Capítulo 44: Insteresante...

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                                               LEY'HA

Suspiré agitadamente, y volví a negarme a las preguntas de Kiri.

Ley'ha: - Que no me pasa nada, Kiri. Estoy bien. - afirmé, tratando que dejase ya el tema.

Kiri: - No, no lo estás. Tu cara está roja y pareces enfadada. - indicó. - ¿Ha sido Neteyam? - preguntó. - Si quieres le tiro de la cola, ya verás que no vuelve a molestarte más. - dijo, muy segura.

*Nota para los latinos/as: (a cola me refiero a la de atrás, no la de delante, JAJAJAJJA. )

Jaeb: - Eso, ¡y yo le muerdo la oreja! - exclamó, uniéndose al plan.

Ambas le miramos desconcertadas, y este asintió insistente.

Kiri: - Eso ya es pasarse un poco, ¿no? - preguntó asustada. - Creo que lo mejor será que me lo dejes a mí....- indicó.

Este suspiró, y miró a Lo'ak desde la distancia.

Jaeb: - Mi pololo me ha abandonado.... Ya no me queda nadie con quien poder burlarme y sacar mi humor racista....- inidicó, irónicamente.

Nos volvimos a quedar en un silencio incómodo, esperando a que alguien volviese a hablar. Para nuestra suerte, Lo'ak y Tsireya volvieron ha acercarse con una sonrisa y esta nos señaló una cabaña.

Tsireya: - ¡Bienvenidos a vuestro mauri! - exclamó ilusionada.

Tuk, que hasta el momento había estado medio adormilada por su larga siesta, se hizo presente entre nosotros.

Tuk: - Pues que fea, a mí me gustaba más la otra.... - indicó, sin miedo a la reacción de los demás.

Tsireya, la contempló sorprendida, y a la vez disgustada por el desagrado de la pequeña. En su defensa, salió Lo'ak como loco.

Lo'ak: - Cállate, Tuk. - le ordenó. - Más feo tienes tú el pelo después de haberte pasado 1 día durmiendo. - indicó, y volvió a girarse hacia Tsieya. - Tranquila, eres preciosa....- dijo, y todos nos quedamos en shock. - ¡Q-QUIERO DECIR, QUE ES PRECIOSA LA CASA! ¡Bueno, el mauri! - se corrigió, después de darse cuenta de su error.

Las mejillas de Tsireya tomaron un tono rosado y una sonrisa nerviosa se mostró en su rostro, dejando al descubierto unos hoyuelos bastante parecidos a los míos.
En su rescate, intervino su hermano mayor, Ao'nung, al que no le hizo mucha gracia dicha equivocación.

Ao'nung: - Ehhh, venga, tira para dentro antes de que lo único precioso que veas sea mi puño contra tu fea cara. - le ordenó, indicándole que entrase al mauri.

Jaeb, se interpuso valientemente delante de su amigo, y abrió la boca para la sorpresa de todos.

Jaeb: - Oye boquerón envinagrado, baja esos humos que parece que te están haciendo en una barbacoa. - le indicó. - Además, tienes un trozo de comida en los dientes. - dijo, y entró al mauri sin más.

Ao'nung, le miró desconcertado, y con la legua, trató de buscar dicho trozo de comida que Jaeb se había inventado que tenía.

Lo'ak: - Te iba a responder, pero creo que mi "bro" te lo ha dejado claro. - dijo. -Hasta mañana, Reya, descansa bien. - se despidió con una sonrisa bobalicona y entró tras de él.

La siguiente en pasar por delante de él, fue Tuk, la cual no decidió perder su oportunidad para insultar a Ao'nung.

Tuk: - Apestas a pies. Adiós. - le dijo, y se marchó también.

Nueva vida//NeteyamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora