-Por eso mismo.-¡Está bien! No te entiendo, pero está bien.-Entonces que esperas, salgamos a conocer hermosos papitos!Así que Beatriz se arregló lo mejor que pudo, Seu Hermes estaba molesto.-Oh, papá acaba de conocer a un amigo de la universidad y me invitó a ir al teatro hoy. No tardo.-Podría haberle pedido al Dr. Mendoza que te acompañara.-Pero si ahora solo anda con Nicolás.-Ser a más tardar a las diez, señorita.-¡Pero si solo vas a estar a la mitad de la obra!- Oh, Hermes. Deja que la chica se divierta, es bueno conocer a sus amigos.Después de insistir, Beatriz salió de la casa, tomó un autobús y se reunió con Aura María.-¡Oh, tomó tanto tiempo, mierda!-Lo siento, pero fue difícil convencer a mi padre, casi no me voy.- Oh, ni siquiera digas eso.-Aura María, soy un poco insegura, no sé les caeré bien a las chicas.-Por supuesto que lo harán. Tranquilo. Oh, ¿no dije que íbamos a un bar? ¿Por qué vino así?-¿Algo está mal?-¡Ay no! Es que parece que vas a conocer a tu suegra o en una reunión de padres. ¿Eres siempre así de seria o viniste del trabajo?-Vengo de casa. Pero solo tengo ropa así.-Ai mi hija, porque hasta mi ropa de iglesia es más escotada que esta.-¿Oh mira? ¡Mejor vuelve a mi casa!-Tómatelo con calma, pis, Él tiene una manera para todo. Cuando llegues, solo quítate este abrigo y.... -Pon tu mano en el capul.-¿Qué es esto?-¡Ojojo es mi capul!-Eso ya lo sé, pero necesitas eso –dice tomando la baba en un pañuelo- para estar así?-Es para que el viento no la levante y la saque de su lugar. ¿Por qué te ves mal?-Mira, quería ver cómo era sin él, pero déjalo por hoy. ¡Lo haremos!


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Cuando llegaron al lugar, por consejo de Aura María, Betty se quitó el abrigo, dejando solo su blusa con mangas de encaje.Las chicas ya estaban allí.-¡Oh, tomó tanto tiempo! ¿Tu madre no quería estar con Jimmy?-¡Permaneció! Pero tenía que decir que saldría con Freddy, a ella le gusta. Me tomó un tiempo, porque tengo que encontrarme con una amiga, chicos, ¡esta es Betty! – lo presenta.Tan pronto como muestra sus dientes metálicos, las chicas, especialmente Sofía y Bertha, sienten asco. En Mariana y Sandra despierta curiosidad y en la dulce Inesita, ternura.Beatriz siente que no es bienvenida y quiere poner alguna excusa y marcharse, pero Aura María la toma del brazo y la hace sentarse.-¡Estos son mis amigos, al igual que tú! Chicas, ¿qué pasa? ¡Saluda a Betty!-¡¡¡HOLA!!!-¡Bienvenida, hija mía!-¡Esta es la dulce Inesita!- ¡Contento!-Estas son: Sandra y Mariana, amigas inseparables.-Somos amigos desde que éramos niños.-¡Placer!-Estas son Sofía y Bertha, las únicas casadas del grupo.-¡No soy casada! ¡Soy solo una madre de dos hijos y abandonada por ese sinvergüenza! ¡Imagina que me dejas por alguien!-¡Qué horror! - Betty se sorprendió.-Ya estoy casada, tengo dos hijos, mi gordito y yo estamos muy bien.-Él la deja comer lo que quiere y hace todo por ella. -Dijo Sandra.-Esto es envidia. - dijo Bertha sobre el comentario de sus amigas-¡Mucho gusto!- ¡Ay, mira quién está ahí! -Dijo Aura Maria -¡Ya lo sé papito!-¡No comenzará!-Oh, solo un baile, me está llamando.-¿Qué pensará Beatriz?-Que bailo con alguien en una discoteca. ¿Quieres venir, Beatriz? Estoy seguro de que te conseguiré un gatito.-¡No, Aura María, por favor!-¡Yo quería! ¡Pero solo si fuera un alemán de dos metros! -dijo Sandra -¿Tú crees que soy Blancanieves para que me persigan los enanitos?Mientras tanto, Armando decide llamar a Beatriz, desde donde se encuentra, se sentía mal por haber salido con Nicolás, sin explicarle lo que realmente hacían, pues ella podría estar pensando algo malo de él.-Hola, don Hermes? ¿Podrías hablar con Beatriz?-¡Don Armando, porque la niña no está!-Pero ¿cómo no?-Porque salio con una excompañera de la universidad..