○~Sobrenatural~○

16 (4ª Temporada)

Karina casi dio un grito eufórico cuando vio a Lino y a María llegar al laboratorio.

- ¡Estáis vivos, estáis-
- Los dos estamos muertos.

Hablaron los más jóvenes a coro, riendo después por la casualidad, hasta que Karina le dio una bofetada a Lino. Ahora tenía ambas mejillas con la marca de las manos de María y de Karina.

- ¿Cómo que tú también estás muerto? ¿Qué cojones, Lino?
- Era necesario, mamá.

Se excusó el pelirrojo, poniéndole ojitos de cachorrito abandonado.

- Lino, ¿es cierto lo que acabo de escuchar?

Habló Bruno, que estaba apoyado en el marco de la puerta, arqueando una ceja y con cara de "vas a cobrar pero bien, chaval".

- Por favor, tenme piedad, Bruno. Es la segunda bofetada que me dan hoy.
- No te quejes, eres masoquista.

Recordó María, dándole un leve codazo.

- A ti te permitiré pegarme todas las veces que quieras sólo por haberme besado, Mary Meri.
- Sí, sí, lo que tú digas, pero no me llames así.

Dijo María, rodando sus ojos.

- Hemos localizado la base del enemigo. El director ha "revivido", y creo saber dónde están Sakura y Liam.
- ¿Y Abel?

Preguntó Karina, con un brillo esperanzador en sus ojos.

- Está localizado, y, ahora que los demás ya están en la base del enemigo, sólo faltan esos tres para estar todos juntos.

Karina y Bruno se miraron. La pelirroja se dirigió a unos botellines que tenía preparados a un lado de su escritorio.

- Bebed. Es para curaros las heridas y devolveros las fuerzas.
- Gracias.

Agradeció María, y, a continuación, bebió el contenido de la botella.

- Iremos con vosotros a buscar a Sakura y a Liam. Luego iremos directos a acompañar a vuestros amigos en el campo de batalla.

Habló Bruno, desprendiéndose de su bata de laboratorio, revelando un traje de batalla, como los que habían sido creados para los demás. Karina imitó su acción, mostrando su traje de batalla, también.

- Vamos. Queda poco tiempo.
.
.
.

Kira estaba incombustible. Por fin tenía un "oponente digno". La fuerza y velocidad de los ataques de Violeta eran perfectas para ella.

- Por fin tengo un rival digno.

Habló Kira, rompiendo los hilos con fuerza bruta.
Violeta sonrió.

- Los vivos sois débiles, es normal sorprenderos con cosas así.
- Prefiero enfrentarme cuerpo a cuerpo a la gente, pero estos hilos son la hostia.
- Vaya halago... En fin, dime una cosa, chica fuerte.

Empezó Violeta, pasando sus ataques por un momento.

- ¿Se puede saber por qué luchas exactamente?
- Eh... ¿para mandar este mundo a tomar por culo?
- No, no me refiero a tu misión. Me refiero a qué piensas tú. ¿Realmente vale la pena luchar para destruir un mundo que no te ha hecho nada?