Segunda oportunidad (Drakey)

Extra 1

-¿E-embarazado? Eso debe estar mal, soy hombre. - El doctor me miro como si fuera estúpido.

-Sano-san, usted es un doncel así que puede dar a luz a bebes.

-E-está loco. - Sudaba frio, esto debe ser mentira. - Iré a otro hospital, aquí solo me mienten. - La expresión aburrida del doctor desapareció, se acomodó los lentes y apoyo sus codos en su escritorio.

-Sano-san, ¿Le hicieron los exámenes para saber si es un doncel?

-Eso no-

-A los 6 años les hacen la prueba a todos los niños, ¿Sus padres no lo llevaron a hacerse el examen? - Negue aun incrédulo, el doctor se sorprendió al notar que no mentía. - Que irresponsables. - Ignore sus comentarios y toque mi vientre, debo estar soñando, no, está mal, es una pesadilla, Shin y el abuelo nunca me hablaron sobre los donceles, si se supone que ese examen lo hacen a los 6 años entonces Shin-nii si lo hizo, él tenía conocimiento, él- Sano-san, escúcheme. - Sali de mis pensamientos por el reproche del doctor. - Por lo que veo él bebe no estaba en sus planes, está en su séptima semana así que está a tiempo.

-¿A tiempo para qué?

-Para abortar. - Me congele, que mierda estaba diciendo.

-¿U-un aborto? - Mi voz tembló y por acto reflejo cubrí mi vientre. - De que está hablando. - El hombre dejo de ver mis resultados y suspiro ya cansado.

-Sano-san. - La frialdad en su voz me aterraba, me aferre a mi ropa asustado, necesitaba a Ken-chin. - Un bebe no es un juego, usted tenía nulo conocimiento sobre su estado por lo que deduzco que nunca contemplo la posibilidad de tener un bebe, ¿O me equivoco?

-No, pero- Acaricie mi vientre, el doctor espero. - Pero yo...

-Entiendo, lamento sonar tan brusco. Por favor piense cuidadosamente si desea continuar con el embarazo, por el momento le recetare unas vitaminas. - Asentí ante las indicaciones y escuché otras más.

Agradecí mentalmente que el hospital quedara cerca al lugar donde me estaba quedando, ya llevaba más de un mes viviendo en esta ciudad y todo iba relativamente bien, al solo saber pelear terminé encontrando un trabajo de seguridad en un bar, era buena paga y poco esfuerzo, por lo que me ayudo a salir de apuros económicos.

Un bebe.

Camine al baño y me alce la sudadera que llevaba puesto, mi abdomen estaba marcado por los músculos, no era el cuerpo de alguien que esperaba un bebe.

-Siete semanas. - Susurre, como si escucharlo de mis labios me volviera más consciente de lo que sucedía. - Esto debe ser una broma.

Sacar cuenta de cuando fue la concepción no fue difícil, el tiempo coincidía perfectamente a cuando con Ken-chin andábamos celebrando su nuevo taller, solo en momentos especiales le gustaba hacerlo sin condón y no es como que yo me quejara ya que sentirlo directamente era mucho mejor, pero Ken-chin siempre fue de las personas precavidas.

Ken-chin...

¿Debería volver?

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-Chico aun es temprano.

-Buenas tardes, Tanaka-san. - Le sonreí al dueño del bar donde trabajaba. - Lo sé, es solo que no aguantaba estar encerrado en ese cuarto.

-Ya te dije que deberías buscar una linda novia, así tendrías con quien pasar el tiempo. - El mayor siempre hablador. - O si no eres de chicas que tal un chico guapo, yo qué sé, ¿Qué te van más?

-No sé, no me molestaría tener ambos. - El mayor se carcajeo y aproveche el momento para escabullirme.

-¡Si me dices cuál es tu tipo te podre presentar a alguien! - Tanaka-san grito al notar que ya estaba entrando a los vestuarios, no le respondí y entre a la habitación.