-¿Como asi? ¿A esta hora, don Hermes?-Pues si. No quería irme, pero ¿sabes cómo es Jùlia en un proxeneta? -Julia se enfada y casi le tira algo -Pero iban al teatro, algo así.-¡Ah gracias!Armando colgó preocupado. Sabía que Beatriz no tenía amigos en la universidad y que su único amigo de por vida era Nicolás. En ese momento sonó el teléfono.-Hola, tigre.-¡Habla, Caldeiron!-¿Feliz de saber de mí?-¿Prefieres que mienta o te diga la verdad? ¡Solo di lo que sea que estoy ocupado!-¿Qué otra cosa podría ser? Te llamo para invitarte a unas copas. Tenemos que hablar antes de la reunión de la junta.-¿Qué pasa?-Tiene que ser en persona. No sé, Daniel está haciendo algo.-Vale, mañana paso por tu apartamento y lo hablamos.-Es ese tigre, quería que nos reuniéramos hoy, tomemos unas copas, hablemos de la empresa y luego quiero que nos relajemos... y llamemos a unas mujeres que están locas para salir con nosotras.-¡No! ¿No es suficiente el lío que causaste con Beatriz? ¡Ya ni siquiera quiere hablar conmigo!-¡Qué suerte tienes, tigre! Deberías alegrarte de que el feo se haya bajado de tus pies, el feo de goma. ¿O JAJA YA va a decir que la quería y le gustaba así?-¡DÉJAME EN PAZ, CALDEIRON! Beatriz es mía... MIRA, NO DEBO SATISFACCIÓN! ¡ESTOY OCUPADO!-¡Duerme el ogro! ¡Tú que estás perdiendo! ¡Si te lo pierdes, ve tras tu feo! Y suplicarle.Armando cuelga su teléfono.- Bueno, eso es exactamente lo que voy a hacer. Y no es feo. ¡Sé que no lo es!Entonces Armando va a la puerta de Betty y se estaciona a unas cuadras de la casa de Beatriz, esperándola.En el bar.Las chicas ya no pensaban que Betty era tan rara después de que todas empezaron a beber.- ¡Pues tómate un poco, Betty!A pesar de que no le gusta beber, Betty decide hacerlo para no parecer antipática con sus amigos. Es solo que ella no está acostumbrada a beber, así que pronto, está harta de beber.Es en ese momento que aparece Don Armando en el bar.-¡Oye!-¿Don Armando?-¿Que haces aquí?-¡Vine tras de ti, Beatriz! ¿No sueles salir solo y solo en compañía de mis secretarias? ¡Me quede preocupado!-¡Son buenas chicas! –eructa –¡Disculpe!- Cuando bebo me pongo así también. Pero no me gusta que bebas así. ¡Pero si quieres, bebe conmigo cuando estemos juntos haciendo el amor!-Lo siento, pero me sentí triste.-¿Porque?-¡Porque soy tan feo! ¡Y te gustan las bonitas! ¡Siempre estás en compañía, en buena compañía con las más bellas del país!-Y siempre sola, aun así acompañada, ¡Esto es solo pose y fama, Beatriz! Estar bien acompañado es estar a tu lado.-No sé si puedo confiar en ti. ¡Mejor vete a casa que es tarde! ¡Ya verás cómo me gustas!-¡Está bien, me voy!Don Armando desaparece como si nada en cuanto Betty lo toca.-¡Aura María! ¡Quiero ir a casa! - dijo bettyAura María bailaba abrazada a un chico.-¡Ahora no! ¡Más tarde! ¡Cuando te vayas, te pido que te lleve!-Creo que podemos ir a alguna parte -dijo el hombre apretando a Aura Maria -ese tipo de cosas.-¿De verdad? ¡Oh, entonces vamos! - dijo Aura María, emocionada.-¿Como vamos?-Ay, Rodolfo, ¿puedes dejar a mi amigo en tu casa?-OK. -triste.Las niñas se despiden de Aura María y Beatriz, Bertha se fue con su esposo, quien vino a buscarla a ella ya los demás en taxi.Beatriz la estaba pasando mal, ya que la pareja se besaba históricamente y tenía miedo de que su padre la estuviera esperando en la puerta.Pero en realidad no era don Hermes quien estaba allí. Y sí, don Armando, adentro del carro, para que no lo vean.-¡Pues Betty está entregada! - dijo Aura María-Agradecido. Ojojo! Creo que bebí demasiado, creo que vi el carro de don Armando. – le dije a Aura María.-¿De Don Armando? De nada. ¿Qué haría él en los barrios pobres a esta hora? Aunque algo tienes. ¡La seguirás celosamente!-¿Celos? Ojojo! ¡De nada!Cuando Aura María y el amante del turno se fueron, Armando salió del auto y encontró a Betty tratando de caminar hacia la puerta porque estaba mareada.