20
Rescatista improvisada
- Bien – la humana sonrió brillantemente-. De acuerdo, ¿cómo lo haremos?
- ¿Haremos? – Las elfas hablaron al unísono.
- Tú te quedarás aquí, Lisa – señaló ese mismo lugar-. Estarás cerca de los caballos, si algo ocurre ellos sabrán guiarte de vuelta al castillo.
- Aunque intentaremos que nada ocurra – interrumpió Jisoo.
Lisa asintió.
- Rodearé la pendiente, cuando esté allá te daré una señal – señaló el otro lado de la pendiente, justo al frente, cruzando todas las carpas y fogatas del claro.
- Bien, los tomaré cuerpo a cuerpo, avísame si estoy por ser descubierta, ¿de acuerdo? – Jisoo estiró su mano para tomar la de Jennie, un fuerte apretón indicando el compromiso hacia la misión.
Entonces la vieron alejarse entre la maleza, Lisa no lo había notado hasta ahora, pero el paso de Jisoo no hacía ningún sonido, nada de tierra, hojas o pierdas siendo aplastadas bajo sus pies, ni el roce de sus ropas con la frondosa vegetación que ahora le ayudaba a perderse entre los árboles. Su capucha verde ayudaba, era el tono adecuado para pasar desapercibido entre las hiervas altas, tanto que Lisa ni siquiera se dio cuenta del momento en el que Jisoo ya no estaba a la vista.
- ¿Cómo sabrás cuando ella esté en posición? – Susurró viendo el rostro concentrado de Jennie en el campo.
- Te darás cuenta – rompió la guerra de miradas que tenía con el prado donde se encontraban los soldados y vio a la humana-. No intervengas, ¿de acuerdo? – Jennie solo pensaba en lo débil que era aquella humana, recordaba lo delicada que se había sentido su piel cada vez que se rozaba con la suya. Ella no iba a arriesgar a Lisa de esa forma-. No importa lo que pase, tu deber es permanecer aquí y huir si es necesario.
Jennie movió su capa, sacando una pequeña daga que almacenaba al otro lado de su espada.
- Ten. No permitiré que se acerquen a ti, pero en todo caso, apunta directo a los ojos.
Lisa asintió, asustada, y tomó la daga entre sus manos, sin dudas era más pesada que un cuchillo de cocina, pero se aferró a ella con fuerza.
Fue allí cuando los oídos de Jennie se crisparon, el pequeño trinar de un pájaro se mezclaba con el sonido del ambiente, sien embargo, Jennie parecía reaccionar a algo en particular.
- Es Jisoo, se encuentra en posición – la cabeza de Lisa razonó que ese trinar entonces era obra de Jisoo, esa era la manera de comunicarse-. Me pondré en marcha.
La princesa élfica intentó alejarse, pero la rápida mano de Lisa tomó su antebrazo deteniéndola en el acto.
- Vuelve a salvo, por favor – pidió aterrorizada ante la simple idea de verse sola en ese bosque y ser responsable de la muerte de aquellas elfas.
Jennie asintió con seguridad, una promesa silenciosa hacia Lisa y hacia sí misma. Ella no iba a dejar que unos cuantos orcos la mataran y mucho menos si implicaba abandonar allí a Lisa.
La elfa se aleja agachada, moviéndose en silencio y cuidadosamente a través de los árboles y la vegetación del bosque. Con sus sentidos agudizados, escucha la charla de los soldados, son toscos al hablar, su idioma siempre lo ha sido y, antes de utilizar un hechizo del habla, cualquiera podría pensar que lo que sueltan son chillidos y graznidos dignos de un animal salvaje. La princesa se escabulle detrás de una de las tiendas, descubriendo que ese pequeño asentamiento ha sido hecho casi de emergencia, pues no han limpiado la zona apropiadamente, permitiéndole cubrirse con la hierba alta.
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Faraway Land || Jenlisa
FanfictionTras mudarse a un nuevo país, Lisa creyó que su vida no seguiría pasando por cambios drásticos. Por ello, no esperaba ser arrastrada a un nuevo mundo; allí las hadas, sirenas y elfos caminar por la tierra sin preocupaciones. Lisa, como la única huma...