El huracán Agatha había caído sobre los Outer Banks causando destrozos en cualquier lado de la isla. Nos situamos en el lado norte, concretamente, Figure Eight.
— Brooklyn, debes visitar a los Cameron. — la voz de Elisa Smith hizo rodar los ojos de su hija.
Brooke se encontraba disfrutando de su soledad mientras desayunaba en la cocina hasta que su progenitora apareció.
— ¿Para qué?
— Solo es un acto cortés, hazles saber que espero que no hayan sufrido muchos destrozos. — la mujer cruzada de brazos frente a ella con su habitual expresión fría provocó que elevara su ceja por lo absurdo que eso sonaba.
— Está bien. — accedió la chica después de dar un suspiro. — Por cierto, mamá.
— ¿Si?
— ¿Ha vuelto ya el Internet?
— No. Deberías separarte de ese aparato por unos días. — comenta la señora Smith.
— Bien. — gruñe la chica sabiendo que su teléfono no servirá hasta dentro de unos días.
Después de esa conversación, Brooke fue a su habitación para vestirse con la pieza superior de un bikini azul y unos vaqueros cortos de color blanco.
Apesar de que acaba de terminar un huracán, en Outer Banks seguía haciendo el mismo calor de siempre.
Unos minutos después, la joven Smith se encontraba entrando al jardín de los Cameron donde pudo divisar a Ward junto a la señora Lana hablando con Sarah.
— ¡Brooke! — la voz de la menor de los Cameron se llevó toda la atención de la chica.
— Hola, Wheez. — saluda la mayor revolviendo el pelo de la niña. — ¿Qué tal todo por aquí?
Los Cameron habían llegado recientemente de sus vacaciones en las Bahamas.
— Oh, ya sabes, como siempre. — comenta la menor sonriendo. — Sarah igual de loca, Rafe igual de gruñón...
Brooke suelta una carcajada escuchando como la niña describe a su familia y poco después Ward Cameron se acerca a ellas.
— Papá, sigue sin haber Wi-Fi, no puedo postear nada. — se queja Wheeze cuando su padre llega junto a ellas con la mujer.
— Paciencia, hija, acaba de pasar un huracán — habla el señor Cameron. — Brooke, ¿qué tal todo por tu casa?
— Por suerte, nada grave. De hecho, mi madre me envía para hacerles saber su deseo de que todo esté bien por aquí. — comenta la chica Smith citando las palabras de su madre sin importarle como suene.
— Oh, muchas gracias. ¿Has desayunado, Brooke? Rafe estará haciéndolo ahora, si quieres algo ya sabes...
— No, gracias, ya he desayunado. — interrumpe Brooke.
— Bueno, Sarah está por allí. — la chica sonríe en forma de agradecimiento y se dirige hacia su mejor amiga.
— ¿Qué estás haciendo? — pregunta la morena elevando una ceja mientras ve a la rubia espántando pájaros.
La rubia voltea encontrándose con su mejor amiga a la cual no veía desde hacía unas semanas.
— ¡Brooke! — Sarah enseguida se encuentra estrechando a la morena entre sus brazos. — Te he echado de menos.
— Yo también, Saritah. — dice burlona la morena. — Por cierto, ¿qué hacía aquí la señora Lana?
— Parece que Scooter Grubbs ha desaparecido en el mar durante la tormenta. — contesta Sarah dejando su actividad a un lado. — Vayamos dentro.
Ambas comenzaron a caminar hacia el interior de la casa mientras continuaban su conversación.
— No entiendo. ¿Qué hacía Scooter en el mar durante un huracán? — pregunta Brooke frunciendo el ceño mientras su amiga se encoge de hombros.
— No lo sé, pero si se arriesgó de esa forma, debió ser algo importante. — dice Sarah comenzando a subir las escaleras.
— Supongo.
— ¿Brooke? ¿Es tu impertinente voz la que escucho? — Rafe Cameron hace acto de presencia cuando Brooke ya estaba en el primer escalón de las escaleras.
— No, creo que tienes tantas ganas de verme que tienes alucinaciones sobre mi. — habla burlona la morena.
El rubio desliza su lengua sobre sus dientes mientras una sonrisa de lado aparece en su rostro.
— No seas narcisista, Brooklyn. — habla el chico acercándose a ella.
— Me parece gracioso que me digas eso, tú precisamente. — dice la morena pasando sus brazos alrededor del cuello del chico para abrazarlo.
El mayor de los Cameron responde gustoso el abrazo aprovechando para oler el perfume de la chica que tanto había extrañado esas semanas.
— ¿Podéis dejar de coquetear por un momento? — el grito de Sarah se escucha desde la planta de arriba provocando una leve risa sarcástica por parte de Rafe y que Brooke ruede sus ojos.
— Nos vemos, Brooke. — dicho eso Rafe se separa de ella revolviendo su pelo y se dirige hacia el jardín.
La morena sube hacia la habitación de su mejor amiga donde la rubia la espera de brazos cruzados.
— ¿Qué? — pregunta Brooke observando a su amiga.
— Nada.
— Vale.
— ¿Te interesaría ir a una fiesta en la playa? — pregunta la rubia.
— ¿En la playa? — pregunta Brooke confundida sabiendo que los Kooks hacen las fiestas en sus propias casas.
— Si, habrá turistas, Kooks, Pogues...
— Pogues. — repite la morena. — Nada bueno sale cuando Kooks y Pogues se juntan.
— Venga, será divertido. — Sarah le resta importancia, intentando convencerla.
— Está bien, vale. — Brooke eleva sus manos en forma de rendición.
— ¡Genial! Ve a tu casa a ponerte guapa. Topper y yo te recogeremos. — informa la rubia.
Segundos después, Brooke se encontraba de nuevo en el jardín de los Cameron donde cruzó miradas con Rafe que estaba por subir en su moto y regresó a su casa.
— ¡He vuelto! — grita la morena cuando entra en su casa aunque no recibe respuesta.
La chica sube hasta la habitación de Elisa con el ceño fruncido ante el silencio, su madre no solía salir sin avisar o dejar una nota.
— ¿Mamá? — murmura Brooke entrando en la habitación la cual encontró vacía.
Era extraño, por lo general Elisa era muy estricta y ella era la primera que avisaba cuando iba a salir o si llegaría tarde.
Brooke no le dió demasiada importancia así que fue a su habitación y comenzó a buscar algo que ponerse para esa tarde.
Nota de la autora 🪐
•Primer capítulo!!
¿Opiniones? ¿Qué les parece la madre de Brooke? ¿Su relación con Rafe? ¿Con Sarah?
•No olviden citar para más capítulos.
¡TIKTOK!
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𝘧𝘢𝘷𝘰𝘳𝘪𝘵𝘦 𝘤𝘳𝘪𝘮𝘦 ━━━ Rafe Cameron
FanfictionBrooke había tenido una vida relativamente normal durante toda su vida, a pesar de que no se llevaba especialmente bien con madre. No fue hasta ese verano que toda su vida se empezó a venir abajo. Lo que empezó como una pequeña aventura con un grup...