alas de sombras

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Hawks se movía con agilidad y sigilo, apenas un susurro en la oscuridad de la noche. Su misión era infiltrarse en el escondite de los villanos y obtener información crucial sobre sus próximos movimientos. Al llegar a la casa, una sensación inquietante se apoderó de él, pero no vio nada fuera de lo común.

HAWKS: -susurrando para sí mismo- Listo... ya estoy en la casa de...

Antes de que pudiera terminar su pensamiento, una voz burlona resonó detrás de él.

DABI: Vaya... qué tenemos por aquí... ¿a un héroe? -activa el fuego, iluminando la oscuridad con una luz azulada y siniestra-

Hawks se giró rápidamente, encontrándose cara a cara con Dabi, cuyas llamas crepitaban peligrosamente.

HAWKS: Dabi... -lo mira fijo, evaluando la situación-

DABI: ¿Has volado hasta aquí tú solo, pajarito? -sonríe maliciosamente-

Hawks, sin perder la compostura, extendió sus alas, preparándose para cualquier ataque.

HAWKS: No subestimes a un héroe profesional. Estoy aquí para detener tus planes, Dabi.

DABI: ¿De verdad crees que puedes detenerme? -ríe- Eres valiente, lo admitiré, pero eso no será suficiente.

Con un movimiento rápido, Dabi lanzó una ráfaga de llamas azules hacia Hawks, quien esquivó el ataque con una acrobacia aérea impresionante. Las llamas se estrellaron contra la pared, incendiándola al instante.

Hawks contraatacó lanzando una ráfaga de sus plumas afiladas como cuchillas hacia Dabi. Sin embargo, Dabi las desvió con una barrera de fuego, reduciéndolas a cenizas.

DABI: Tus trucos no funcionarán conmigo, Hawks. Conozco cada uno de tus movimientos.

HAWKS: Y yo conozco los tuyos, Dabi. -respondió con confianza, lanzándose hacia adelante-

El enfrentamiento continuó con una serie de ataques y defensas, cada uno intentando superar al otro. Hawks sabía que tenía que actuar rápido; cada segundo que pasaba, el fuego de Dabi se propagaba más, poniendo en peligro a los posibles rehenes y cualquier información que pudiera obtenerse.

Necesito una distracción... algo que lo saque de balance.

Mientras ambos luchaban, Hawks observó un tanque de agua en la esquina de la habitación. Con una rápida maniobra, dirigió sus plumas hacia el tanque, perforándolo y dejando que el agua se derramara por toda la sala, sofocando parte del fuego de Dabi.

DABI: -enojado- ¡Maldición, Hawks!

HAWKS: Esto es solo el comienzo, Dabi. Ríndete ahora y nadie saldrá herido.

DABI: ¿Rendirme? Nunca. Esta es solo una parte del gran plan.

Antes de que Hawks pudiera reaccionar, Dabi desapareció en una nube de humo. Hawks, respirando con dificultad, se dio cuenta de que la batalla solo acababa de comenzar. Confundido, se acercó al lugar donde Dabi había estado, examinando la zona. No se dio cuenta de que Dabi había reaparecido silenciosamente detrás de él.

De repente, Hawks sintió una presión firme en su espalda y antes de que pudiera reaccionar, Dabi lo inmovilizó rápidamente. Hawks luchó, pero Dabi lo mantenía sujeto con fuerza.

DABI: -sonriendo- ¿Creíste que había terminado, pajarito? -lame el cuello de Hawks de manera provocativa-

HAWKS: -tratando de liberarse- ¡Dabi!

DABI: Vamos, tenemos una cita con el jefe.

Sin más preámbulos, Dabi arrastró a Hawks fuera de la habitación. El héroe intentó resistirse, pero la sujeción de Dabi era implacable. Al llegar al escondite principal, Dabi empujó a Hawks frente a un grupo de villanos y ante su jefe, que los esperaba con una sonrisa satisfecha.

Dabi arrastró a Hawks por los pasillos del escondite hasta llegar a una amplia sala donde varios villanos se encontraban reunidos. Al fondo de la habitación, el jefe, un hombre imponente con una presencia amenazante, observaba con interés.

DABI: -empujando a Hawks al suelo- Aquí tienes, jefe. Un pequeño obsequio.

Hawks cayó al piso con fuerza, sus alas extendidas inútilmente a sus costados. Antes de que pudiera levantarse, Dabi se movió rápidamente, atando las alas y las manos de Hawks con unas resistentes correas de metal. Hawks intentó resistirse, pero la fuerza de Dabi y las ataduras lo inmovilizaron completamente.

SHIGARAKI: Bien hecho, Dabi. -se acerca lentamente a Hawks- Parece que atrapaste a un pajarito bastante interesante.

Hawks levantó la cabeza, mirando desafiante al jefe.

HAWKS: No creas que me quedo aquí por mucho tiempo. Los héroes vendrán.

SHIGARAKI: -riendo- Oh, estoy seguro de que lo harán. Pero para cuando lleguen, ya habremos obtenido todo lo que necesitamos de ti.

DABI: -sonriendo malévolamente- Disfrutarás tu estancia con nosotros, Hawks. Tenemos grandes planes para ti.

Hawks sintió una punzada de preocupación, pero mantuvo la mirada desafiante. Sabía que no podía mostrar debilidad.

HAWKS: No voy a colaborar. No importa lo que hagáis.

SHIGARAKI: Veremos cuánto tiempo puedes mantener esa postura. Dabi, asegúrate de que nuestro invitado se sienta "cómodo".

DABI: Con mucho gusto, jefe.

Dabi se inclinó hacia Hawks, acercando su rostro al del héroe.

DABI: Espero que estés listo para una larga estancia. -susurró, disfrutando de la desesperación en los ojos de Hawks-

Mientras los villanos se dispersaban para continuar con sus planes, Dabi se quedó junto a Hawks, asegurándose de que no hubiera forma de que el héroe escapara. Shigaraki se alejó, dando órdenes a sus subordinados y preparando la siguiente fase de su oscuro plan.

En su posición inmovilizada, Hawks se esforzaba por mantener la calma. Sabía que debía pensar en una manera de escapar y advertir a los otros héroes. La situación era crítica, y cualquier error podía significar la diferencia entre la vida y la muerte.

Tengo que mantenerme fuerte. No puedo fallar ahora. La ciudad cuenta conmigo.

Dabi, por su parte, disfrutaba del control que tenía sobre Hawks. Sabía que mantener al héroe bajo su poder sería un golpe significativo para los héroes y una ventaja importante para su causa.

DABI: -sonriendo- Descansa, pajarito. Vas a necesitar toda tu energía para lo que viene.

Hawks cerró los ojos un momento, concentrándose en mantener la esperanza viva. La batalla apenas comenzaba, y él estaba decidido a luchar hasta el final.

Fuego Y PlumasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora