Faraway Land || Jenlisa

Hombres fuertes, de acción, serán hoy (Parte II)

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Hombres fuertes, de acción, serán hoy

Parte II

- El arco, a diferencia de la espada, no es una extensión de tu cuerpo, Lisa. Debes aprender a sentirlo como una fuerza externa - instruyó Jisoo con paciencia.

El cielo ya era de un azul brillante, las nubes densas se dispersaban a medida que avanzaba el día y el viento parecía estar a su favor. Francamente, parecía que sería el día más tranquilo de la vida de Lisa desde que había puesto un pie en ese mundo, aunque hablaba muy pronto.

Jennie seguía sentada en su banquillo improvisado, mientras que la ninfa a su lado estaba de piernas cruzadas en el suelo y Rosé observaba divertida desde su lugar tras el timón. Parecía que todas estaban dispuestas a disfrutar el espectáculo, sobre todo desde la cachetada sonora que Lisa le había plantado a la arquera.

- ¿Cómo aprendo a hacer eso? – Cuestionó viendo a Jisoo estirar su mano hacia ella para que tomase el arco.

- Practicando – dijo con obviedad.

Lisa tomó el arco. Era pesado, erróneamente había creído que sería ligero al ver cómo Jisoo lo manipulaba con tanta soltura, pero aquella cosa debía pesar al menos cinco kilogramos. Jisoo le veía con una sonrisa brillante, parecía una madre encantada por ver a su hijo dar los primeros pasos.

- Muy bien, tu mano izquierda debe estar en el medio de la curvatura – guio la mano de Lisa hacia esa área.

La humana pudo distinguir la madera suave en él, pero también el cuero que recubría la empuñadura dónde su mano se posaba, además ciertas protuberancias le indicaban exactamente dónde y cómo sus dedos debían acomodarse, aunque podía sentir que no cuadraba a la perfección.

- Este arco fue hecho específicamente para mí, así que tu agarre en él no será perfecto – explicó Jisoo-. Ahora, tu brazo siempre debe estar firme, si veo tu codo doblarse, te patearé.

Alzó el brazo izquierdo de Lisa y dio un toque el codo para hacerla enderezar. Ante la amenaza, Lisa rápidamente vio a Jennie con una mirada turbada, pero la princesa simplemente negó frunciendo los labios. Ella no dejaría que Jisoo la pateara, claramente.

- El movimiento se genera en tu tronco, hombro y cadera, no en tu codo – ella tomó una posición similar a la de Lisa, sosteniendo un arco imaginario-. Si quieres apuntar a la derecha, mueves la cadera, si quieres apuntar hacia abajo mueves los hombros, pero jamás el codo con el que sostienes el arco, ¿ha quedado claro?

- Mi codo no existe, entendido.

Lisa pudo escuchar la ligera risa de Jennie y la arquera rodó los ojos.

- Ahora, las flechas siempre deben cargarse por encima del nivel de tu mano izquierda, allí se encuentra el reposaflechas – sacó una flecha de su caraj, era de un brillante blanco, parecía mármol en lugar de madera, pero es que el arco poseía el mismo tono-. Toma, carga una y mantenla fija entre tus dedos anular e índice.

La arquera entregó la flecha y Lisa recordó brevemente cómo Jisoo la tomaba y cargaba, era veloz. Intentó hacerlo sin tanto problema, pero mantener el codo recto, poner la flecha y asegurar que quedase en los límites de la cuerda era más complicado de lo que ella creía, realmente necesitó analizar la posición de sus dedos y manos para conseguirlo. Y, aunque tardado, finalmente lo logró y volvió hacia Jisoo con una sonrisa.

- Muy bien – felicitó-. Ahora ténsalo, solo un poco.

La castaña hizo caso, estirando su brazo derecho ligeramente hacia atrás, solo para notar que la cuerda no era fácil, al igual que el resto del arco. Sus músculos se sentían tan tensos como la cuerda y apenas estaba logrando echar la flecha solo un poco hacia atrás, mientras que Jisoo lograba dejar la cola de las flechas a la altura de su propia mejilla.