-¡Buenas noches, Beatriz!-¿Don Armando?-¡No sabía que estudiaste con Aura María en tu universidad!-¿Como?-¡Porque soy tan feo! ¡Y te gustan las bonitas! ¡Siempre estás en compañía, en buena compañía con las más bellas del país!-Y siempre sola, aun así acompañada, ¡Esto es solo pose y fama, Beatriz! Estar bien acompañado es estar a tu lado.-No sé si puedo confiar en ti. ¡Mejor vete a casa que es tarde! ¡Ya verás cómo me gustas!-¡Está bien, me voy!Don Armando desaparece como si nada en cuanto Betty lo toca.-¡Aura María! ¡Quiero ir a casa! - dijo bettyAura María bailaba abrazada a un chico.-¡Ahora no! ¡Más tarde! ¡Cuando te vayas, te pido que te lleve!-Creo que podemos ir a alguna parte -dijo el hombre apretando a Aura Maria -ese tipo de cosas.-¿De verdad? ¡Oh, entonces vamos! - dijo Aura María, emocionada.-¿Como vamos?-Ay, Rodolfo, ¿puedes dejar a mi amigo en tu casa?-OK. -triste.Las niñas se despiden de Aura María y Beatriz, Bertha se fue con su esposo, quien vino a buscarla a ella ya los demás en taxi.Beatriz la estaba pasando mal, ya que la pareja se besaba históricamente y tenía miedo de que su padre la estuviera esperando en la puerta.Pero en realidad no era don Hermes quien estaba allí. Y sí, don Armando, adentro del carro, para que no lo vean.-¡Pues Betty está entregada! - dijo Aura María-Agradecido. Ojojo! Creo que bebí demasiado, creo que vi el carro de don Armando. – le dije a Aura María.-¿De Don Armando? De nada. ¿Qué haría él en los barrios pobres a esta hora? Aunque algo tienes. ¡La seguirás celosamente!-¿Celos? Ojojo! ¡De nada!Cuando Aura María y el amante del turno se fueron, Armando salió del auto y encontró a Betty tratando de caminar hacia la puerta porque estaba mareada.-¡Buenas noches, Beatriz!-¿Don Armando?-¡No sabía que estudiaste con Aura María en tu universidad!-¿Como?Beatriz lo abrazó y comenzó a besarlo.-Sé que te gusta pasar el rato con las hermosas, pero te amo. -beso - te quiero!Pronto, Armando la atrajo hacia él, estaba emocionado, la ropa empezó a volar. Sin dejar de besarla, la tomó en sus brazos y la llevó a su habitación.Las fotos con Marcela seguían ahí y las miraban sobre la amplia cama, pero Betty sólo tenía ojos para Armando, quien le desabrochaba los botones de la camisa y le prodigaba torpes caricias.-¡Ay, Betty!-¡Ay Armando! No me importa que te gusten las bonitas, te quiero mía.-Ay Betty, como te amo. ¡Ya dije!Hacía mucho frío en Bogotá, por lo que los dos llevaban mucha ropa. Al ver que solo estaba en ropa interior, Betty se acercó a él, lo besó y lo jaló hacia la cama. Armando tenía mucha experiencia y por supuesto, no era nada nuevo ver a una mujer excitada antes, pero no como lo estaba Betty. Esa mujer estaba loca y totalmente borracha. Por mucho que quisiera, no podía tenerla. ¿Qué pasaría si el efecto del alcohol pasara y ella se enojara más con él y lo acusara de abusar de su condición? Así que necesitaba ponerla sobria. Ganando tiempo, sabe que se arrepentirá, que tal vez ella quiera irse, pero a pesar de ser compulsivo su padre le enseñó a ser un caballero y con Betty siempre sería su príncipe. Entonces Armando la besó y pensó que iba al baño.Lógicamente, era para refrescarse y tratar de controlarse. El estado de excitación en que se encontraba esa mujer y el olor a licor lo habían vuelto loco. Quería poseerla como ella se lo pedía, pero no podía actuar así. Así que se refrescó y cuando regresó, allí estaba ella en su cama, semidesnuda y totalmente dormida.-¡Ay, Beatriz! Nunca te he visto en este estado.Se acercó a ella y la besó, se quitó las gafas, se acostó a su lado, abrazándola sin hacer nada como nunca pensó que estaría con una mujer.

Daniel Valencia,  presidente de ECOMODADonde viven las historias. Descúbrelo ahora