Capítulo 16: Enana agresiva.

146 20 3
                                    



Había conseguido que el ikran volase, y ahora yo le estaba "controlandolo" por decirlo de alguna manera. Trataba de no mirar hacia abajo, porque si antes me encontraba a grandes alturas, ahora estaría el doble de alto.
La adrenalina por haber estado al borde de la muerte, recorría mis venas, y en cierta forma, había reducido mi pánico a las alturas. En esos momentos yo solo quería pisar tierra firme, pero había un problema. No tenía ni idea de cómo ni de dónde hacerlo. Estaba completamente perdida, y lo único que podía hacer era tratar de buscar de nuevo el lugar donde se encontraban los demás ikranes y aterrizar de una vez por todas.

Ley'ha: - Oye, ikrancito... - le llamé. - ¿Me puedes soltar de una vez y dejar que baje a tierra firme? - le pregunté un poco molesta.

El ikran rugió, y asintió con la cabeza. Después, se volcó bocarriba y sacudió su cuerpo con fuerza. Lo hizo tan rápido, que no tuve apenas tiempo de reaccionar y agarrarme a él. Por lo que perdí el equilibrio y caí al vacío.

Ley'ha: - ¡AHHHHHHHHHHH! - chillé. - ¡NO ME REFERÍA A ESTO! - grité mientras caía.

Por segunda vez consecutiva en el día, estaba cayendo desde grandes alturas hacia el bosque de Pandora. Y esta vez, había sido por mi culpa, ya que yo le había pedido al ikran que me soltase.
Si hubiera sabido antes de venir a este lugar que iba a ser secuestrada por una bestia voladora y después arrojada al vacío, sin duda alguna no hubiera venido jamás.

El bicho alado había desaparecido de mi vista, así que, ya sí que no tenía posibilidades de sobrevivir. Al menos eso era lo pensaba, porque cerré los ojos con fuerza y me preparé para sufrir el impacto de mi cuerpo contra el suelo, o los árboles.
Respiré profundamente y traté de disfrutar los últimos segundos que me quedaban como avatar. Por lo menos, seguiría viviendo en mi cuerpo de humana, aunque ya no podría disfrutar del bosque como ahora.

Repentinamente, escuché el batir de unas alas fuertemente, y algo impactó contra mi cuerpo. Pensaba que seguramente me había estrellado contra algo, pero me extrañó que hubiera dolido tan poco. Abrí los ojos lentamente, y lo que vi me dejó sin palabras.
Estaba volando. Miré hacia el frente, y vi la cabeza de un ikran de color verde azulado, con manchas marrones por el cuerpo.
No era el mismo ikran que me había dejado caer, ni tampoco el de Kiri. Este era diferente, pero aun así se me hacía bastante familiar.
Sentí algo rodearme en el estómago, así que bajé la mirada para comprobar que era. Quedé en shock al ver que se trataba de un fuerte brazo de color azul. Giré la cabeza hacia atrás, y ahora, si que me llevé un susto de muerte.

La persona a la que odiaba más que a Samantha, era la que me había salvado de morir aplastada como puré de patata en el suelo.

Ley'ha: - ¡AHHHH! - chillé asustada al verle.

Él me miró confundido, y frunció el ceño molesto.

Neteyam: - Como chilles más, te suelto y dejo que mueras. - me amenazó.

Ley'ha: - ¡¿Pero tú que haces aquí?! - pregunté con los ojos muy abiertos.

Neteyam: - ¿Otra vez tú? - preguntó molesto. - ¿No debería hacerte yo esa pregunta? - preguntó retóricamente. - Este no es lugar para ti, además, ¿Cómo es que estabas montando en un ikran? - preguntó.

Ley'ha: - Si aterrizas en el suelo te lo digo. - dije casi temblando por el miedo.

Neteyam: - ¿Otra vez tratas de chantajearme? - preguntó. - Recuerda que la otra vez no te salió muy bien. - recordó.

Negué con la cabeza nerviosa, y me aferré a él. Ahora mismo, acababa de perder toda mi dignidad al haber sido rescatada por este paleto, que más daba si la perdía un poco más por abrazarle. Por lo menos ahora estaba segura y con menos riesgo de caerme.

Nueva vida//NeteyamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora