Brooke había tenido una vida relativamente normal durante toda su vida, a pesar de que no se llevaba especialmente bien con madre. No fue hasta ese verano que toda su vida se empezó a venir abajo.
Lo que empezó como una pequeña aventura con un grup...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Al día siguiente, Brooke se dirigió hacia el Chateau donde los chicos la esperaban para ir a recoger a Kiara y Sarah.
Durante el camino, Brooke deseaba que su plan haya funcionado porque si no tendría que aguantar las quejas de sus dos amigas.
Kiara y Sarah estaban sentadas en el borde del barco cuando llegaron junto a ellas.
— Reconoced que ha tenido gracia. — comenta John B mirando a ambas.
— Que mente privilegiada tiene la princesa Kook. — ríe JJ pasando un brazo por los hombros de Brooke la cual sonríe de lado.
— Brooklyn. — habla Kiara. — Tú has sido el cerebro, ¿eh?
— Siempre lo soy. — ella sonríe encogiéndose de hombros aún debajo del brazo de JJ.
— ¿Ha funcionado?
— Estamos dispuestas a trabajar juntas. — asiente Sarah.
— Pero os la devolveremos. — avisa Kiara. — Dormid con un ojo abierto.
— Bueno, eso es una victoria. — dice John B.
— Toma ya, toma ya. — ríe JJ.
Los chicos celebran haciendo una especie de saludo moviendo sus dedos.
Brooke mira confundida a JJ cuando él la codea levemente para que haga el saludo Pogue también. La morena solo sonríe y hace el saludo con los chicos.
— El porro era la clave. — asegura el rubio.
— ¿Listas para ir a por el tesoro? — pregunta John B.
Kiara y Sarah se miran entre ellas y sonríen para después asentir.
[...]
En la noche, los Pogues llegan frente a la casa de los Crain para buscar el oro.
— Gracias a todos por estar aquí. — habla John B.
Brooke y Kiara se miran sonriendo para después mirar a John B. — Siempre.
— Venga, las pajas para luego. — dice JJ saliendo de la camioneta.
El grupo de adolescentes salta el muro de la casa y caminan por los jardines en silencio hasta que de repente la luz de la entrada principal se enciende.
— Mierda.
— Agachaos. — ordena Brooke y todos se esconden detrás de los arbustos.
— Tienen luces con sensor de movimiento. — deduce Pope.
— Entonces, ¿nos movemos muy lentamente? — pregunta JJ.
